Los servidores proxy son componentes esenciales para una buena experiencia navegando por la web. Sin embargo, existen dos variantes que se aplican tanto del lado cliente como del lado del servidor. Específicamente, hablamos del servidor proxy y del servidor proxy inverso. ¿Cuáles son las diferencias? ¿Qué es lo que más me conviene implementar? Te explicaremos todo lo que debes saber en esta guía.
En este caso, estamos ante una aplicación informática que cumple un objetivo muy particular. Lo cierto es que actúa como un intermediario entre los usuarios que buscan cualquier tipo de información y un servidor, es decir, cuando un usuario con su PC manda una serie de solicitudes a diferentes sitios web, el proxy se encarga de interceptar dichas peticiones para luego mandarlas a los servidores web de esas páginas en concreto.
¿Qué es un servidor proxy?
Es un servidor que se instala de manera local dentro de la red profesional, o también en un servidor de Internet. El servidor proxy actúa como una especie de protección frente a las posibles amenazas que quieran entrar en los servidores. Pero ese no es el único motivo por el que se utiliza. Para que puedas hacerte una idea más clara de los usos que tiene, te lo explicamos con mucho más detalle. Y es que hay muchas razones por las que tanto un particular como una compañía puede decidir usar un servidor proxy.
Con el tiempo los administradores de sitios web han encontrado la manera de controlar a los proxys. Sin embargo, existen soluciones tanto gratuitas como de pago. Las de pago tienen características más avanzadas como el cambio de dirección IP cada vez que visitas un sitio web. Por lo que estos administradores tienen más dificultad aun a la hora de monitorizar a los visitantes.
Un dato interesante es que los servidores proxy pueden actuar como un servidor de caché. Esto sirve muchísimo para poder mejorar la experiencia de los usuarios a la hora de navegar por recursos web recurrentes, lo más normal en una red profesional donde se acceda a Internet, es que también actúe como caché para ahorrar recursos de ancho de banda. Esto es posible gracias a que este servidor proxy, genera una copia de tipo caché y lo almacena para que cualquier usuario que acceda a ese recurso, lo haga más rápidamente sin necesidad de volver a realizar la petición a la web. Este es uno de los trucos más eficaces para poder navegar más rápido.
Históricamente, al proxy se lo conoce como el predecesor del NAT. Por lo que esto último no estuvo disponible en los routers desde siempre. Recordemos que el proceso de nateo consiste en la traducción de las direcciones IP privadas a las públicas. Esto sirve para que podamos tener salida a Internet y tener acceso a los millones de recursos web disponibles. Entonces, antes de que se pueda aplicar el NAT, el proxy permitía que múltiples ordenadores conectados a una misma red pudieran tener acceso a Internet.
¿Hay alguna desventaja? La principal es que la velocidad en general disminuye. Sin embargo, esto depende de dos factores fundamentales: dónde se encuentra localizado el proxy y cuántas personas se encuentran utilizando el servicio en ese momento. A partir de este punto, reforzamos la importancia de utilizar servicios de pago o, mejor dicho, aquellos que puedan garantizarnos buenas velocidades de conexión sin que precisamente se pague demasiado dinero. Los servicios gratuitos no siempre resultan en buenas velocidades de navegación y pueden resultar en problemas de seguridad y privacidad de tus datos en línea.
Además, hay que tener claro que hay diferentes tipos de servidores proxy. Por lo que no siempre se usará el mismo. En función de las necesidades de cada usuario o compañía, se tendrá que utilizar uno u otro. De ahí la importancia de conocer cada uno de los tipos y sus respectivas diferencias con el resto de opciones.
Para qué se utiliza
Un servidor proxy tiene, principalmente, dos funciones:
- Ayuda a evadir restricciones impuestas por uno o más firewalls. Dichas restricciones se aplican a sitios web, muchas instituciones, organizaciones y gobiernos restringen el acceso a determinados sitios web por diversas razones: seguridad, mayor productividad de los colaboradores, control parental, etc. Pongamos un ejemplo: la organización nos bloquea la navegación web a determinados sitios. Si nosotros nos conectamos a un proxy externo al que sí tengamos acceso, podremos evadir estas restricciones porque todo el tráfico irá a parar al servidor Proxy y no directamente a Internet. Por supuesto, existen proxys que son HTTP, y otros que son HTTPS para mantener confidencialidad punto a punto.
