Las redes inalámbricas son muy importantes hoy en día. La mayoría de las conexiones vienen a través de Wi-Fi. Las conexiones alámbricas han pasado a un segundo plano debido principalmente al auge de los dispositivos móviles y la mejora de las redes Wi-Fi. Sin embargo hay que tener en cuenta que este tipo de conexiones no nos permiten únicamente navegar por Internet. También podemos utilizar la tecnología Wi-Fi para transferir archivos, por ejemplo. En este artículo vamos a hablar del Wi-Fi Direct. Vamos a explicar cómo saber si nuestro equipo es compatible y lo podemos utilizar.
Qué es el Wi-Fi Direct
En primer lugar vamos a comenzar a explicar qué es el Wi-Fi Direct. Se trata de la tecnología que nos permite crear una conexión Wi-Fi de un equipo a otro sin la necesidad de contar con un router. No tiene conexión a Internet, como hemos mencionado. Lo que permite es transferir archivos entre estos dispositivos. Por ejemplo conectar una impresora y un ordenador para poder imprimir documentos.
Podemos decir que es una tecnología muy parecida al Bluetooth. Está presente en muchos dispositivos móviles y también en equipos de escritorio. Hay cada vez más dispositivos que son compatibles con esta tecnología. No se trata de algo nuevo, ya que lleva con nosotros desde hace mucho tiempo. Tiene por tanto peculiaridades similares a otras tecnologías, aunque sí existen diferencias en cuanto a rendimiento. No obstante, hay una diferencia clara respecto al Bluetooth: la velocidad de transferencia.
Esta diferencia de velocidad puede ser hasta 10 veces superior a la que ofrece la conexión por Bluetooth. En cambio, ambas cuentan con un inconveniente el cual comparten, y es el límite en el espacio de la conexión. Esto nos indica que no están preparadas para realizar envíos de archivos a través de internet, más bien están creadas para compartir archivos más bien sencillos, siempre y cuando los dispositivos se encuentren dentro del rango de acción, el cual no es muy grande.
En definitiva, podemos decir que el Wi-Fi Direct sirve para conectar dispositivos entre sí y transferir archivos e información. Hoy en día lo normal es que los equipos con Windows 10 o Windows 11 sean compatibles con esta tecnología y que solo necesitemos otros dispositivos para conectarlos. Sin embargo no todos ellos son compatibles y por ello vamos a explicar cómo podemos averiguar si nuestro equipo Windows es compatible con Wi-Fi Direct.
Pero esto puede tener otros usos. Y es que al igual que podemos compartir los archivos entre dos dispositivos, también podemos utilizarlo con impresoras. Esto es independiente de utilizarlo para ordenador o móvil, pues simplemente necesitaremos una impresora que sea compatible con esta conexión. Por otro lado también podemos hacer una pequeña conexión que simula un servidor multimedia, pues se puede utilizar para compartir archivos con la pantalla de las televisiones compatibles, o para pasar contenido desde una cámara de foto o vídeo a otro dispositivo. Obviamente, todos deben ser compatibles con Wi-Fi Direct.
Por lo general, esto no tendría que suponer un problema, ya que hay muchos dispositivos actualmente compatibles con esta tecnología. Tanto teléfonos móviles, portátiles, impresoras, cámaras o televisiones. Pero si esto no es así, siempre podremos optar por instalar algún dispositivo que sí lo sea, cómo puede ser un Chromecast. Si seguimos con las televisiones, podemos utilizar consolas como centro multimedia en ellas. En estos casos, las consolas de PlayStation y Xbox tanto de generación actual como anterior, son compatibles. En todo caso, poco a poco esta tecnología ha ido cambiando hasta llegar a ser compatible con otras también muy conocidas. Como son el NFC y el Miracast. Esto hace que sea mucho más versátil, y sobre todo accesible para más dispositivos y sencilla de utilizar.
Si los traducimos al español podemos decir que es conexión inalámbrica directa. Eso es, básicamente, lo que permite esta tecnología: conectar directamente dos dispositivos.
Beneficios para las empresas
Como has podido ver, Wi-Fi Direct es una tecnología que nos permite una comunicación entre diferentes dispositivos sin necesidad de una red inalámbrica haciendo de intermediaria. Esto es algo que, para las empresas, les puede generar algunos beneficios. Algunos de ellos son:
- Comunicación rápida y eficiente: Con esta tecnología, se permite a los dispositivos conectarse de una forma rápida y transferir los archivos que sean necesarios sin la necesidad de configuraciones que pueden resultar complejas. Esto también mejora la eficiencia en las comunicaciones y reduce los tiempos de inactividad.
- Ahorro de costes: Como para poder establecer esta conexión, no es necesario ninguna infraestructura de red inalámbrica, puede ayudar a ahorrar dinero a la empresa. Esto hace que no sea necesario adquirir equipamiento o realizar un mantenimiento de la red inalámbrica. Reduciendo así, los costes en hardware y mantenimiento.
- Movilidad: Con esta tecnología, los empleados tienen más libertad, ya que no estarán limitados a una conexión de red inalámbrica o cableados. Esto aumenta la movilidad, y sobre todo, la flexibilidad de los empleados en el puesto de trabajo.
