Telnet es un protocolo de red que permite conectarnos a otro equipo de forma remota. Esto permite llevar a cabo diferentes acciones en ese sistema como si estuviéramos allí físicamente, pero realmente estamos en otro lugar. No obstante, hoy en día es poco utilizado por sus limitaciones y problemas, como vamos a ver. Vamos a explicar en qué consiste y su funcionamiento, así como hablar de los peligros hoy en día y de cómo podemos activarlo en Windows si fuera necesario.
En qué consiste Telnet
Cuando hablamos de Telnet nos referimos al acrónimo de Telecomunication Network. No se trata de un protocolo de red nuevo, ni mucho menos; apareció en la década de 1960. Desde entonces ha servido para que muchos usuarios puedan establecer conexiones de forma remota a través de TCP/IP.
Hay que indicar que utiliza el puerto TCP 23 para establecer esas comunicaciones de forma predeterminada. Funciona a través de la terminal, ya sea en Windows, macOS o Linux, y no tiene aplicación gráfica como sí ocurre con otros programas y protocolos más modernos.
Funciona de tal manera que es necesario tener un cliente y un servidor para poder establecer la conexión. Funciona tanto en intranet como fuera de esa red. Lo que hace básicamente es crear una conexión remota entre dos equipos. El cliente es quien envía la solicitud y el servidor responde pidiendo un nombre de usuario y contraseña. Posteriormente se establece la conexión.
A partir de ahí podemos tener acceso remoto a un equipo y utilizarlo como si estuviéramos allí físicamente. Lógicamente es necesario que ambos equipos tengan activado este protocolo.
Usos de Telnet
Hemos explicado qué es y cómo funciona el protocolo de red Telnet. Ahora vamos a ver los principales usos que podemos darle. Una serie de acciones típicas para las que fue creado hace ya varias décadas, aunque también hoy en día lo podemos seguir usando si lo configuramos en nuestro equipo.
Solucionar problemas
Una de las principales razones por las que apareció el protocolo Telnet era para solucionar cualquier problema que hubiera en otro equipo. De esta forma un usuario podría conectarse de forma remota y acceder sin necesidad de estar físicamente en un determinado lugar.
Esto supuso un paso muy importante, ya que salvaba claramente las distancias. Por ejemplo en ámbitos académicos, una persona podía resolver cualquier problema que pudiera aparecer y no estar delante del ordenador.
Acceder a datos de forma remota
También sirve para acceder a datos de forma remota y poder leerlos. Por ejemplo ver una base de datos con información de miembros de una organización o consultar cualquier cosa dentro de un equipo que estuviera accesible a través de la red.
Telnet ofrece esta posibilidad y sin duda una vez más supuso un salto importante a nivel tecnológico. Cualquier usuario podía consultar información y datos a distancia, siempre que se conectara a un dispositivo compatible mediante este protocolo de red.
Iniciar sesión en otro equipo
Otra posibilidad más que ofrece es la de poder iniciar sesión en otro equipo de forma remota. Por ejemplo permite trabajar sobre un equipo al que necesitamos acceder y que tiene ciertos programas instalados que necesitamos.
Este protocolo permite precisamente esto y es algo muy interesante. Lo que hace una vez más es evitar tener que estar físicamente delante de ese equipo y simplemente iniciar sesión de forma remota.
Por qué es un peligro para la seguridad
Telnet es un protocolo que hoy en día podemos decir que está obsoleto. Aunque sigue existiendo y se sigue utilizando, lo cierto es que ha caído considerablemente su uso. Una de las razones es por seguridad, lógicamente. ¿Por qué ocurre esto? La información que se envía de un equipo a otro viaja sin cifrar, en texto plano. Esto incluye los nombres de usuario y las contraseñas. Esto significa que cualquier persona que tenga acceso a la red puede interceptar y leer fácilmente los datos transmitidos a través de TELNET. Esto representa un riesgo significativo para la seguridad de la información, ya que las contraseñas y otros datos sensibles pueden ser capturados y utilizados de manera maliciosa.
