Siempre que hay algún problema con la conexión de Internet, una de las primeras opciones que solemos tener en cuenta es la de comprar un repetidor Wi-Fi. Pero, ¿realmente es necesario? ¿Va a mejorar la conexión? Sí y no. Dependerá de cada caso. Por ello, te vamos a explicar todo lo que debes tener en cuenta si ya tienes un router moderno, con buena capacidad. No compres por comprar, ya que la conexión podría incluso ir peor.
Ten en cuenta que no todos los repetidores Wi-Fi son iguales. De hecho, puedes encontrarte con modelos muy malos, de poca calidad y que van a tener muchas limitaciones. Es importante que analices muy bien si realmente vas a necesitar tener un repetidor inalámbrico en casa o, por el contrario, te basta con tu router. Descubre cómo configurar router Wi-Fi nuevo.
Usar o no un repetidor Wi-Fi
La pregunta es clara: ¿necesitas utilizar un repetidor Wi-Fi si tienes ya un buen router? Seguramente no. Si la señal que llega a una zona en concreto es muy débil, lo ideal es que realices algunos cambios. No obstante, usar un repetidor sí puede venir bien en algunas circunstancias, siempre y cuando sea de calidad.
¿Tienes bien ubicado el router?
La primera pregunta que debes hacerte es si tienes bien ubicado el router. Esto es fundamental. Si utilizas un router moderno, de garantías, es clave que lo tengas bien ubicado. Si cuenta con Wi-Fi 6, la señal va a llegar algo mejor y obtendrás también mayor velocidad. Por tanto, lo normal es que no necesites un repetidor y en caso de que lo utilices, la conexión podría ir peor. Pero, ¿qué es ubicar bien el router? Lo mejor es que lo pongas en una zona central de la vivienda. Elige un sitio desde donde pueda repartir bien la señal, para conectar aparatos de todo tipo. Además, deberías alejarlo de posibles interferencias como son dispositivos que utilicen Bluetooth. Eso podría dar lugar a fallos.
En las viviendas nuevas a partir de 2013 en España, tenemos un PAU (Punto de Acceso al Usuario) donde tenemos la toma de fibra, y generalmente el instalador pone aquí el router para proporcionar cobertura a toda la casa. Ponerlo en esta zona es un completo error, porque estará encajonado y tendrás menos cobertura que si lo colocas en el salón. Dependiendo de cómo sea la instalación de la fibra en la vivienda, podrás hacer dos cosas diferentes:
- Si el operador te pone una ONT y el router por separado, puedes mover el router directamente al salón, usando una toma de red cableada en esta zona, y usar la otra toma de red para llevar la señal nuevamente hasta el PAU y conectarlo a un switch, desde donde repartiremos la conexión a Internet por toda la casa. Este método es perfecto para no tener que comprar nada más, solamente el switch para repartir la conexión a Interner por todas las habitaciones.
- Si el operador te pone el router con ONT integrada, en este caso tendrás que dejarlo en el PAU, y en el salón poner un punto de acceso Wi-Fi. Podrás comprar un router neutro y usar el del operador en modo puente, para así tener la dirección IP pública en el router neutro nuevo que has comrpado. Otra opción es ponerlo en modo AP y que el router del operador actúe como principal. Por último, también podrías comprar un sistema WiFi Mesh para repartir la conexión a Internet por toda la casa.
Como podéis ver, es muy importante ubicar bien el router, dependiendo de lo que te ponga el operador, podrás optar por una opción u otra.
¿Necesitas velocidad o señal?
Otra pregunta que debes hacerte es si necesitas alcanzar una buena velocidad o simplemente tener señal para conectarte. Si lo único que necesitas es que la cobertura llegue, entonces un repetidor inalámbrico puede ser útil. Puede recibir la señal del router y potenciarla en otro lugar de la vivienda donde lo ubiques. Por el contrario, si necesitas la máxima velocidad, a través de un repetidor inalámbrico lo más normal es que no lo logres. Especialmente, si se trata de un aparato de poca calidad vas a tener problemas. En ese caso, lo ideal es que cambies la ubicación del router o intentes conectarte a través de cables de red.
Si necesitas la máxima velocidad, entonces nuestra recomendación es que compres un sistema Wi-Fi Mesh de alto rendimiento, con triple banda simultánea para tener una banda dedicada a la interconexión, y así obtener la máxima velocidad real. Por supuesto, si conectas los nodos a las tomas de red de la casa, será perfecto para tener la mejor estabilidad, en estos casos no necesitas un modelo triple banda, con un modelo doble banda es suficiente para tener una gran cobertura y velocidad en tu vivienda.
¿Va a ser un repetidor de calidad?
Por supuesto, algo que debes tener en cuenta es si se trata de un repetidor que va a ser de calidad o no. Si no es bueno, no es aconsejable comprar uno ya que no va a mejorar nada. No vas a tener mejor conexión que si te conectas directamente al router y tendrás limitaciones siempre que uses tus dispositivos. Para que sea un repetidor de calidad, debes fijarte bien en las características. Por ejemplo, debes mirar la velocidad máxima que ofrece, si es o no doble banda, si cuenta con Wi-Fi 6, la cantidad de dispositivos que soporta al mismo tiempo, etc. Eso te ayudará a ver si realmente va a ayudarte o no.
Los repetidores WiFi por menos de 50€ no son recomendables, solamente van a repetir la señal pero la velocidad inalámbrica real que conseguirás será realmente baja, así que no os recomendamos comprar este tipo de repetidores. Hay modelos realmente buenos por unos 80€ que son doble banda, y con un firmware muy completo para adaptarlo a vuestras necesidades. Además, hay modelos que son Mesh, lo que significa que tendremos una red inalámbrica mallada y que podremos hacer roaming entre los nodos.
Como ves, tener un repetidor Wi-Fi si ya cuentas con un router de calidad no siempre es la mejor opción. Puede ser negativo y podrías tener problemas para lograr una buena conexión inalámbrica y calidad en la red. Tenlo en cuenta. Siempre puedes configurar un sistema Mesh o utilizar dispositivos PLC.