Este es el Internet que vas a consumir según el uso que hagas

Este es el Internet que vas a consumir según el uso que hagas

Javier Jiménez

Siempre que navegues por Internet o utilices cualquier servicio que necesite conexión, algo que debes tener presente es cuánto va a consumir. Tal vez si te conectas en casa a través del router esto no sea tan importante, pero sí puede serlo si navegas con datos móviles o por algún motivo quieres ahorrar Internet. Hay momentos en los que vamos a consumir más. Por ejemplo, no es lo mismo ver un vídeo en Streaming en alta definición que enviar un e-mail. En este artículo vamos a hablar de cuánto Internet vas a consumir en función de qué uso vayas a darle.

En función de lo que vayas a hacer en Internet, el consumo será mayor o menor. No es lo mismo ver una película en 4K en Netflix, que escucha una canción a través de Spotify. Al igual que tampoco es lo mismo jugar online que estar offline en tu juego favorito. Por lo que son aspectos que debes tener en cuenta a la hora de conocer cuál es el consumo de datos de Internet en función de lo que quieras hacer.

 

Consumo de datos de Internet según el uso

No siempre tenemos acceso a una red Wi-Fi, como puede ser en casa o en cualquier lugar, y eso hace que debamos compartir datos desde el móvil. Incluso puede que utilicemos un router 4G o 5G, por lo que los datos no van a ser ilimitados. Es ahí cuando conviene realmente analizar el consumo a la hora de jugar online, ver vídeos, realizar una videollamada o incluso simplemente escuchar música.

Algo que te vendrá muy bien cuando no tengas una tarifa con datos ilimitados. Si eres de los que tienen un plan de estas características, entonces de poco te servirá cuántos GB consume ver una película en máxima calidad o jugar a videojuegos online. Y todo porque no se te gastarán. Pero si no es así, entonces sigue leyendo.

 

Jugar online

A la hora de jugar por Internet debemos tener en cuenta que los videojuegos pueden consumir bastante ancho de banda. Además, es necesario tener una buena conexión y en muchas ocasiones imprescindible una latencia baja. Todo dependerá de los gráficos que tenga, de qué tipo de juego sea o de la cantidad de jugadores que haya en una partida.

Ahora bien, ¿cuánto consume un juego? ¿Puede agotarse la tarifa de datos rápidamente? Si hacemos una estimación, en líneas generales un videojuego puede consumir entre 50 y 150 MB cada hora. Algunos pueden incluso pasar de los 200 MB, aunque otros consumirán bastante menos de 50 MB. Pero puedes tener una idea con esas cifras medias.

Si ponemos algunos ejemplos, Fortnite conume 100 MB, Overwatch más o menos 130 y Counter-Strike, que estaría en la parte más alta en cuanto a consumo, puede llegar a los 250 MB de media cada hora. Como ves, jugar 4 o 5 horas al Counter-Strike puede hacer que consumas 1 GB de datos.

Hay que tener en cuenta que un juego puede descargar muchos archivos. No solo nos referimos al juego en sí, sino a las futuras actualizaciones. Algunas pueden superar incluso los 100 GB. Es una cantidad muy superior a esos 50-150 MB que pueden consumir durante cada hora de juego. Por ejemplo, una actualización de unos 20 GB puede fundir la mayoría de tarifas móviles que podemos contratar.

Velocidad necesaria para jugar online

 

Ver vídeos de YouTube y plataformas de streaming

Por supuesto, ver vídeos a través de YouTube, Netflix o plataformas similares también puede suponer un consumo importante de Internet. No obstante, esto va a depender de la calidad del vídeo. No es lo mismo reproducir algo a 480p que a 4K, por ejemplo. Mientras más calidad, mayor será el consumo.

Si vas a conectarte a Internet desde el móvil o desde una conexión medida, en la que vas a tener que evitar pasarte, es conveniente que tengas en cuenta cuánto consume un vídeo de YouTube o Netflix. De esta forma evitarás sorpresas en la factura o no te quedarás sin datos para seguir navegando.

Para un vídeo en 480p, una hora de reproducción va a consumir aproximadamente 550-575 MB. Por tanto, con un par de horas vas a pasar de 1 GB de consumo seguro. Si pensamos en una tarifa móvil habitual que puede tener 20 GB, tardarías al menos de 40 horas en agotarla por completo.