- Un proxy también sirve para restringir el acceso a diferentes webs de una organización. Todos los PC de esa organización, necesitan configurar el proxy en su navegador para poder acceder a Internet y navegar por diferentes páginas, si quita esta configuración simplemente no tendrá acceso debido a que estaremos cortando el tráfico con un firewall. Si este proxy tiene una lista blanca de sitios web, solamente podrás acceder a estos sitios.
Aunque, también se utiliza para aumentar la velocidad de la página web. Y es que sin duda, este es otro de los motivos de peso para los que se usa un servidor proxy es el de los tiempos de carga. Y es que ningún usuario quiere esperar más de cuenta para ver los contenidos de una web. De ahí que muchas compañías apuesten por este tipo de aplicaciones en particular. Y todo porque no quieren que los usuarios tengan una mala experiencia con sus respectivas páginas web.
Cuando utilizar un proxy inverso
Estos proxys actúan como intermediarios entre los diferentes clientes en Internet con las redes privadas. Por lo general, se utilizan para que el rendimiento mejore, y la seguridad de los servicios web sea más alta. Nos podemos encontrar algunas situaciones, donde es muy recomendable utilizar un proxy inverso. Estas son:
- Rendimiento: Los proxys inversos nos pueden ayudar a mejorar el rendimiento de los servicios web, ya que almacenan en caché el contenido estático. Cosas tales como las imágenes, los CSS, archivos JavaScript, entre otros, reduciendo así la carga en los servidores. Por lo cual, se acelera la entrega de los datos a los clientes.
- Balanceo de carga: Estas herramientas pueden ser utilizadas a modo de distribución de tráfico entre diferentes servidores. Esto es algo que ayuda a evitar la sobrecarga, y a la vez la caída de los servidores. La distribución del tráfico, alivia la carga en el servidor y sus reglas de balanceo.
- Mayor privacidad: En algunas ocasiones puede que se requiera ocultar una dirección IP de un servidor. Lo cual es algo que aumenta la privacidad, así como la seguridad de los servidores y todos sus datos.
- Seguridad: Estos servicios nos proporcionan nuevas capas de seguridad adicionales, ya que protegen a los servidores de ataques directos a las redes públicas. Los proxys inversos, implementan técnicas de seguridad como pueden ser los firewalls, filtrado de paquetes, detección de intrusiones, entre otras.
- Políticas de seguridad: Con estos se pueden implementar nuevas políticas de seguridad. Como las que mencionamos previamente, el filtrado de datos o la aplicación de políticas de acceso a los servicios web o recursos. Esto ayuda a garantizar que todos los usuarios, solo acceden a los lugares donde tienen el permiso asignado. De este modo, tendremos todos los accesos más controlados y delimitados, mejorando considerablemente la seguridad.
¿Y qué es un proxy inverso?
Para empezar, un proxy inverso está del lado del servidor. Esta sería la diferencia esencial. Los administradores de servidores web se valen del proxy inverso para mejorar la accesibilidad a los sitios web. El servidor que actúa como proxy inverso se sitúa en el medio del enlace entre el cliente y el servidor web. El cliente realiza una solicitud web, en vez de ir directamente al servidor, va al proxy inverso. A su vez, esa solicitud va finalmente al servidor web.
En realidad, este es un recurso altamente utilizado por los sitios web para mejorar la velocidad de carga de las páginas. Tan importante es el tiempo que cargan los sitios que, si un usuario percibe una mínima tardanza, ya para cuando termine de cargar esa página lenta…el usuario ya habrá optado por otro sitio más rápido. A continuación, compartiremos un par de esquemas que ilustran de forma muy práctica la diferencia entre el proxy «normal» (o forward proxy) y el proxy inverso (o reverse proxy):
El proxy inverso se ubica del lado del servidor web para que éste actúe como intermediario de todas las solicitudes web de los clientes. Por lo que es una de las características que se deben tener en cuenta de este tipo de proxy en concreto.
