Características que debe tener un Mini PC para usarlo con Home Assistant

Te vamos a mostrar las características mínimas y recomendadas para que no tengas problemas de rendimiento. También pondremos algunas opciones de Mini PC que vas a poder comprar, para que elijas el que más se adapte a lo que buscas. Para ello, veremos desde sus características más importantes hasta su precio. De esta forma será más fácil tomar una decisión. Ten en cuenta que hay muchas opciones, y con características distintas, aunque lo ideal, eso sí, es comprar uno de garantías. Por esto mismo, lo primero que debemos tener claro es cómo se tiene que elegir un equipo.

Piensa, del mismo modo, si vas a utilizarlo solo para Home Assistant, o piensas darle otro tipo de usos, ya que adquirir algo muy barato, puede que solo te sirva para esto, sin embargo, si eliges una opción más cara, podrías tener un ordenador funcional con el que ejecutar, a su vez, el asistente que veremos hoy. De ahí que sea importante pensarlo antes de irse a por él.

Cómo elegir un Mini PC para Home Assistant

La mayoría de Mini PC que podemos comprar actualmente, superan con mucho los requisitos mínimos que tiene Home Assistant para funcionar correctamente, no obstante, si vas a tener una gran cantidad de sensores y dispositivos gestionados de forma centralizada por este sistema domótico, nuestra recomendación es que tengas más núcleos de CPU, RAM y almacenamiento en disco.

Es justamente por esto mismo por lo que hay tener una idea más claro de cuáles son los requisitos mínimos que se deben tener en consideración a la hora de elegir un Mini PC para Home Assistant. Y son los siguientes:

• 2vCPU: como mínimo necesitamos dos núcleos de procesador, hoy en día casi cualquier CPU de un mini PC cumple con este requisito con creces. Es lo que permitirá que funcione de forma fluida y pueda ejecutar aplicaciones que necesites sin problemas. Nuestra recomendación es que tengamos un procesador Quad-Core, para que todo funcione de manera mucho más fluida. Hay que tener en cuenta que, este software gestionará decenas de dispositivos domóticos, por lo que cuanta más potencia de CPU tengamos, mucho mejor.
• 2GB de RAM: es el mínimo que hay que dedicarle a Home Assistant para no tener problemas, no obstante, realmente consume mucha menos, pero depende de todas las integraciones que tengas en el equipo. A partir de ahí, cuanta más capacidad, mejor. Nuestra recomendación es que no es necesario en ningún caso más de 4GB de RAM como mucho, porque por muchas integraciones que tiene, tampoco consumen tantos recursos.
• 32GB de almacenamiento: aunque no detalla si necesitamos un disco duro o un SSD, nuestra recomendación es que utilices siempre un SSD para que el funcionamiento de Home Assistant sea óptimo. Respecto a la capacidad de almacenamiento, también dependemos de cuántas integraciones tengamos, y cuánto histórico de datos queramos guardar en la memoria. Lo mejor sería tener 50GB de SSD aproximadamente, para no tener problemas con el almacenamiento.

La mejor forma de instalar Home Assistant es a través de un Proxmox, y virtualizar el sistema operativo de Home Assistant, para tener a nuestra disposición las características de las instantáneas, que es algo realmente importante para «volver hacia atrás» en caso de que sea necesario por algún error en la configuración. No obstante, también podríamos usar Home Assistant directamente de manera nativa, aunque no lo recomendamos porque perderemos esta funcionalidad tan interesante. Por supuesto, también podremos instalarlo a través de Docker, si es que pretendemos usar virtualización de contenedores.

Por otro lado, ten en cuenta que la gran mayoría de mini PC disponen de manera predeterminada del sistema operativo Windows 11, ya sea en su versión Windows 11 Home o bien Windows 11 Pro. Por lo que es un detalle que no se te puede pasar por alto. Además, siempre que compremos un Mini PC y venga con este sistema operativo, como mínimo debería tener 8 GB de memoria RAM para no tener ningún problema de recursos una vez que se vaya a poner en marcha Home Assistant, por lo que podremos ponerle 3GB de memoria RAM para Home Assistant y que funcione más fluido.

