Contar con copias de seguridad, es muy importante para evitar problemas y perder los archivos. Pero, ¿las haces correctamente? En este artículo vamos a hablarte de errores habituales que debes evitar si utilizas copias de seguridad físicas. Es decir, si utilizas unidades de almacenamiento, como puede ser un disco duro externo, en vez de tener todo en la nube. Es esencial proteger bien los archivos.
Pueden surgir problemas muy variados y van a provocar que pierdas documentos que pueden ser esenciales. Por ello, es imprescindible no cometer fallos y estar preparado para afrontar un hipotético ataque informático o problema con tus dispositivos, de la mejor manera posible y preservar todos tus archivos.
Gestiona bien tus copias de seguridad
Puede que tengas copias de seguridad para guardar todo el contenido de tu ordenador, móvil o cualquier otro dispositivo. Sea cual sea el motivo, es fundamental que lo hagas correctamente y mantengas a salvo los documentos.
Usar dispositivos de mala calidad
Sin duda, el peor error cuando vayas a crear copias de seguridad físicas, es utilizar aparatos de mala calidad. Esto puede ser un problema importante, ya que ese aparato podría dejar de funcionar y perderías todo lo almacenado. Además, podría haber corrupción de archivos y perder parcialmente el contenido guardado.
Nuestro consejo es que siempre adquieras dispositivos que sean de calidad y ofrezcan una buena garantía. No solo debes pensaren el corto plazo, sino a lo largo del tiempo. A fin de cuentas, puedes necesitar esa copia de seguridad en cualquier momento y vas a querer que esté ahí, con todos los archivos intactos.
Tener solo una copia de seguridad
No te recomendamos tener solo una copia de seguridad. Por tanto, consideramos que esto sería otro error. Lo ideal es que cuentes con, al menos, un par de dispositivos donde vas a almacenar tus archivos. Aunque tengas un almacenamiento fiable, de buena calidad, nunca sabes si podría dejar de funcionar por algún motivo.
Además, a ser posible, lo mejor es que tengas esas copias de seguridad en diferentes lugares. De esta forma, si ocurre algo, como puede ser un robo o un incendio, no perderás todo. Intenta no tener todas las copias en una misma zona.
No realizar copias periódicas
¿No realizas copias de seguridad frecuentemente? Esto sería un error. Lo ideal es que tengas esas copias de seguridad lo más actualizadas posible, lo que significa que tendrías que meter archivos recientes de vez en cuando. Según para qué sea esa copia, puede que la tengas que hacer cada día, cada semana, cada mes…
Por tanto, revisa esto y evitarás problemas. Por ejemplo, si sufres un ataque ransomware, en el que un atacante va a cifrar los archivos, vas a querer tener una copia de seguridad lo más reciente posible y así disminuir el daño todo lo que puedas.
No tener en cuenta el tamaño
Esto podría ser un problema, aunque no debería ser tan grave como los anteriores. Básicamente, puede que te quedes sin espacio para guardar tus copias de seguridad. Esto puede ocurrir si no calculas bien cuánto vas a necesitar, tanto a corto plazo como en un tiempo, conforme vas acumulando más.
Por ejemplo, si compras un disco externo de 1 TB para guardar tus copias, pero calculas que vas a ir acumulando cada vez más archivos, tal vez sea mejor que optes por algo superior. La idea es que no te quedes sin espacio cuando vayas a necesitar realmente guardar documentos de forma segura.
Como ves, es fundamental que crees tus copias de seguridad correctamente y no cometas errores. Eso te ayudará a proteger tus archivos y evitar perder documentos que puedan ser importantes. De forma adicional, puedes cifrar archivos con 7-Zip.