Estamos trabajando tranquilos con el ordenador y, de repente, nos llega una serie de actualizaciones, se instalan y Windows nos pide reiniciar el ordenador, cuando no nos obliga ello, para completar su instalación. Este es uno de los hechos más molestos con los que nos podemos encontrar en el día a día, sin embargo, aunque muchos no lo sepan, tiene su explicación (aunque no su justificación).
Por lo general, la mayoría de las actualizaciones de Windows modifican partes internas del sistema operativo, como puede ser el mismo núcleo, partes cargadas en la memoria que, por un motivo u otro, no pueden finalizarse, lo que obliga al sistema a pedir permiso al usuario para reiniciarse y completar sin problemas la instalación. Lo mismo ocurre con muchos programas que, al instalarlos, probablemente sobrescriban algunas librerías del sistema o necesiten acceder a partes del equipo que están en uso para finalizar su configuración y no pueden hacerlo mientras se ejecuta (probablemente por motivos de seguridad, para evitar que el equipo se cuelgue).
De esta manera, si una actualización o un programa necesitan, por ejemplo, sustituir una librería DLL, la copiarán automáticamente a una carpeta temporal y crearán una tarea de manera que, cuando se reinicie el sistema, se sustituya dicha librería sin que el proceso suponga ningún peligro para la estabilidad del sistema y de sus aplicaciones.
Es cierto que Microsoft ha mejorado el sistema de actualizaciones de su sistema operativo, especialmente con Windows 10, sistema que necesita reiniciarse mucho menos que su predecesor Windows 7, sin embargo, en el caso de este sistema operativo, muchos usuarios se quejan de que, tras instalar una actualización, Windows se reinicia mientras se está utilizando sin previo aviso, aunque esto es culpa de una mala configuración del sistema operativo. Evitar el error 0x8007371b es importante para actualizar Windows.
Está claro que podemos entender que tras realizar una actualización mayor (como, por ejemplo, de Windows 7 a Windows 10) sea necesario reiniciar el equipo, sin embargo, seguir con necesidad de reinicios simplemente por instalar un parche es más dejadez que necesidad, y un ejemplo de ello es que, por ejemplo, al actualizar los drivers de la tarjeta gráfica, no necesitamos reiniciar, y eso que, sí o sí, están ejecutándose constantemente y en tiempo real. El problema 0x800700a1 al actualizar Windows puede aparecer también.
Microsoft debe seguir trabajando en que las actualizaciones de Windows sean lo más invisibles posible
Está claro que actualizar un sistema operativo puede ser una tarea muy complicada y que, en muchos de los casos, es obligatorio reiniciar el sistema para que todo se aplique bien. Sin embargo, desde hace ya unos meses, Ubuntu cuenta con una función, llamada «Live Patching«, que permite a los usuarios realizar actualizaciones del Kernel y aplicar todos los cambios sin necesidad de reiniciar el sistema.
Si quieres más información sobre cómo funciona esta tecnología que Microsoft no quiere añadir a su sistema operativo, os recomendamos leer el siguiente artículo.
¿Te molesta que Windows tenga que reiniciarse tras instalar sus actualizaciones?