Tener una buena conexión de Internet, es un objetivo que no siempre es posible. Entran en juego diferentes factores, que pueden hacer que la señal llegue mejor o peor a una habitación, que la velocidad sea buena o mala o, incluso, que puedas o no conectar determinados aparatos. En este artículo te vamos a hablar de por qué no importa tanto el Internet que tengas contratado, sino más bien otros aspectos que podrían limitar la conexión.
Vamos a hablarte de cuáles son las principales cosas que podrían limitar tu conexión de Internet. Esto te ayudará a que realices diferentes cambios o ajustes y lograr así que la señal llegue mejor o no sufrir cortes continuos cuando intentas ver un vídeo en Streaming. A veces, solo con mejorar pequeños detalles puedes tener una conexión más potente.
Por qué la conexión es limitada
Es posible que te hayas encontrado con algún problema al intentar navegar por Internet. Por ejemplo, puede que la velocidad sea lenta al descargar algún archivo, se corten los vídeos de YouTube o no tengas cobertura en alguna habitación. Crees que al contratar otra tarifa superior todo esto va a mejorar, pero te encuentras con que no es así.
Muy lejos del router
El motivo más común por el cual hay problemas para navegar por Internet, es por estar conectado por Wi-Fi demasiado lejos del router. La señal llega débil y esto hace que haya cortes, la velocidad es limitada y, en definitiva, vas a tener problemas para utilizar aplicaciones y servicios de todo tipo.
Aunque contrates una mejor tarifa de Internet, el problema va a seguir ahí. Da igual tener más velocidad contratada. Lo que debes hacer es mejorar la cobertura. Para ello, puedes optar por sistemas Mesh, dispositivos PLC o repetidores Wi-Fi y poder llevar la conexión a diferentes lugares de tu vivienda sin problemas.
Utilizas malos aparatos
Por supuesto, los dispositivos que utilices van a ser clave. Si usas un ordenador con una tarjeta de red limitada, aunque contrates mejor Internet no vas a poder aprovecharlo. Vas a estar limitado a Fast Ethernet, por ejemplo, o a una conexión por Wi-Fi que no sea doble banda o no tenga una buena velocidad máxima. Lo mismo puede ocurrir con el propio router o cualquier repetidor que uses.
Debes observar muy bien las características de tus aparatos y ver si el problema de una mala conexión puede ser por esto. Siempre puedes cambiar la tarjeta de red o comprar un repetidor que tenga más calidad, por ejemplo.
Mala configuración
Es importante tener bien configurada la tarjeta de red en Windows, así como el propio router o cualquier dispositivo que vayas a usar para navegar por Internet. Cualquier fallo que cometas en los ajustes o configuración, puede hacer que la señal no llegue bien o tener problemas para alcanzar una calidad óptima.
Por ejemplo, es clave elegir un canal que no esté saturado en el router, aprovechar la doble banda o configurar los ajustes de red en aparatos como puede ser la televisión. El objetivo es lograr que la señal llegue bien, sin cortes, y puedas aprovechar correctamente la tarifa de Internet que has contratado.
Problemas con el cableado
Esto es importante, ya que es algo que mucha gente no tiene en cuenta. ¿Utilizas buenos cables de red Ethernet? Si son antiguos o están deteriorados, vas a estar limitado a un máximo de 100 Mbps. Esto se conoce como Fast Ethernet. Por tanto, va a dar igual si tienes 100 Mbps de fibra óptica o 1000, ya que no vas a poder pasar de esos 100 Mbps.
Para poder evitar problemas con el cableado, es importante tener mínimo cables de CAT 5e. Son Gigabit Ethernet, por lo que van a alcanzar hasta 1 Gbps. También debes revisar que estén en buen estado y no haya ningún problema por estar dañados.
Por tanto, estas son algunas causas por las cuales tu conexión de Internet puede estar limitada. Es importante que las tengas en cuenta antes de contratar otra tarifa superior, ya que muy probablemente no lo necesitas y no va a solucionar los problemas que tienes.