No obstante, si en tu caso el Mini PC que compras tiene hasta 16GB de RAM, lo cierto es que no pasaría nada por ponerle 4GB de memoria RAM a Home Assistant para que vaya bastante sobrado de recursos. Por lo que es más que clave fijarse en estas características a la hora de comprar un modelo en concreto. Asimismo, en Windows 11 tenemos dos formas de instalación:

• Usar Home Assistant Operating System virtualizado con VirtualBox, KVM, VMware Workstation o Hyper-V
• Usar Home Assistant Core en Windows usando el subsistema de Linux.

En cuanto al procesador, es recomendable que sea un Intel N100 o superior, aunque los modelos de gama alta anteriores también te deberían funcionar perfectamente. En el caso de que tenga un AMD Ryzen, asegúrate de que sea potente, como el Ryzen 5 5500U que está orientado a bajo consumo, porque hay que «mover» tanto el sistema Windows 11 como también Home Assistant, no te valdrá con un procesador muy básico. Nosotros tenemos un Intel N100 y funciona muy bien, lo único que tarda es en arrancar desde cero el sistema operativo, una vez arrancado, el funcionamiento es muy bueno, aunque cada vez que hay que reiniciarlo debido a actualizaciones, tardará algo más que con otros procesadores más potentes, debes valorarlo.

Respecto al almacenamiento en disco, es recomendable que tenga un SSD para que todo funcione muy rápido, la capacidad no es tan importante porque con unos 50GB ya tendrás espacio más que suficiente para almacenar todos los datos de sensores, las copias de seguridad completas, las parciales y cualquier integración que descargue muchos datos. En este caso, es muy importante que el almacenamiento en disco sea de tipo SSD y no HDD, porque sino tendremos un gran cuello de botella a la hora de escribir en el historial.

Finalmente, en cuanto a la conectividad, siempre es recomendable que tenga un puerto Gigabit Ethernet para conectarlo por cable, aunque la mayoría de mini PC incorporan conectividad WiFi, no os recomendamos usarla porque esto provocaría un exceso de tráfico en la red inalámbrica, y podríamos tener un cierto retraso en todas las acciones a realizar. Lo mejor es conectar este mini PC a través de cable, no importa que el puerto sea Gigabit Ethernet porque la transferencia de datos tampoco es tan elevada, lo que sí es crítico es que no tengamos nada de latencia en la conexión para tener todos los sensores funcionando a la perfección.

¿Cuál es la mejor forma de instalar Home Assistant?

Actualmente tenemos muchas formas de instalar Home Assistant, cada opción tiene sus pros y también sus contras, por lo que es importante que sepas cuáles son las principales formas, y cuáles son sus puntos fuertes y débiles, para valorar cuál es la mejor opción en tu caso.

Instalarlo directamente en el mini PC

La primera forma de instalarlo es hacerlo directamente en el hardware, Home Assistant Operating System admite una gran cantidad de hardware diferente, por lo que vamos a poder instalarlo directamente en el mini PC para usarlo como sistema de domótica. Básicamente lo que tendremos que hacer es copiar el HAOS a una unidad SSD, y posteriormente configurar la BIOS/UEFI de nuestro mini PC para que arranque el sistema operativo desde esta unidad SSD. Como hemos mencionado antes, es recomendable que tengamos una capacidad de unos 32GB como mínimo, por lo que hoy en día podemos comprar el típico SSD de 240GB por unos 25€ y funcionará a la perfección.

Los puntos fuertes de esta instalación son:

• Tenemos el máximo rendimiento, ya que se instala directamente sobre el hardware sin usar ningún tipo de virtualización.
• Tenemos todas las funcionalidades de HAOS incluyendo la instalación de complementos.

Sin embargo, también tenemos algunos puntos débiles en comparación con virtualizarlo:

• Es posible que tengamos alguna incompatibilidad puntual con un determinado mini PC a nivel de hardware. Aunque es compatible con una gran cantidad de dispositivos, y con cada actualización hay más compatibilidad, si compras un mini PC con un hardware muy nuevo podrías encontrarte problemas.
• Si el hardware del mini PC es muy potente, seguramente no podrás aprovecharlo al máximo porque la mayoría del tiempo estará en espera. No obstante, con la posibilidad de instalarle complementos también podrías darle otros usos como un sistema de monitorización, un Grafana para mostrar datos más avanzados, e incluso podrías instalar un servidor VPN entre otras opciones.

