Elegir correctamente la tarifa de luz que vas a contratar, es clave para ahorrar dinero. Vas a encontrarte con muchas opciones, más allá de que tengan o no discriminación horaria. Esto significa que puedes encontrar diferencias en el precio del kWh, del precio en función de las horas del día, tener periodos bonificados, etc. Todo esto puede hacer que, en ocasiones, sea interesante tener una tarifa distinta en invierno y en verano.
Te vamos a mostrar qué deberías tener en cuenta para ver si te compensa o no cambiar a otra tarifa en los meses de verano. Eso sí, generalmente va a ser imprescindible que no tengas una tarifa con contrato actualmente. De lo contrario, tendrías que pagar una compensación por el cambio y es difícil que te interese a nivel económico. Antes de cambiar de tarifa, es vital conocer tus obligaciones contractuales. La afirmación de que «cambiar cuesta dinero» depende directamente de tu tipo de contrato:
- Tarifa Regulada (PVPC): No existe ningún tipo de permanencia. Puedes cambiar de compañía o de tarifa cuando quieras, sin penalización alguna. Solo necesitas preavisar con 15 días de antelación.
- Mercado Libre: Aquí sí puede existir una cláusula de permanencia (máximo 12 meses). Si cancelas el contrato antes de tiempo, la penalización máxima que pueden aplicarte por ley es del 5% de la energía que quedaba por consumir, según el Real Decreto 1435/2002. Revisa siempre la letra pequeña de tu contrato.
Importante: Si tu compañía modifica las condiciones del contrato, tienes derecho a rescindirlo sin coste, tal y como ampara la CNMC.
Cambiar o no de tarifa de luz en verano
Una vez tengas presente qué tarifa tienes actualmente, puedes pensar en varios factores para ver si te interesa o no cambiar a otra. Es posible que sí que puedas ahorrar dinero, pero también podría ocurrir todo lo contrario, y que pueda incluso salir peor económicamente. Por ello, dedicar tiempo a comparar las condiciones antes de firmar es crucial: una elección acertada puede ahorrarte más de un 20% en tu factura anual.
Tiempo que vas a pasar en casa
Es uno de los factores que más impacto directo tiene en tu factura eléctrica. Es posible que tus hábitos sean muy diferentes en invierno y en verano. Por ejemplo, puede que en invierno trabajes siempre fuera de casa, pero en verano tengas la opción de teletrabajar muchos días y, por tanto, pases más horas durante el día en el hogar. También puede que tengas un periodo vacacional que, igualmente, te haga estar en casa más tiempo.
Si ves que hay diferencias importantes, es posible que sí te compense cambiar la tarifa de la luz. Si vas a pasar muchas horas en casa, seguramente te compense una tarifa en la que pagues igual, sin importar la hora del día. En cambio, si vas a pasar casi todo el día fuera, te interesaría una tarifa en la que pagues menos en las horas de por la noche y fines de semana.
Lógicamente, cuanto más tiempo pases en casa, especialmente si la temperatura es extrema, mayor será el consumo. Por tanto, es algo que deberías analizar para ver si te compensa o no cambiar a otra tarifa con discriminación horaria, franjas horarias o con horas bonificadas.
¿El clima varía mucho?
Otro factor a tener en cuenta es el clima. ¿Varía mucho del invierno al verano? Con esto, nos referimos a nivel de tener que utilizar la climatización. Es decir, puede ocurrir que vivas en una zona en la que haga mucho frío en invierno, pero también mucho calor en verano, o bien en otra en la que haga frío en invierno, pero en verano la temperatura sea suave.
Básicamente, necesitas pensar si vas a usar el aire acondicionado de forma similar a lo que hacías en invierno con la calefacción, brasero o estufa. Si ves que en verano, por el clima que hay en tu zona, no vas a necesitar usar la climatización, sí que podría ser interesante cambiar de tarifa, en función de cuál tuvieras en invierno.

Consumo total que tienes
También conviene ver el consumo total que tienes en tu hogar. Es importante ver la factura de los meses y años anteriores. La idea es comparar si hay diferencia entre el invierno y verano, además de si ese cambio de tarifa realmente va a ser algo que notes luego cuando tengas que pagar a final de mes. Cuanto más consumas, más margen puedes tener de ahorro. Si en tu casa se consume muy poca energía, aunque cambies de tarifa, es posible que no notes gran diferencia. En cambio, si el consumo es muy elevado, sí que podrías analizar mejor qué te conviene y así pagar menos.
Factor Clave | Análisis en Invierno | Análisis en Verano | Conclusión / Tipo de Tarifa Sugerida |
---|---|---|---|
Horas en casa | Trabajas fuera, consumo concentrado en noche/finde. | Teletrabajas, consumo distribuido durante el día. | Invierno: Tarifa con Discriminación Horaria (DH). Verano: Tarifa Fija sin tramos. |
Uso de climatización | Alto consumo por calefacción eléctrica en horas punta. | Clima templado, sin necesidad de aire acondicionado. | Invierno: Tarifa Fija para evitar picos. Verano: Tarifa con DH para ahorrar en el resto de consumos. |
Consumo total | Facturas elevadas por mayor consumo general. | Consumo moderado, facturas más bajas. | A mayor consumo, mayor es el potencial de ahorro con un cambio de tarifa bien estudiado. |
En definitiva, habrá ocasiones en las que sí que sea útil tener una tarifa eléctrica para el invierno y otra para el verano. No obstante, esto dependerá de cada caso y es algo que tendrás que analizar bien, antes de dar el paso.
Pasos esenciales antes de cambiar tu tarifa de luz
Cambiar de tarifa de luz a la mejor para nuestras necesidades es una tarea que no podemos tomar a la ligera, debemos analizar datos relacionado con el consumo, y cuándo realizamos dicho consumo. Después de esto, tendremos que ver cuáles son las mejoras tarifas, ya sea la PVPC o bien la del mercado libre. Es muy importante leer la letra pequeña. En la siguiente tabla podéis ver el «checklist» de todo lo que tenéis que mirar.
Nº | Acción a realizar | Completado |
---|---|---|
1 | Revisar mi contrato actual: ¿Tengo cláusula de permanencia? ¿Cuándo finaliza? | ☐ |
2 | Analizar mis facturas del último año: ¿Mi consumo varía mucho entre invierno y verano? | ☐ |
3 | Identificar mis patrones de consumo: ¿Cuándo uso más electricidad (mañana, tarde, noche, findes)? | ☐ |
4 | Utilizar el comparador oficial de la CNMC para simular costes con diferentes tarifas. | ☐ |
5 | Leer la letra pequeña de la nueva oferta: ¿Hay servicios adicionales ocultos? ¿El precio es fijo o indexado? | ☐ |
Como puedes ver, hay algunos pasos muy importantes a realizar, como analizar en detalle el consumo. Debes tener muy en cuenta contratar una tarifa que no tenga permanencia, si tu objetivo es cambiar de vez en cuando. Como contrates alguna que tenga permanencia, aunque sea de un año, vas a tener que pagar una penalización por salir de esa empresa y contratar otra distinta.