Pero la cosa cambia si pasamos a reproducir un vídeo en 720p o, más aún, en 1024 HD. En este último caso, en función si es en 30 o 60 FPS, podemos consumir de 2 a 3 GB cada hora. Es decir, estaríamos multiplicando por 4-6 veces el consumo que teníamos al ver un vídeo en YouTube en 480p.

¿Y en 4K? Aquí el salto vuelve a ser más que importante. Con una hora de vídeo en YouTube podríamos consumir perfectamente 10-15 GB. La tarifa de datos se podría agotar a poco que nos descuidemos y estemos viendo un vídeo mucho tiempo sin percatarnos de que no estamos conectados por Wi-Fi.

Si necesitas ahorrar datos al ver vídeos en Internet, una buena idea es bajar la calidad. Buscar el punto de equilibrio entre calidad y consumo puede ser muy útil para no tener problemas.

Evitar cortes en YouTube

 

Emitir en Streaming

En este caso, en vez de reproducir un vídeo de YouTube o Netflix, lo que hacemos es emitir nosotros mismos. Por ejemplo, a través de plataformas como Twitch. Una vez más, esto va a depender de la calidad del vídeo. Podemos decir que es similar a las plataformas para ver vídeos por Internet.

Si emites en una calidad baja-media como podría ser 480p o 720p, puede consumir sobre 600 MB y 1 GB, respectivamente. Si la calidad es en 1024 HD, podemos consumir sobre 1,5 GB. En caso de que la calidad sea 2K o 4K, podemos pasar a 3 y 7 GB, respectivamente. El consumo, por tanto, va a estar vinculado directamente a la calidad.

En otras plataformas el consumo puede variar, pero en líneas generales va a ser similar. Por tanto, algo habitual que sería emitir en 1024 HD, puedes pensar que con cada hora de emisión vas a consumir aproximadamente 1,5 GB. Puede ser algo más o algo menos, pero para que tengas una idea aproximada.

Como en el caso de YouTube, ajustar la calidad de la imagen puede suponer un cambio importante. Tendrás que buscar el punto de equilibrio en función de los datos disponibles que tengas, el tiempo que vayas a emitir en Streaming, etc.

 

Videollamada

Otro punto a tener en cuenta es el consumo al realizar videollamadas. Por ejemplo, al usar plataformas como Skype. Básicamente estás emitiendo y recibiendo vídeo. Es otro uso más que puede llegar a consumir bastante Internet si no nos damos cuenta y estamos utilizando datos móviles. Esto va a depender también de la plataforma que utilicemos. Hay muchas, como son Skype, FaceTime, WhatsApp… No obstante, aunque haya diferencias realmente el consumo va a ser parecido. Va a depender más de la calidad de la imagen, como hemos visto en el caso de ver vídeos por Internet o emitir en Streaming.

Por ejemplo, Skype, si tiramos de datos que ofrece la propia aplicación, una hora de videollamada en 480p puede consumir en torno a 270 MB. Si esa misma llamada fuera en 720p, la cifra aumentaría hasta los 500 MB aproximadamente. Pero, además, va a incrementarse si hiciéramos una videollamada grupal. En el caso de FaceTime el consumo es algo inferior. No es el caso de WhatsApp, que sería muy parecido. Pero igualmente en ambos casos estaríamos hablando de aproximadamente 1 GB de consumo cada dos horas o dos horas y media teniendo en cuenta una calidad de 720p, que es algo habitual.

Por tanto, también al realizar llamadas de vídeo en Internet debes tener en cuenta el consumo de datos. Éste podría ser bastante elevado si inicias una conversación y dura mucho tiempo y además la calidad es buena. Podrías ver que tu tarifa de datos se agota sin que te des cuenta de ello.

 

Pasos para hacer videollamadas con seguridad

No importa qué tipo de programa utilices, ni qué tipo de dispositivo; siempre vas a tener que proteger tu seguridad si no quieres que tus datos personales puedan verse comprometidos. Por tanto, toma nota y ten en cuenta estos consejos si vas a hacer una videollamada próximamente o es algo habitual en tu día a día.

