Por qué pueden meter tu e-mail en una lista negra y qué hacer para evitarlo

Utilizar el correo electrónico, es algo muy común para estar en contacto con amigos y familiares, además del ámbito laboral. Hay muchos proveedores, como pueden ser Gmail, Outlook y similares. Sin embargo, está el riesgo de que tu dirección termine en una lista negra. Esto es un problema, ya que tus correos no llegarían al destinatario. Pero, ¿por qué ocurre esto? De ello vamos a hablar en este artículo.
Como vas a ver, es algo que puede pasar en cualquier momento. Normalmente va a depender de ti, pero a veces son factores externos. Ahora bien, siempre podrás actuar correctamente para evitar que este problema te afecte. Te vamos a dar algunas recomendaciones que serán de utilidad.
Motivos para que el correo esté en una lista negra
Esto puede ocurrir con tu e-mail personal, pero también si utilizas uno a nivel laboral. Especialmente, hay motivos que pueden hacer que un correo nuevo termine en una lista negra. Si se trata de un e-mail empresarial, también hay más opciones de que esto ocurra.
Enviar muchos correos
Un motivo claro, por el cual pueden incluir tu dirección en una lista negra, es enviar demasiados correos. Principalmente, puede ocurrir si los has enviado en un corto espacio de tiempo. Puede pasar si utilizas un e-mail empresarial y quieres enviar algo a tus clientes y lo haces de golpe.
Aunque no sea algo negativo, simplemente sea algún anuncio que quieres hacer o similar, esto puede hacer saltar las alarmas y que tu dirección termine en una lista negra y marcada como Spam.
Marcan tus e-mails como Spam
Otra razón por la que puede acabar tu dirección en una lista negra, es si los receptores de los e-mails los marcan como Spam. Tal vez has enviado muchos correos a tus clientes, por ejemplo, pero han sido correos no deseados y una parte de ellos han decidido marcarlos como Spam y así dejar de recibirlos.
Esto puede provocar que la reputación de esa dirección caiga y entre en una lista negra. Básicamente, los e-mails que manden llegarán a la bandeja de Spam y no a la principal, por lo que pueden pasar desapercibidos.
Para evitar problemas de este tipo, te recomendamos que tengas cuidado con los e-mails que mandas, no pongas asuntos de mensaje en mayúsculas, ni enlaces que puedan ser sospechosos, ni cualquier cosa que alerte a los receptores.
Alguien ha accedido a tu cuenta
Por supuesto, podrían haber entrado en tu cuenta. Esto es un problema importante, ya que suplantarían tu identidad y empezarían a mandar correos en tu nombre. Esos e-mails pueden ser de Spam, ataques Phishing y similares. Sin duda, eso puede hacer saltar las alarmas y que los proveedores lo metan en una lista negra.
Lo ideal para no tener problemas de este tipo, es proteger la cuenta al máximo. Asegúrate de que no tienes intrusos. Utiliza contraseñas seguras, que sean totalmente aleatorias y no uses cosas como tu nombre o fecha de nacimiento. Habilitar la autenticación en dos pasos, es una barrera extra interesante.
Utilizas un proveedor dudoso
Un caso más, es si utilizas un proveedor que no tenga buena reputación. Hay muchas opciones en Internet, pero no todas tienen las mismas garantías y pueden tacharlos de Spam y ser más problemáticos en este sentido.
Para no tener problemas, lo mejor es utilizar proveedores que sean fiables, reconocidos. Volvemos a los ejemplos de Outlook y Gmail, aunque hay muchos más que pueden ser perfectamente válidos.
En definitiva, estos son algunos motivos por los que podrían marcar tu dirección de correo electrónico como Spam y terminar en una lista negra. Te recomendamos tener cuidado y proteger tus datos correctamente en la red para no tener problemas.