Como podéis ver, instalarlo directamente sobre el hardware tiene sus puntos fuertes y débiles. Ahora os explicaremos qué ocurre si lo virtualizas.

Virtualizar HAOS

La segunda forma de instalarlo es virtualizando HAOS, esta virtualización la puedes hacer con cualquier software como Proxmox, VMware ESxi, VMware Workstation sobre Windows, VirtualBox o cualquier otro software, incluyendo Hyper-V en Windows. El funcionamiento de HAOS cuando lo virtualizas es exactamente igual, aunque lógicamente el rendimiento que obtendremos es algo menor ya que estamos virtualizándolo y no instalándolo sobre el hardware directamente.

Si tienes un mini PC potente, lo más recomendable es usar un sistema operativo como Proxmox con el objetivo de virtualizar tanto HAOS como también otros sistemas operativos, de esta forma, tendremos la posibilidad de exprimir al máximo el hardware del mini PC donde lo hemos instalado. Esta forma de instalación también es muy recomendable porque vas a poder realizar instantáneas o snapshots de manera muy sencilla, esto es perfecto para volver hacia atrás en cualquier momento. Además, en HAOS 11.0 tenemos una compatibilidad perfecta con Proxmox para que no haya ningún tipo de corrupción en al base de datos, sobre todo si usas SQLite. La parte negativa de instalarlo sobre Proxmox es que no es tan eficiente como hacerlo directamente sobre el hardware, ya que está basado en KVM, además, hay que tener en cuenta que es algo complicada su instalación si nunca has usado este sistema de virtualización.

Los puntos fuertes de esta instalación virtualizada son:

• Tenemos todas las funcionalidades de HAOS.
• Podemos aprovechar al máximo el hardware del mini PC, virtualizando otros SO.
• Podemos realizar snapshots de las VM de manera transparente.
• Podemos hacer copias de seguridad locales y externas de toda la VM directamente, para luego restaurarla en otro equipo.
• No tendremos ninguna incompatibilidad a nivel de hardware.

Sin embargo, también tenemos algunos puntos débiles en comparación con virtualizarlo:

• Si solamente vas a usar HAOS, está claro que el rendimiento será algo inferior a instalarlo nativamente.

Como podéis ver, instalarlo sobre un software de virtualización es la solución óptima, ya que tenemos características adicionales realmente interesantes.

Mini PC recomendados

Ahora que ya conoces cómo se debe elegir un modelo en particular para usar Home Assitant, debes saber que hay una gran cantidad de modelos de Mini PC de muchas marcas. Para que la decisión sea un poco más sencilla, os vamos a indicar un total de 3 modelos que son perfectos para Home Assistant, ya que irán bastante «sobrados» para ejecutarlo, ya sea en una máquina virtual con base de Proxmox, e incluso con Windows 11 y usando VirtualBox o VMware. Podrás ver desde sus características hasta sus precios, por lo que solamente te quedará elegir el que más se ajuste a tus necesidades:

Beelink SER5

Este modelo es muy interesante debido a que es bastante potente y podemos encontrarlo por unos 380 € aproximadamente, aunque hay modelos más baratos, hay que valorar la potencia de los nuevos modelos con Intel o AMD. Las características son:

• Procesador: AMD Ryzen 5 5500U con 6 núcleos y 12 hilos a 2,1GHz de velocidad.
• RAM: 16GB DDR4, ampliable hasta 64GB de RAM.
• Almacenamiento: incluye un M.2 NVMe SSD con 500GB de capacidad, permite instalar un disco de 2,5» en su interior.
• Conectividad: puerto Gigabit Ethernet, Wi-Fi 6 y diferentes puertos USB y HDMI.

El precio de este equipo ronda los 380 € aproximadamente, un precio muy bueno teniendo en cuenta que su hardware es bastante potente. En cualquier caso, teniendo en cuenta cada una de sus características, lo cierto es que se convierte en uno de los primeros modelos de Mini PC que deberíamos tener en cuenta para Home Assistant.

Beelink SER5 PRO

Este equipo es muy similar al anterior, la principal diferencia es que su procesador es mucho más potente, ideal si vas a realizar integraciones muy avanzadas en Home Assistant. Las características son:

• Procesador: AMD Ryzen 7 5800H con 8 núcleos y 16 hilos a 3,2GHz de velocidad.
• RAM: 16GB DDR4, ampliable hasta 64GB de RAM.
• Almacenamiento: incluye un M.2 NVMe SSD con 500GB de capacidad, permite instalar un disco de 2,5» en su interior.
• Conectividad: puerto Gigabit Ethernet, Wi-Fi 6 y diferentes puertos USB y HDMI.