  • Usar herramientas oficiales y seguras: uno de los primeros puntos a tener en cuenta es la necesidad de usar herramientas que sean oficiales. Tenemos muchas opciones a nuestra disposición. Muchos tipos de programas que podemos utilizar para realizar videollamadas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todos ellos pueden ser seguros y fiables. A veces podemos encontrarnos con complementos que nos ayuden a contar con diferentes funciones, pero podría darse el caso de que no sean seguros. Hay algunas aplicaciones de mensajería y para realizar videollamadas que se centran principalmente en la seguridad. Esto significa que van a tratar nuestros datos correctamente y que no van a poner en riesgo lo que emitimos en ningún momento. Por ejemplo, Zoom, Skype o Meet son algunas opciones fiables que puedes tener en cuenta. Es importante que las aplicaciones las descargues desde su página oficial. También es buena opción utilizar tiendas seguras, como puede ser Google Play. De esta forma te aseguras de que no han sido modificadas de forma maliciosa y de que tus datos personales no van a estar comprometidos cuando navegues por la red. Una manera de hacer videollamadas seguras.
  • Cifrar nuestras cuentas: también será muy importante cifrar correctamente nuestras cuentas. Debemos usar contraseñas que sean fuertes y seguras. Tienen que contener letras (mayúsculas y minúsculas), números y otros símbolos especiales. Solo así podremos evitar la entrada de intrusos que puedan afectarnos. Además, esas contraseñas tienen que ser únicas. Es importante también contar con la autenticación en dos pasos siempre que sea posible y así poner una barrera extra de seguridad. Siempre que sea posible debes habilitar la autenticación en dos pasos. Es una barrera extra de seguridad que va a hacer que tus cuentas estén más protegidas. Suele ser un código que recibes por SMS, e-mail o al utilizar aplicaciones 2FA como es el caso de Google Authenticator.

Usar frases en las contraseñas

  • Tener los dispositivos libres de malware: por supuesto, los equipos que estemos utilizando para realizar videollamadas tienen que estar seguros completamente. Es importante que no haya malware de ningún tipo. Para ello será fundamental contar con herramientas de seguridad. Un buen antivirus puede prevenir la entrada de malware que llegue a afectar a nuestros sistemas. Esto es algo que debemos aplicar sin importar el tipo de sistema operativo o dispositivos que estemos utilizando. Algunos ejemplos interesantes de antivirus son el propio Windows Defender, Avast o Bitdefender. No obstante, hay muchas opciones tanto gratuitas como de pago. Eso sí, siempre debes utilizar una que realmente sea fiable y proteja tus datos correctamente en la red. Debes evitar programas de prueba o que no inspiren confianza. Esto sin duda va a ayudar a hacer videollamadas seguras y no tener problemas.
  • Actualizar correctamente: otro punto clave es tener actualizados correctamente tanto los dispositivos como las propias aplicaciones. A veces surgen vulnerabilidades que son aprovechadas por los piratas informáticos para llevar a cabo sus ataques. Será fundamental contar con los últimos parches y actualizaciones disponibles y poder corregir esos errores de seguridad. En el caso de Windows, para actualizar el sistema tienes que ir a Inicio, entras en Configuración y pinchas en Windows Update. Automáticamente te mostrará posibles actualizaciones que haya disponibles y puedas agregarlas. Es un proceso que deberías hacer de forma periódica con el objetivo de mantener la seguridad en todo momento.

Actualizar Windows 11

  • Utilizar redes fiables: por último, las redes a las que nos conectemos tienen que ser seguras. Hay que evitar introducir nuestras cuentas o enviar información desde redes Wi-Fi públicas. Ya sabemos que esto puede ser un problema para la seguridad y no conviene. Por ejemplo, aeropuertos o centros comerciales. No sabes realmente quién puede estar detrás de esa red y de qué manera podría poner en riesgo tus datos. En caso de tener que utilizar redes que no sean seguras, por ejemplo, si nos conectamos desde un centro comercial, lo más interesante es hacer uso de servicios VPN. Solo así podremos cifrar correctamente nuestras conexiones. Puedes usar opciones como ExpressVPN o NordVPN, que funcionan muy bien para cifrar la conexión. En definitiva, estos son algunos consejos interesantes para mantener siempre la seguridad y privacidad cuando vayamos a realizar una videollamada por Internet. Ya sabemos que esto lo podemos aplicar sin importar el tipo de dispositivos o sistemas operativos que estemos utilizando. Deberemos aplicarlo en móviles y ordenadores de igual forma.

