Este tipo de dispositivos nos ofrecen una gran cantidad de funciones. Compartir nuestra tarifa de datos a través de un punto de acceso Wi-Fi o hotspot es algo muy común entre los usuarios. Pero, ¿se hace de forma segura? Os vamos a dar algunos consejos para que compartir datos móviles sea seguro y así evitar sustos en la factura a final de mes.
Al igual que sucede con la conexión fija, los ciberdelincuentes aprovechan cualquier descuido para hacer uso de una conexión ajena y así cubrirse las espaldas. En este caso el daño es doble, ya que además de utilizar la Wi-Fi de un usuario puede terminar con su tarifa de datos y en el peor de los casos incrementar la factura final si excede el límite de tráfico.
Por este motivo hay que tener en cuenta algunas consideraciones a la hora de crear un hotspot con nuestro dispositivo móvil.
Cómo configurar un hotspot de forma segura
A continuación, os ofrecemos una serie de consejos para compartir nuestra tarifa de datos con nuestros amigos o familiares y hacerlo de forma segura
Límite de tráfico
Aunque no está relacionado con el proceso de forma directa, si no queremos que acaben con nuestra tarifa y evitar recargos en la factura final, podemos configurar en el sistema operativo (al menos en Android) un límite de MB consumidos. De esta forma cuando se alcance dicho límite se desactivarán los datos móviles. Este límite es configurable de acuerdo al tamaño de la tarifa que posea cada uno, pero para disponer de cierto mensaje al menos se debe fijar con una diferencia de 500 MB.
Fijar una contraseña
Antes de crear el punto de acceso en un lugar público, se puede realizar la primera configuración en nuestro hogar, asignando una contraseña que sea lo suficientemente fuerte para evitar que realizando un ataque de fuerza bruta sea adivinada y se puedan conectar de forma no autorizada a nuestro hotspot.
Modificar la contraseña de forma periódica
Si la contraseña es lo suficientemente robusta no será necesario un cambio. Pero sí que es verdad que después de mucho uso no sepas a ciencia cierta quién la tiene y quién no. Por este motivo después de cada uso conviene realizar un cambio, disponiendo de un control mayor sobre qué usuarios están conectados.
En lugares públicos, no decir la contraseña en alto
Puede que nadie esté escuchando, pero también es probable que no nos percatemos si en realidad la ha escuchado alguien más. En estos casos, la mejor forma de enviar la contraseña es a través de un servicio de mensajería o bien visualizándola en la pantalla del smartphone.
Sencillos pero necesario para no sufrir sustos en la factura
Aunque lo hemos aplicado a los terminales móviles, los consejos son igual de válidos para routers 3G y 4G portátiles que ofrecen la posibilidad de crear un punto de acceso Wi-Fi. Muchos son básicos, pero en conjunto te ayudarán a no sufrir problemas relacionados con tu tarifa de datos.
En otro artículo podéis ver cómo funciona un Wi-Fi Hotspot.