Tener una conexión inalámbrica estable y veloz en casa, no siempre es posible. Aunque puedes realizar cambios y tomar medidas para mejorarla, lo cierto es que, en muchos casos, esos ajustes no son suficientes o pueden incluso afectar más. Vamos a hablarte de algunos mitos que debes conocer, para no cometer errores a la hora de intentar mejorar el Wi-Fi de tu vivienda.
El objetivo es que puedas realmente mejorar la conexión Wi-Fi y no tengas problemas. Esto te ayudará a conectar dispositivos muy variados, sin toparte con los fallos habituales relacionados con la cobertura o velocidad. A veces, solo con realizar pequeños ajustes, podrías notar una mejoría importante.
Falsas creencias al mejorar el Wi-Fi
Si intentas mejorar la red inalámbrica, pero cometes errores en ese proceso, puedes incluso empezar a tener otros problemas. La conexión podría ir peor y también afectar a otros dispositivos que tengas conectados.
Más megas, mejor Wi-Fi
La primera falsa creencia, es pensar que pagar por una tarifa superior de Internet, con más megas disponible, hará que el Wi-Fi mejore. Por ejemplo, si alguien tiene problemas para navegar por Internet, pasar de una tarifa de fibra óptica de 300 a 600 Mbps. Va a pagar más, pero el problema va a seguir ahí.
Si el Wi-Fi va mal, el problema va a ser por tener mala cobertura o receptores deficientes. Aunque contrates la mejor tarifa disponible, esas limitaciones van a seguir estando ahí y no notarás cambios.
Ten en cuenta que, por ejemplo, para ver contenido en Streaming en alta calidad, lo recomendable es tener, al menos, 25 Mbps. Hoy en día, cualquier tarifa de fibra óptica va a permitir alcanzar esa velocidad. Lo que necesitas es que la conexión funcione bien, tener buena cobertura y eliminar posibles obstáculos.
Usar un repetidor mejora la velocidad
Otro error es creer que simplemente con usar un repetidor, la velocidad va a mejorar. Algunas personas, incluso lo compran aun teniendo una cobertura relativamente normal, ya que pueden pensar que eso hará que la velocidad aumente al conectar sus dispositivos ahí, en vez de al router.
La realidad es que un repetidor puede ser útil para potenciar la señal en una zona concreta, donde la cobertura es más débil, pero esto no significa que vayas a tener una gran velocidad. Además, si utilizas un repetidor de poca calidad, va a estar muy limitado y podrías tener problemas.
Va mal el Wi-Fi por conectar muchas cosas
También hay quienes piensan que el Wi-Fi va mal por conectar demasiados aparatos al mismo tiempo. Aunque esto podría ser cierto, ya que conectar muchísimos dispositivos a la red puede hacer que se sature, especialmente la frecuencia de los 2,4 GHz, realmente es complicado llegar a este extremo.
Los routers actuales, están diseñados para poder conectar decenas de dispositivos al mismo tiempo. Es complicado que tengas tantos conectados, como para notar problemas. Lo más normal es que esos fallos se deban a otros motivos, como una mala ubicación del router, tener aparatos que generen interferencias o que bloqueen la señal.
No obstante, sí hay que tener en cuenta que no todos los dispositivos van a afectar igual. No es lo mismo tener aparatos de domótica conectados a la red, como pueden ser bombillas o sensores inteligentes, que un ordenador descargando contenido o utilizando la nube, lo cual va a consumir mucho ancho de banda.
Comprar un receptor con antena, mejora la conexión
Por otra parte, otro mito es adquirir un receptor Wi-Fi con antena para mejorar la señal. Es algo común en los ordenadores portátiles, por ejemplo. Mucha gente nota que la cobertura es limitada, que no reciben bien señal, y piensan que, al comprar un adaptador Wi-Fi con antena externa, van a lograr una mejora.
Esto no es así, especialmente si ese dispositivo no es de calidad. El hecho de que tenga o no antena externa, no va a influir en exceso. Un receptor interno del portátil que sea doble banda, de calidad y ofrezca una buena velocidad, va a ser mejor que otro externo con una gran antena y que solo funcione en los 2,4 GHz, por ejemplo.
Lo importante es que compres un dispositivo que sea fiable, que cuente con buenas características y realmente vaya a ayudarte a tener una buena conexión. Busca siempre información por Internet, para no cometer errores al adquirir un producto de este tipo.
En definitiva, estos son algunos mitos que debes tener en cuenta a la hora de intentar mejorar la red Wi-Fi en casa. Es esencial que no cometas errores, ya que podrían afectar a tu día a día, a la hora de conectar dispositivos muy variados.