Tal y como podéis ver, hay precauciones bastante importantes que debemos cumplir para poder disfrutar de las videollamadas con seguridad.

 

¿Cómo de peligrosas pueden resultar las videoconferencias?

Hay que tener extremo cuidado a la hora de organizar las videoconferencias (o llamadas de conferencia, por supuesto), principalmente por el hecho de que existen altas probabilidades de que personas no autorizadas puedan escuchar la llamada y/o tener acceso al vídeo. ¿Por qué? Aquella persona no autorizada puede ser un cibercriminal, ya sea de origen interno o externo de una organización, y podría tener intenciones de manipular lo que se dice en las llamadas o lo que ocurre en el vídeo.

He ahí la importancia de extremar cuidados, especialmente cuando se organizan videollamadas o llamadas de conferencia con temática delicada. Quien sea el encargado de organizar y enviar las invitaciones, debe prestar atención respecto a quienes son los invitados. Si se están seleccionando a los invitados de manera individual, revisar si efectivamente nos referimos a esas personas. Si se están enviando invitaciones a conferencias a grupos de contactos, corroborar que los grupos de contactos contengan realmente a los miembros que deben estar involucrados.

Por otro lado, existen otras medidas que debes tener en cuenta en el medio de la videoconferencia o llamada en cuestión:

  • Si estás compartiendo tu pantalla, asegúrate de tener abiertos los programas y/o documentos estrictamente necesarios. Si estabas realizando alguna actividad previa que no tiene relación con el tema o si es un trámite personal, cierra todo lo relacionado a ello. Es muy probable que, por accidente, expongas datos personales propios o de terceros. Un fallo muy habitual es mostrar la bandeja de correo electrónico que siempre tenemos abierta, y es posible que, sin querer, estemos mostrando información confidencial de trabajo.
  • Si estás en una videoconferencia en donde todos tienen habilitada la cámara web, debes tener cuidado sobre lo que se está viendo desde tu cámara. Evita exponer objetos personales delicados como tarjetas de crédito, números de identificación, pasaportes o lo que sea que podría ser aprovechado de alguna manera por algún usuario malicioso. Esto es aún más importante si la videoconferencia se está grabando.

¡Presta atención a los deepfakes! ¿Por qué deberíamos tener tanto cuidado si esto es meramente una reunión virtual? ¡No es tan peligroso como parece! Cuidado, además de todos los riesgos ya mencionados y asumidos, se encuentran los deepfakes. Los deepfakes permiten manipular la imagen que mostramos, y también el audio, por lo que debemos asegurarnos de que no estamos ante un deepfake. Los avances tecnológicos para este tipo de actividades ilícitas las benefician en gran medida.

Los deepfakes tienen como origen el Deep Learning o el Aprendizaje Profundo y este aplica simulación de redes neuronales a grandes conjuntos de datos para crear un producto falso. Los avances en este ámbito tecnológico se dan tan rápidamente y los resultados son sumamente sorprendentes. Cualquiera que no esté consciente de este tipo de prácticas o si lo estuviese, pero no lo recuerda en ese momento, podría caer en la trampa de un deepfake. Es posible encontrarnos con soluciones gratuitas que nos proveen infinitas posibilidades para poder manipular la realidad, de acuerdo a nuestros deseos y por qué no, crear una realidad que nos agrade. FakeApp y DeepFakeLab son dos de las mejores soluciones que podríamos encontrar sin coste alguno. En algunos casos es necesario tener mayor nivel de conocimiento en cuanto a herramientas de edición de vídeo y programas similares.

Muchas veces es difícil de dimensionar, pero este tipo de situaciones puede ocurrir y muchísimos malentendidos se pueden dar a razón de un deepfake. En gran parte de los casos, el deepfake pasa desapercibido y cumple con mucho éxito su misión. Entonces, ¿cuál es la mejor medida de seguridad ante personas mal intencionadas? Más que nada, mucha cautela a la hora de organizar las videoconferencias y llamadas de conferencia.