Este equipo supera los 440 € de precio, pero si queremos un procesador bastante más potente que el anterior (y también mayor consumo energético) es el modelo perfecto. Por lo tanto, si te convencen de primeras las características de este equipo, y estás dispuesto a aumentar tu presupuesto de comprar por este modelo (ya que está por casi 450 €), entonces la opción ideal.

Beelink EQ12

Este mini PC incluye el nuevo procesador Intel N100, un procesador muy potente y de bajo consumo, ideal para ahorrar dinero a final de mes en la factura, ya que tendrá que estar permanentemente encendido. Las características de este modelo son:

• Procesador: Intel N100 con 4 núcleos y 4 hilos a 3,4GHz de velocidad.
• RAM: 16GB DDR4.
• Almacenamiento: incluye un M.2 NVMe SSD con 500GB de capacidad, permite instalar un disco de 2,5» en su interior.
• Conectividad: puertos 2.5G Multigigabit, Wi-Fi 6 y diferentes puertos USB y HDMI.

Este equipo suele ser algo más caro que el SER5 pero algo más barato que el SER5 PRO. Aunque, en esta ocasión, lo cierto es que se postula el equipo más económico de estos tres modelos. Por lo que, si tienes un presupuesto más bajo, esta alternativa es la opción indicada.

No obstante, si quieres potencia máxima, el SER5 PRO es tu mini PC, pero si quieres muy bajo consumo, el modelo Intel N100 es el mejor en este aspecto, y te funcionará perfectamente.

Hay modelos más baratos de unos 150€, pero normalmente disponen de un procesador mucho más lento que el Intel N100, y con solamente 8GB de memoria RAM, lo que podría ser algo justo si quieres hacer otras tareas. Nuestra recomendación es que inviertas algo más de dinero en un modelo bueno, y que no se te quede corto de potencia muy pronto.

Por otro lado, también podrás irte a por otros mini PC que actúen a su vez como un buen ordenador, como los Mac Mini, que pese a rondar los 600 euros y ser más caros, tienen capacidad para realizar todo tipo de actividades, siendo uno de los sistemas (macOS), que mejor aprovecha los recursos, por lo que puede ser el momento de hacerte con tu primer ordenador de Apple, por un precio asequible, y usarlo para virtualizar Home Assistant.

Conclusiones

Sea cual sea el modelo que compres, antes de hacerlo es importante que pienses para qué lo necesitas. Verás que hay un amplio abanico de opciones, con características diferenciales como lo que hemos explicado de la memoria RAM, así como el procesador o el disco duro (y también el SSD). Según qué proyectos quieras hacer o cuáles sean tus pretensiones, deberías optar por la opción que más se ajuste a lo que vas a necesitar. A veces, simplemente con invertir un poco más de dinero puedes encontrar un equipo bastante más potente, más aún si te aprovechas de algunas ofertas puntuales que puedan aparecer.

Como habéis visto, hay diferentes alternativas para comprar un Mini PC y usarlo con este popular sistema de domótica. Cuanto más potente sea el dispositivo, mejor funcionará y más funciones vas a poder utilizar. Elegir uno de garantías es importante para evitar problemas y que todo funcione correctamente para la domótica de tu casa. También sería muy importante tener un sistema de copias de seguridad, ya sea en local a través de un servidor NAS, o bien subir las copias de seguridad a la nube de Google Drive o OneDrive, por si algo le ocurre a nuestro mini PC, que podamos recuperar todas las configuraciones y también el histórico de acciones, de esta forma, podrás recuperar el sistema frente a un posible desastre.

En el caso de que ya tengas un servidor NAS de fabricantes como QNAP o Synology, os invitamos primero a probar la virtualización de estos equipos, para que veáis si es suficiente o necesitáis un equipo algo más potente y dedicado. Hay que tener en cuenta que solamente los modelos de gama alta disponen de procesadores potentes como tal, por lo que los modelos de gama de entrada podrían ser insuficientes en la mayoría de los casos.