- Productividad: Al permitir a los dispositivos comunicarse de una forma más rápida y eficiente, se permite la transferencia de datos en tiempo real. Esto tienen como consecuencia, una mejora en la productividad de forma general.
- Seguridad: Utilizar conexiones seguras es muy importante en el sector empresarial. Con Wi-Fi Direct, tendremos una autenticación segura, y un cifrado de los datos que garantizan la seguridad en las comunicaciones inalámbricas.
- Mejorar la experiencia: Con este tipo de tecnología, se puede permitir el uso a clientes. Así se podrán conectar a dispositivos preestablecidos dentro de la empresa. Lo cual mejora considerablemente la experiencia de los mismos, aumentando así su satisfacción.
Por lo cual se trata de una tecnología, que puede ser muy interesante para casi cualquier empresa. En todo caso, siempre será necesario mantener unas medidas de seguridad, incluso con equipos que no están conectados a Internet.
Cómo saber si un ordenador es compatible con Wi-Fi Direct
Windows cuenta con un gran abanico de posibilidades y cuenta con software muy variado y a veces es interesante saber si es compatible con una determinada tecnología o aplicación. En este caso vamos a ver cómo saber si un ordenador con Windows es compatible con Wi-Fi Direct.
El proceso para averiguar si nuestro ordenador, ya sea con Windows 10 o Windows 11, es compatible o no con Wi-Fi Direct es muy sencillo. El propio sistema operativo nos ofrece esta información a través del Símbolo del sistema. Simplemente tenemos que introducir un comando y posteriormente buscar los datos necesarios.
Por tanto el primer paso que vamos a dar es entrar en el Símbolo del sistema. Vamos a Inicio, escribimos Símbolo del sistema y lo ejecutamos en modo administrador. Tenemos que escribir el comando ipconfig/all y lo ejecutamos. Allí nos mostrará una gran cantidad de datos e información relacionados con nuestra conexión y el hardware disponible.
Lo que nos interesa en este caso es buscar por Microsoft Wi-Fi Direct Adapter. En caso de que encontremos esta frase entre todos los datos que nos muestra, eso significa que nuestro ordenador con Windows es compatible con Wi-Fi Direct.
Como vemos es un proceso muy sencillo y rápido el que debemos llevar a cabo para saber si nuestro equipo con Windows 10 es compatible con la tecnología Wi-Fi Direct. Es cuestión de segundos podremos saber si es así. No vamos a tener que instalar ningún programa para ver la compatibilidad, ni llevar a cabo ningún tipo de configuración que resulte compleja.
Usos de esta tecnología
Hay que mencionar que cada vez tenemos más dispositivos que soportan la tecnología Wi-Fi. Tenemos un gran abanico de posibilidades en lo que conocemos como los dispositivos IoT o Internet de las Cosas. Son todos aquellos equipos conectados a la red en nuestros hogares. Si hablamos de equipos con Wi-Fi Direct la cifra también ha crecido en los últimos tiempos. Esto nos permite tener un mayor control sobre los equipos conectados y poder tener diferentes opciones que forman parte de nuestro día a día.
Un ejemplo del uso del Wi-Fi Direct es para imprimir documentos en una impresora. Simplemente tenemos que conectar un ordenador o un móvil a este aparato y enviar los archivos que queremos imprimir. Por ejemplo archivos PDF, una imagen, un documento de texto… No necesitaremos utilizar Internet para ello.
También sirve para enviar archivos multimedia a una televisión. Podemos enviar un vídeo, un archivo de audio o lo que sea a este tipo de dispositivos y, sin necesidad de que estén conectados a la red, podamos intercambiar información. Esto lo podemos hacer, por ejemplo, mediante Chromecast. Lógicamente los equipos tienen que ser compatibles.
Otro uso común es poder pasar archivos de una cámara a un móvil, por ejemplo. Si estamos de viaje y nos interesa tener los vídeos o fotos que hemos hecho con una cámara, pero no contamos con el cableado necesario, podemos utilizar Wi-Fi Direct y, de una manera sencilla, descargar todo el contenido de la cámara en el teléfono.
Conclusiones del uso de Wi-Fi Direct
Se trata de una tecnología que nos permite enviar datos rápidamente entre dispositivos. No necesitamos que estén en una misma habitación y mucho menos que estén conectados físicamente a través de un cable. Más allá de ordenadores o móviles también podemos encontrarlo en impresoras, cámaras o escáneres. Hay una gran cantidad de equipos donde podemos utilizar esta tecnología.
Si pensamos en cómo nos conectábamos antes, cómo intercambiábamos información entre dispositivos, y lo comparamos con la actualidad el cambio es realmente importante. Gracias a la tecnología inalámbrica y el poder disponer de equipos más compatibles con este tipo de conexiones, podemos intercambiar datos con mayor facilidad.
En definitiva, siguiendo estos pasos que hemos mencionado podemos averiguar rápidamente si nuestro equipo es compatible con Wi-Fi Direct. Hemos visto los pasos necesarios para obtener esta información desde un dispositivo con Windows 10 o Windows 11, que son hoy en día las versiones más utilizadas en equipos de escritorio. No todos los equipos son compatibles con esta tecnología, aunque lo normal es que los más actuales sí lo sean.