 

Llamada de voz

¿Y una llamada de voz? Aquí vamos a consumir bastante menos. A fin de cuentas, en una videollamada estamos enviando y recibiendo tanto vídeo como audio. En el caso de una llamada de voz, únicamente vamos a intercambiar audio. No vamos a tener un consumo tan elevado en ese caso.

Por ejemplo, una llamada de voz a través de WhatsApp puede consumir sobre 1 MB cada 5 minutos. Es decir, apenas 12 MB cada hora. Mientras que una videollamada hablábamos de varios cientos de megas, en este caso va a estar en torno a 10-15 MB, lo que supone una cifra bastante inferior.

Para consumir una tarifa de datos de 10 GB, por ejemplo, tendrías que estar llamando cerca de 100 horas. Por tanto, no es algo que deba ser tan preocupante como reproducir vídeos a través de Internet, emitir en Streaming o realizar una videollamada. Al menos no en circunstancias normales, ya que, si por ejemplo estás en otro país usando roaming, en ese caso el consumo puede ser importante.

 

Actualizaciones

Pero no todo es jugar, ver vídeos o comunicarnos. El propio sistema también va a consumir datos de Internet incluso sin que nos demos cuenta. Hay actualizaciones automáticas del sistema operativo o de cualquier programa que tengamos instalado. Esto puede llegar a consumir bastante de la tarifa. Al igual que el simple hecho de descargar una nueva app en tu móvil sin WiFi.

¿Cuánto Internet consumen las actualizaciones? Va a depender de qué tipo de actualización sea. Si se trata de una aplicación, como puede ser el navegador, realmente no va a consumir mucho y apenas necesitará unos cuantos megas. Ahora bien, ¿qué ocurre con una actualización grande de Windows, por ejemplo?

En el caso de las actualizaciones del sistema operativo la cosa cambia. Pueden ser cientos de MB o incluso pasar de 1 GB. Es por ello que se aconseja siempre actualizar a través de redes Wi-Fi, ya que podrías agotar los datos de tu tarifa o incluso que se quede pillada la actualización a la mitad y eso genere problemas importantes.

Para evitar sorpresas con las actualizaciones, siempre puedes programarlas a ciertas horas o evitar que se ejecuten si no estás conectado a una red Wi-Fi. Pero igualmente, cuidado si compartes datos con el móvil, ya que realmente el ordenador se conecta por Wi-Fi cogiendo los datos del teléfono.

 

Spotify

También es muy común escuchar música a través de Internet, con aplicaciones como Spotify. ¿Cuánto consume? Aquí podemos hablar de lo que explican en la propia web de Spotify. El consumo es de aproximadamente 40 MB por hora. Es decir, una canción que dure 5 minutos va a suponer más o menos 3,30 MB.

Consejos y utilidades para Spotify

En este caso tampoco va a suponer un golpe muy importante para la tarifa de datos, pero igualmente debes gestionarlo para no llevarte sorpresas. Puedes escuchar incluso un día entero música, las 24 horas, y no agotarás 1 GB de datos. No obstante, esto puede depender también ligeramente de la calidad, pero sí sirve esta cifra como media aproximada.

Otras plataformas similares tienen un consumo parecido. Siempre puedes controlar la calidad en este tipo de servicios, en caso de que tengas una tarifa muy limitada o te queden pocos megas y no quieras que se agoten.

 

Aprovechar toda la velocidad

Aprovechar al máximo la velocidad de tu conexión a Internet es clave para tener una experiencia satisfactoria mientras navegas por Internet. Para poder hacerlo, podemos seguir una serie de consejos que nos van a ayudar en diferentes aspectos de nuestra conexión.

En primer lugar, es importante asegurarse de que la velocidad contratada se está recibiendo en tu hogar. Para ello, puedes hacer una prueba de velocidad y compararla con la velocidad contratada. Si hay una gran diferencia, es recomendable contactar con tu proveedor de Internet (ISP) para solucionar el problema. Una vez que tienes la velocidad adecuada, es importante asegurarse de que el router esté en un lugar óptimo para recibir la señal. El router debe estar colocado en un lugar central y elevado para que la señal se propague de manera uniforme. Además, es importante evitar obstáculos como paredes o muebles que puedan disminuir la señal.