Por otro lado, otro detalle que hay que tener en cuenta es que, el proxy (forward proxy), se ubica del lado de los clientes y puede decirse que también actúa como intermediario para facilitar el acceso a recursos web.
Beneficios del proxy inverso
Los beneficios del proxy inverso se resumirían en mayor rendimiento del servidor web y seguridad. Ahora citaremos en detalle cuáles son los beneficios:
- Balanceo de carga: a esto último también se lo conoce como load balancing. El balanceo de carga permite que millones de usuarios tengan acceso permanente a un recurso web rápidamente. Consiste en distribuir la carga de las solicitudes web en varios servidores y el rol del proxy inverso es garantizar que cada uno de ellos trate igual cantidad de solicitudes para evitar el desborde.
- Protección ante ataques. Esto es posible gracias a que en ningún momento se revela la dirección de IP real del servidor web. Entonces, el proxy inverso actúa como una «máscara» del servidor web real y todas las solicitudes se dirigen al mismo en vez del servidor web. Al no saber su dirección IP, los cibercriminales cuentan con mayores dificultades a la hora de querer realizar ataques como DDoS. Incluso si estos desean atacar a los proveedores de proxy inverso o servicios similares, si realmente has contratado uno en una empresa reconocida por sus servicios y seguridad informática, estos deberían tener los máximos estándares de seguridad y protección ante estos eventos.
- Equilibrio de carga global del servidor, o GSLB. En este caso, hay que tener en cuenta que es la manera de equilibrio de carga. Un sitio web, por ejemplo, puede estar distribuido por diferentes servidores en distintas partes del mundo, por lo que el proxy inverso se encargará de enviar a los clientes del servidor a aquellos que estén más cerca de su localización. De esta manera, se reducen las distancias que tienen que recorrer las solicitudes y las respuestas, por lo que se consigue minimizar los tiempos de carga en la medida de los posible.
- Caché. Más arriba habíamos comentado que los proxys, en el lado cliente, pueden actuar como servidor de caché de los recursos web que se visitan con frecuencia, para maximizar la experiencia de los usuarios. Sin embargo, en el lado servidor esto también es aplicable, más aún si es que los servidores web originales se encuentran en locaciones muy distantes a las de la mayoría de los usuarios de un sitio web.
- Cifrado SSL. Esto es sumamente conveniente de aplicar. Ya que el servidor proxy inverso podrá descifrar fácilmente todas las solicitudes web que se generen y cuando tenga la respuesta para el cliente por parte del servidor web original, las cifrará para que pueda viajar y llegar al mismo. Y es conveniente ya que ahorra muchos recursos al servidor web y, así, los use en otros aspectos para mejorar el rendimiento. Hay que tener en cuenta que puede resultar bastante costoso a nivel informático, por lo que es un factor clave.
Os recomendamos visitar la web oficial de Traefik, uno de los softwares para configurar un proxy inverso más recomendables que podemos encontrar actualmente. Tiene soporte para HTTP y HTTPS, balanceo de carga y muchas más características realmente interesantes.
Desventajas de un proxy inverso
Al igual que posee muchas ventajas, este tipo de proxys también tienen sus contras, y hoy vamos a verlas, para que conozcais tanto lo bueno como lo malo de este servicio:
- Proxy offline: Si el proxy inverso se cae o presenta problemas, todo el tráfico hacia los servidores backend puede verse afectado, lo que podría interrumpir el acceso a los servicios para los usuarios.
- Complejidad: La gestión y resolución de problemas será más compleja que en un proxy normal, ya que esto añaden una capa de dificultad, que, pese a ser factible para todos, requiere de mayores conocimientos y un mantenimiento distinto.
- Latencia adicional: Debido al procesamiento adicional de las solicitudes y respuestas este tipo de proxy puede generar un mayor retardo en la respuesta.
- Seguridad: Si no está configurado correctamente, puede introducir vulnerabilidades de seguridad, por lo que pese a ser más seguros, como veremos a continuación, hay que saber configurarlo, por lo que puede ser un arma de doble filo.
- Consumo de recursos: El proxy inverso consume recursos de hardware y software adicionales a un proxy normal, por lo que tendremos que tenerlo en cuenta a la hora de configurarlo en ciertos equipos.
