Es importante tener siempre una conexión de Internet estable, que funcione sin problemas. Esto es esencial para ver contenido en Streaming sin cortes, poder descargar archivos o usar la nube sin que aparezcan problemas. Ahora bien, ¿hay manera de ver si la conexión de Internet es estable en Windows? Te vamos a contar qué debes hacer para detectar posibles problemas y tomar medidas lo antes posible para solucionarlos. El objetivo es siempre tener una conexión veloz, estable y sin problemas.
Puedes tener problemas para navegar por la red y eso puede ocurrir por múltiples motivos. Tal vez el router no funcione bien, tengas una mala configuración o incluso un problema con el ordenador. En este último caso, identificar si la conexión es buena o no puede ayudarte a ver dónde está el problema. Por esto mismo, es importante conocer cuáles son las técnicas con las que puedes revisar si la red es estable o no en cualquier momento.
Tener una conexión a Internet estable quiere decir que es constante, sin cortes o grandes fluctuaciones de velocidad. Es decir, que tienes una buena conexión. De lo contrario, no podrías estar disfrutando en casa de una red fluida y sin fallos de conexión, ya que no se mantendría activa y funcional durante largos periodos de tiempo. De ahí la importancia de saber si realmente tienes o no un Internet estable. Lo bueno es que saber si es o no estable no tiene dificultad como podrás comprobar directamente desde tu PC.
Comprueba la estabilidad de Internet
Por suerte, vas a poder saber si tu conexión de Internet es estable en Windows o no. Es muy sencillo y solo tienes que llevar a cabo unos pasos que vamos a mostrar. De esta forma, podrás saber si va bien o, por el contrario, tendrías que hacer algo para conseguir que funcione mejor, con más estabilidad y velocidad. Especialmente si no quieres que tenga cortes cuando menos te lo esperas.
Lo que puedes hacer es utilizar el Símbolo del sistema y realizar una prueba de ping. Esto es bastante útil para determinar si una conexión es estable o no. Ahí puedes ver si hay algo mal. Puedes ver saltos, lo que reflejaría que la conexión no es muy estable. Una señal que te hará tomar medidas para solucionarlo. Tienes que ir a Inicio, buscas Símbolo del sistema y pegas el siguiente comando: ping -t 8.8.8.8. A partir de ahí, va a empezar a hacer ping a los servidores DNS de Google. Verás que no para hasta que hagas algo.
Lo interesante es que lo mantengas así unos segundos, para que pueda realizar ping correctamente. Vas a ver que es algo que realiza cada segundo. Cuando quieras pararlo, tienes que pulsar la combinación de teclas Ctrl+C. En ese momento, te aparecerán los resultados en la pantalla. Si tienes un Internet inestable, vas a ver que hay paquetes perdidos. Va a aparecer la suma total, pero también en porcentaje.
En cambio, si tu conexión es buena, es decir, es estable, verás que aparecen 0 paquetes perdidos y 0%. Es una prueba sencilla y rápida que puedes hacer en Windows para determinar si hay algún problema con tu conexión o todo funciona correctamente.
Es recomendable dejar esta prueba durante varias horas, para comprobar si se pierden paquetes y también para saber cuál es la latencia mínima, máxima y media de los paquetes enviados y recibidos. En redes inalámbricas WiFi es posible que perdamos algún paquete debido a interferencias con otras redes, o un problema puntual. Por lo que no tienes que preocuparte. Con este método tan sencillo podrás saber perfectamente si ese corte de señal es «grave» o solamente ha perdido un paquete de manera aislada.
En el caso de que quieras comprobar la estabilidad de la red WiFi, nuestra recomendación es que desde otros dispositivos generes tráfico de red, por ejemplo, descargando archivos grandes de Internet, hacer test de velocidad o cualquier otra tarea que suponga un esfuerzo por parte del router y la red WiFi. De esta manera, ya no solo podrás saber la estabilidad de tu Internet por cable, también de la conexión inalámbrica de tu casa.
La velocidad, otra manera de medir
No es el mejor indicador, ya que entran en juego otros factores como la cobertura, la capacidad del router o de la tarjeta de red. No obstante, también puedes hacer una prueba de velocidad para ver si tienes una conexión estable o no. Eso te ayudará también a tener más conocimiento sobre cómo funciona tu red y si lo hace de forma correcta.
