Llega el momento de irte de vacaciones, vas a pasar días o semanas fuera y quieres ahorrar luz en casa. Seguro que has llegado a plantearte qué hacer con el frigorífico. A fin de cuentas, suele representar sobre el 30% del consumo mensual, por lo que será mucho más si vas a estar tiempo fuera de casa. Pero, ¿qué puedes hacer para consumir menos electricidad? Te vamos a dar algunas pautas que puedes tener en cuenta.
El objetivo es que, siempre que sea posible, reduzcas el consumo energético. Si vas a pasar varias semanas de viaje, no sirve de nada tener aparatos que consuman energía si realmente no los necesitas. No obstante, incluso con pequeños cambios, sin llegar a apagarlo, puedes conseguir un ahorro.
Frigorífico en vacaciones
Especialmente, esto que vamos a mencionar va a ser más útil si vas a pasar mucho tiempo fuera. Hay personas que se van uno o dos meses a una segunda residencia, por lo que la casa principal queda completamente vacía. Ahí es cuando vas a tener mucho más margen para poder ahorrar energía.
Sube un grado la temperatura
El primer paso que puedes dar, es simplemente subir un grado la temperatura antes de irte de vacaciones. En verano, lo aconsejable es bajar un grado la temperatura del frigorífico respecto al invierno. El motivo es porque, al hacer más calor fuera, cada vez que abres la puerta puede calentarse más el interior. Para evitar que los alimentos puedan deteriorarse, conviene bajar un grado y tener más margen.
Ahora bien, al pasar tiempo fuera, realmente ese frigorífico no se va a abrir. Por tanto, puedes volver a la temperatura habitual en invierno, que sería aumentar un grado. Cuando vuelvas, otra vez podrías bajar ese grado y así evitar problemas. Se calcula que, más o menos, puedes ahorrar sobre un 7% de energía por cada grado de diferencia.
Si puedes, apágalo por completo
Si quieres ahorrar lo máximo posible, lógicamente la mejor manera es apagarlo por completo. Durante esas semanas que estés fuera, simplemente lo vas a desconectar de la corriente y no consumirá nada de energía. Un ahorro interesante, teniendo en cuenta que es electrodoméstico que más gasta.
Para poder hacer esto, tendrías que consumir antes los alimentos perecederos que tengas almacenados. Intenta organizarte, para llegar al último día antes de tu viaje y poder tener la nevera vacía. Siempre puedes dar cosas que te sobren a vecinos, amigos o familiares.
Si lo dejas encendido, apaga todo lo demás
Sin embargo, no siempre es fácil dejar el frigorífico completamente apagado. Puede que no vayas a estar tanto tiempo fuera de casa o tengas algo de comida en el congelador y no puedas apagarlo. En ese caso, sí que podrías apagar todo lo demás y solo dejar encendido el frigorífico, por lo que acabarías con el consumo fantasma.
Para ello, lo ideal es que apagues todos los magnetotérmicos, menos el que corresponda a la cocina, que será donde esté el frigorífico. Podrás mantenerlo encendido, pero apagarás todo lo demás y esto incluye también bombillas y cualquier cosa que aporte al consumo fantasma de tu vivienda.
En definitiva, cuando te vayas de vacaciones este verano, puedes tener en cuenta estas recomendaciones que te hemos dado para ahorrar energía con el frigorífico. Es sencillo de aplicar y lo puedes poner en práctica rápidamente. Incluso podrías usar un enchufe o regleta inteligente para controlar el consumo.