Como decimos, los datos transmitidos a través de TELNET no están encriptados, lo que los hace susceptibles a ser interceptados y leídos por terceros malintencionados. Esto es especialmente preocupante cuando se transmiten datos confidenciales o sensibles, ya que pueden ser capturados y utilizados de manera indebida. Además, TELNET no proporciona ningún mecanismo de autenticación fuerte. Esto significa que no hay una forma segura de verificar la identidad del usuario remoto. Cualquier persona que tenga conocimiento de la dirección IP y el puerto de un servidor TELNET puede intentar establecer una conexión y acceder a él, incluso sin tener las credenciales adecuadas.
Sin duda es un problema importante y algo que resuelve el protocolo SSH, que surgió como una opción más avanzada y novedosa que Telnet, con un funcionamiento similar. En este caso funciona a través del puerto TCP 22. El hecho de que sea un protocolo inseguro, ya obsoleto, ha hecho que los sistemas operativos modernos no lo traigan activado de serie. Por ejemplo, en los sistemas más recientes de Windows no podremos utilizarlo salvo que de forma manual lo activemos.
Dado que TELNET carece de medidas de seguridad sólidas, se recomienda encarecidamente evitar su uso en entornos en los que se requiera un nivel de seguridad adecuado. En su lugar, se sugiere utilizar protocolos de acceso remoto más seguros, como SSH (Secure Shell), que ofrece autenticación fuerte, cifrado de datos y protección contra ataques de interceptación y manipulación. Esto es algo que hizo que muchos usuarios y empresas, vieran seriamente afectadas sus actividades en algunos casos donde se utilizaba de forma frecuente. En todo caso, hoy en día es algo que está subsanado prácticamente en su totalidad.
Estos nuevos sistemas como SSH, ofrecen esa seguridad añadida. Pero no es todo, sino que son más personalizables, de forma que se pueden adaptar mucho mejor a otro tipo de circunstancias que la empresa puede requerir en algún punto de la implementación de estas herramientas. Lo que resulta en una actividad más eficiente, aparte de segura.
Cómo activar Telnet en Windows
Entonces, ¿podemos utilizar hoy en día Telnet? Lo cierto es que sí que es posible. De hecho todavía hay usuarios que, especialmente en redes internas, lo utilizan para conectar equipos y poder acceder de forma remota, consultar datos, etc. Ahora bien, va a ser necesario que lo activemos.
El proceso es sencillo, como veremos. Solo hay que llevar a cabo una serie de pasos y rápidamente habilitaremos el protocolo de red Telnet en Windows sin necesidad de instalar ningún programa adicional.
Para ello lo primero que debemos hacer es ir a Inicio. Una vez allí entraremos en el Panel de control y vamos a Programas. Posteriormente pinchamos en Activar o desactivar las características de Windows, que nos aparecerá en la parte de arriba junto a otras opciones.
Cuando pinchemos se desplegará una nueva ventana donde nos mostrará una gran cantidad de características de Windows que podremos activar o desactivar. Allí aparecerán diferentes protocolos de red entre los que se encuentra el Cliente Telnet.
Solo tenemos que marcar la casilla y le damos a Aceptar. Este proceso dura apenas unos segundos y ya tendremos activado el protocolo Telnet en Windows.
Hay que tener en cuenta que, si vamos a utilizar este protocolo para acceder de forma remota a otro equipo, ambos dispositivos tienen que tenerlo habilitado. Tendríamos que hacer el mismo proceso en el segundo ordenador, en caso de que no lo tenga activado ya. Además, si queremos desactivarlo en algún momento solo tendremos que seguir los mismos pasos y desmarcar la opción.
En definitiva, el protocolo de red Telnet sirve para conectarnos de forma remota a otro equipo. El problema es que hoy en día ha quedado obsoleto y no es seguro. No se utiliza tanto como hace unas décadas e incluso tendremos que activarlo en Windows, ya que no viene habilitado de serie.