Puedes hacer esta prueba de velocidad de manera local, sin necesidad de consumir ancho de banda de la conexión a Internet, de esta forma, podrás hacer uso de programas como Jperf2 o iperf3 para realizar estas pruebas de velocidad de forma local sin necesidad de conexión a Internet.
Es recomendable que el tiempo de realización de estas pruebas de estabilidad duren más de 30 minutos. Con esto podremos asegurarnos fehacientemente de que la red cableada o WiFi es perfectamente estable o, de lo contrario, hay algún problema. Así no tendrás ningún tipo de dudas acerca de si realmente es estable o no la conexión.
Si ves que la velocidad es muy limitada, ya sea la de bajada o subida, podría tratarse de un problema de estabilidad. Por ejemplo, puede que tengas mal configurada la tarjeta de red, los drivers desactualizados o algún fallo con el router. No obstante, podría ser simplemente que estás demasiado lejos del punto de acceso.
Lo ideal sería que hicieras varias pruebas. Puedes ver la velocidad que te llega justo al lado del router, también conectando el aparato por cable y, por último, alejándote del punto de acceso. Eso te dará varias mediciones y podrás descartar problemas como, por ejemplo, que el router funcione mal. Si ves que la velocidad es muy buena cuando estás cerca del router, tal vez el problema de estabilidad sea simplemente que la cobertura no llega bien a esa zona. Vas a poder utilizar algún dispositivo, como puede ser un repetidor, sistema Mesh o PLC, para mejorar la red inalámbrica.
Por tanto, para ver si la conexión es estable en Windows, lo mejor es hacer la prueba del ping que hemos mostrado. También lo puedes combinar con un test de velocidad y tener así más información disponible para detectar cualquier problema y solucionarlo. Hay diferentes motivos por los que funciona lento Internet.
Por qué mi conexión no es estable
Si en el momento de realizar las distintas pruebas, comprobamos que la conexión a Internet no es estable, hay que tener en cuenta cuáles son los motivos que hay detrás de este problema. Y es que son varios puntos los que pueden afectar a que la red no funcione correctamente en tu dispositivo o en los diferentes equipos que están conectados. Por ejemplo:
- El cableado de Internet está en mal estado.
- La señal WiFi no es buena.
- Se está utilizando un canal con interferencias.
- La tarjeta de red del dispositivo está dañada o desactualizada.
- Software malicioso.
- Aplicaciones en segundo plano consumiendo banda ancha cuando no se desea.
Y es que son varios los factores que pueden estar detrás de este gran inconveniente que se puede sufrir en cualquier momento. Lo que debes tener claro es que si no es por culpa de uno de estos problemas, lo más probable es que sea cosa de la línea de banda ancha fija que tienes contratada con el operador.
¿Culpa del router?
Si directamente la velocidad tanto por cable como por WiFi, estando al lado del router, no es la contratada, posiblemente el problema no sea otro que el propio router y tu compañía, siempre y cuando hayas probado diferentes dispositivos y sistemas de conexión. Y es que no queda otra que ir probando distintas soluciones para salir de dudas y conocer cuál es el verdadero problema que hay detrás de tu conexión a Internet.
En este caso, podrás llamar a la misma y solicitar el soporte técnico. Muchas veces, con una simple llamada pueden conseguir solucionar el problema de manera remota. Aunque, en otros casos, si no dan con una solución a distancia, lo cierto es que te enviarán a un técnico con un router nuevo, el cual también hará una serie de comprobaciones para ver qué es lo que sucede en tu línea de banda ancha fija.
Además, si el equipo que tienes en casa tiene muchos años, o has mejorado la tarifa, posiblemente este no sea capaz de responder a esas mejoras de velocidad, por limitaciones técnicas, así que igual te dan otro más moderno, consiguiendo una mejor estabilidad, y olvidándote de los problemas que creías que venían de tus dispositivos.
Si la compañía no quiere renovártelo, podrás hacerte con un modelo de alta gama por ti mismo, que te servirá para muchos años, estés en la operadora que estés. Algo recomendable, sobre todo si eres gamer o necesitas una buena conexión y estabilidad. O, por otro lado, siempre está la posibilidad de cambiar de operador.