Otro consejo importante es evitar el uso de aplicaciones que consuman una gran cantidad de ancho de banda. Las aplicaciones de descarga de archivos, streaming de video o videojuegos son algunas de las aplicaciones que más ancho de banda consumen. Limitar su uso o programarlos para utilizarlos en momentos de baja demanda puede ayudar a aprovechar mejor la velocidad de conexión. Otra opción es optimizar la configuración de tu router. Esto incluye actualizar el firmware del router para asegurarse de que esté funcionando con la última versión disponible, así como optimizar las configuraciones de seguridad y calidad de servicio (QoS) para priorizar el tráfico de red.

Además, es recomendable utilizar un cable Ethernet en lugar de una conexión inalámbrica. Las conexiones inalámbricas pueden ser más convenientes, pero también son más susceptibles a interferencias que pueden disminuir la velocidad de conexión.

Por último, es importante asegurarse de que no haya otros dispositivos en tu hogar que estén utilizando la conexión a Internet al mismo tiempo. Muchos dispositivos modernos, como teléfonos móviles y tabletas, tienen aplicaciones que se ejecutan en segundo plano y que pueden consumir ancho de banda sin que te des cuenta. Desactivar estas aplicaciones o limitar su uso puede ayudar a aprovechar mejor la velocidad de conexión.

 

Reducir el consumo

Como puedes ver, los diferentes servicios y actividades en Internet pueden tener consumos diferentes. Esto puede llegar a ser un problema, sobre todo cuando tenemos tarifas de datos que pueden ser algo limitadas. Dependiendo de la cantidad de tiempo que utilicemos algunos como Youtube o Spotify, sin estar conectados a una red Wi-Fi, el consumo puede ser elevado. Por lo cual es posible que algunas tarifas de datos se queden algo cortas durante todo el mes. Pero, ¿cómo se puede reducir?

 

Calidad de las transmisiones

Pero algo con lo que cuentan algunos de estos, es que se puede cambiar la calidad de las transmisiones. Esto nos ayuda a tener un consumo más reducido, con la consecuencia de perder un poco de calidad de video y sonido. Incluso si queremos que el consumo sea mínimo, tendremos que bajar la calidad casi al completo. Lo cual en un lugar como Youtube, puede hacer que el video sea imposible de visualizar.

En el caso de Youtube, decidieron sacar su propio sistema para poder escuchar los videos sin necesidad de verlos. Lo cual puede ser de ayuda cuando escuchamos música por esta plataforma. Esto hace que el video no se esté reproduciendo, por lo cual hay un ahorro de datos considerable. Con Spotify tenemos algo parecido. La calidad del audio se puede reducir, pero en este caso podremos escuchar todo con comodidad. Y si queremos que el consumo se reduzca casi por completo, solo tendremos que crear una lista de reproducción y descargar las canciones.

En otros casos esto no es posible hacerlo. Como por ejemplo a la hora de jugar online. Aquí podemos reducir la calidad del video o del juego para que este consuma menos. Por lo cual tendremos unos consumos similares en todo momento. Todo es diferente si jugamos vía streaming, donde algunos servicios permiten variar la resolución para que el juego sea lo más parecido a cuando juegas directamente en una consola o un PC.

Al igual que hay diferentes plataformas de streaming que tampoco te permiten ajustar la calidad de reproducción de streaming. Por lo que te será imposible modificar este aspecto para reducir el consumo de datos móviles. Pero, lo ideal es que siempre que puedas, cambie esta configuración para ahorrar GB.

 

Usa siempre que puedas WiFi

Si no quieres tener que preocuparte de la cantidad de GB que consumes por hora a la hora de ver una serie, jugar online o descargar aplicaciones, entonces lo ideal es que te esperes a estar conectado a una red WiFi. De esta manera, podrás olvidarte de revisar cuantos datos móviles te quedan en tu tarifa. Y así, cuando te haga falta de verdad, tendrás gigas en tu tarifa para navegar por Internet a buena velocidad.

En definitiva, como has podido ver existen diferencias entre lo que puedes consumir a la hora de ver vídeos, escuchar música, jugar o las actualizaciones. Hay diferencias importantes entre, por ejemplo, escuchar una canción y actualizar el sistema operativo de tu dispositivo. Además, la calidad de los vídeos o audios van a influir siempre.

¡Sé el primero en comentar!