- Dependendia del proveedor: si el servidor proxy inverso está proporcionado por un tercero, dependerás de él para todo, incluidas las posibles caídas y problemas, por lo que hay que tenerlo en cuenta y saber cuál elegir.
- Compatibilidad: Algunas aplicaciones o servicios pueden tener problemas con ciertos tipos de proxies inversos, por lo que, pese a que no es lo habitual, también es importante saberlo.
Son bastantes, aunque realmente conociéndolas su desventaja se minima mucho, por lo que ahora que ya sabes cuáles son, puedes seguir sin problema.
¿Son realmente seguros los proxys inversos?
Este tipo de servicios, agregan nuevas capas de seguridad y son eficaces a la hora de proteger los sistemas de diferentes vulnerabilidades en Internet. El proxy inverso se interpone entre los clientes y los servicios internos, de forma que impide que se acceda directamente a nuestra red. Esto hace que tengamos menos infraestructura informática expuesta, por lo cual menos asiduos pueden ser los ataques de hackers que buscan hacerse con información confidencial o directamente, datos de los clientes.
Todo esto reduce los ataques por dos motivos, el primero es que el servidor está más protegido frente a usuarios malintencionados, y otro es que gran cantidad de hackers prefieren acudir a sitios más sencillos de hackear, evitando los lugares más seguros.
Los proxys también pueden alojar certificados y gestionar las negociaciones SSL en nombre de nuestros servidores, lo cual significa que no será necesario en un principio, el uso de diferentes certificados ni tampoco cifrar la red interna.
En todo caso, si queremos seguir aumentando la seguridad de nuestra red, siempre podemos instalar un cortafuegos, lo cual es una especie de proxy, pero más suspicaz. Los proxys inversos, se pueden cambiar por otros que añaden funciones de cortafuegos, sin llegar a tener que cambiar el modo en el que funcionan nuestros servidores o equipos.
A mayores, los proxys inversos ofrecen a las empresas y administradores muchas ventajas, de forma que no solo mejoran los servicios en cuanto a eficiencia, si no que pueden facilitar el mantenimiento. Siempre se recomienda tener la mayor seguridad posible, y si buscamos algunas opciones, podemos optar por Squid, el cual es de uso libre y gratuito. Con el no solo podremos protegernos, si no que nos servirá como banco de pruebas, sin tener que gastar mucho dinero en servicios de pago.
Finalmente, ¿qué es lo que me resulta más conveniente? En realidad, un proxy y un proxy inverso sirven para cosas completamente distintas desde el punto de vista de su utilización. Como hemos podido comprobar, los servidores proxy tienen dos formas de implementarse: la forma que la mayoría conoce (la «tradicional») y el servidor proxy inverso. Por un lado, está el proxy del lado cliente que nos da acceso a liberado a muchos recursos en la web que podrían estar restringidos para nosotros, ya sea por cuestiones geográficas, políticas, etc.
Por otro lado, el proxy inverso se enfoca y se aplica en el lado servidor. Este es uno de los componentes que debería ser prácticamente mano derecha de los administradores de sitios web. Se ha podido apreciar que el beneficio principal es mayor y mejor rendimiento del servidor web en general, ya que este ayuda a administrar de manera más eficaz todas las solicitudes web que se generan. En suma, actúa como un escudo protector ante una amplia variedad de ataques que siguen encontrándose a la orden del día.
¿En qué se diferencian?
De primeras, hay que tener claro qué es un proxy inverso, de ahí que lo hayamos visto en las líneas anteriores. Sin embargo, lo que está claro es que este es un servidor que está delante de uno o varios servidores web, además de que se encarga de interceptar las solicitudes de los clientes. Por tanto, esto ya es distinto que un proxy de reenvío, ya que en este el proxy está delante de los clientes.
Es por esto mismo por lo que hay que tener en cuenta que un inverso, en el momento en el que los clientes envían distintas solicitudes al servidor de origen de una página web, el servidor inverso se encarga de interceptar las solicitudes en el perímetro de la red. Luego, las enviará al servidor de origen y después recibirá las respuestas de este también.