Hay ocasiones en las que resulta interesante navegar por Internet a través de un proxy o una VPN. Son dos opciones diferentes, aunque pueden cumplir la misma misión en determinados casos. Pero, ¿cuál es la mejor de cara a tener más velocidad? De ello vamos a hablar en este artículo. Si tienes dudas entre instalar una VPN o usar un proxy para navegar por Internet, y tu objetivo se que la velocidad no baje mucho, te vamos a explicar qué debes saber.
Ten en cuenta que en ambos casos vas a ver que la velocidad disminuye, aunque sea ligeramente. No es lo mismo que navegar directamente en la red, sin intermediarios. Además, dentro de cada una de estas opciones también vas a encontrar diferencias que pueden ser importantes, por lo que conviene elegir bien cuál usar.
VPN o proxy por velocidad
Para saber si es más rápido navegar a través de una VPN o un servidor proxy, lo mejor es que sepas exactamente cómo funciona cada uno. Podemos decir que, en líneas generales, una VPN va a afectar más a la velocidad que usar un proxy. Esto es así debido a cómo funciona cada una de estas opciones para navegar por Internet.
Una VPN va a cifrar toda tu conexión. Vas a conectarte a un servidor, el cual va a cifrar el contenido que envías y recibes por Internet. Esto es muy interesante al conectarte a una red Wi-Fi pública, por ejemplo, donde podrías tener problemas para mantener tu privacidad a salvo de posibles intrusos.
En cambio, un servidor proxy no va a cifrar esa conexión. Lo que va a hacer el proxy es actuar como intermediario. Al no cifrar la conexión por completo, como sí hace la VPN, la velocidad no va a caer tanto. Por tanto, podría ser la mejor opción si lo que quieres realmente es navegar sin que la velocidad de tu conexión se vea afectada o, al menos, lo mínimo posible.
Existe un tiempo de retardo al navegar a través de una VPN, que en el caso del proxy es menor. La VPN va a tener que cifrar y descifrar continuamente el tráfico. Eso sí, todo va a depender también de qué servicio utilices, como vamos a explicarte a continuación.
No cometas errores
Es importante que no cometas errores y lo es por varios motivos. Por un lado, si quieres que la velocidad sea adecuada, es esencial usar servicios que funcionen bien, que sean de garantías y no sean un lastre. Tanto si vas a instalar una VPN, como si vas a optar por un servidor proxy, es esencial que te informes y elijas uno que funcione bien y sea fiable.
Además, está el tema de la seguridad. Una VPN de mala calidad, puede suponer un problema importante para tu protección en la red. Podrías tener una falsa sensación de seguridad, por lo que tal vez cometas más errores al navegar. Por tanto, te recomendamos usar una buena VPN que ayude a cifrar bien la conexión. Podemos nombrar algunas opciones de garantías, como Surfshark o NordVPN.
En definitiva, podemos decir que usar un proxy es mejor que una VPN para mantener la velocidad. No obstante, no es la mejor opción para la seguridad, ya que no va a cifrar la conexión de la misma manera. Es una balanza que siempre vas a tener presente.