Tener un repetidor Wi-Fi en casa es algo bastante común. Es una de las opciones para mejorar la red inalámbrica, especialmente cuando estamos en una zona con poca cobertura. Ahora bien, en ocasiones no lo aprovechamos tanto como podríamos. Hay funciones y usos que podemos darle y así potenciar más nuestra red. Te vamos a contar qué puedes hacer con tu repetidor inalámbrico, con algunos usos que tal vez desconocías.
No todos los repetidores Wi-Fi son iguales, actualmente podemos encontrarnos modelos que son banda simple, doble banda simultánea e incluso triple banda simultánea. Si en tu hogar quieres tener la máxima velocidad posible, está claro que los modelos triple banda simultánea son los que debes comprar, para no tener ningún problema de rendimiento y poder conseguir más de 600Mbps reales sin muchos problemas. Otro aspecto importante a valorar, es la capacidad de conectar más aparatos simultáneamente, los modelos triple banda tienen una mayor capacidad, porque disponemos de una banda específica para la interconexión de los nodos. También es muy importante el número de puertos Ethernet, y es que algunos repetidores tienen un solo puerto, y otros modelos tienen hasta tres o cuatro puertos. No obstante, generalmente sí que tienen características similares en lo esencial. Como siempre, te recomendamos elegir productos de calidad, y nunca comprar repetidores de 50€ porque no te proporcionarán un buen rendimiento. Con el nuevo estándar Wi-Fi 8 podremos conseguir velocidades reales de más de 5Gbps en los clientes WiFi.
Aprovecha tu repetidor
Aprovechar el repetidor Wi-Fi puede ayudarte a tener mejor conexión, no solo en lo referente a mejorar la cobertura en un dispositivo puntual. Podrías también llegar a mejora r la seguridad o incluso tener la posibilidad de conectar dispositivos por cable y no solo de forma inalámbrica.
Crear red de invitados
Lo primero que puedes hacer para aprovechar tu repetidor Wi-Fi, es que algunos modelos permiten crear una red de invitados. Igual que puedes hacer con tu router, también lo puedes lograr con este tipo de dispositivos. Básicamente, vas a tener una red con un nombre y contraseñas distintos a la principal. Esto es útil si vas a recibir invitados y quieres que se conecten a Internet, pero no tener que dar la clave principal. Puedes activar esta red solo cuando realmente va a conectarse alguien y evitar así que esté siempre encendida. Es útil por seguridad, pero también por comodidad al no tener que decir la clave compleja.
Cuando tenemos un repetidor Wi-Fi y montamos una red Mesh, podemos habilitar la red WiFi de invitados en la que no tendremos comunicación con la red principal, perfecto para aislar estos dispositivos inalámbricos que conectemos, y no puedan acceder de ninguna forma a los recursos compartidos de la red principal, algo fundamental hoy en día para evitar problemas de seguridad.
Muchos modelos de repetidores, permiten controlar esta red de invitados desde el móvil. Por tanto, vas a tener más facilidad para decidir cuándo habilitarla o no, qué nombre darle o incluso qué contraseña vas a utilizar para que otros puedan conectarse. Lo ideal es que no dejes siempre conectada esa red, sino que la habilites solo cuando vayas a necesitarla.
Conectar aparatos por cable
Otro uso que puedes darle al repetidor Wi-Fi es poder conectar también aparatos por cable. El dispositivo puede recibir señal del router y, más allá de repartir señal de forma inalámbrica, muchos modelos cuentan con puerto Ethernet para que puedas conectar una televisión, ordenador o cualquier cosa compatible. Lo ideal es que sea un puerto Gigabit Ethernet, que uses un cable de, al menos, CAT 5e, y así poder lograr una buena estabilidad y calidad. Es esencial para conseguir que la velocidad sea buena y evitar los molestos cortes que pueden afectarte más cuando te conectas de forma inalámbrica a Internet.
Los modelos de gama más alta, como el repetidor FRITZ!Repeater 6000, disponen de un puerto 2.5G Multigigabit para conseguir el mejor rendimiento posible, de esta forma, podemos conectar aquí un PC con tarjeta de red 2.5G y así no tener ningún tipo de cuello de botella en la red cableada. Este repetidor en concreto, también dispone de un puerto Gigabit Ethernet.
Aunque las redes Wi-Fi hayan mejorado bastante en los últimos años, lo cierto es que la mayor estabilidad la ofrecen los cables Ethernet. Es ahí donde vas a poder lograr una conexión más fiable, para conectar aparatos de todo tipo y no tener problemas que puedan afectar al rendimiento al usar equipos de todo tipo.
Moverte por toda la casa
También puedes aprovecharlo para moverte por diferentes zonas de la vivienda. ¿Qué significa esto? Tal vez trabajes con el ordenador en una habitación, pero quieras usarlo en otra distinta. Al estar más lejos del router, posiblemente ahí la señal no llegue igual y puedas tener problemas. Pero, ¿puede ayudar un repetidor? Lo cierto es que sí y puede permitirte usar el PC en otras zonas. Lo mismo puede pasar con un móvil, colocar la televisión en otras zonas de la vivienda, etc. El abanico de opciones es muy amplio y contar con un buen repetidor puede ayudarte a tener siempre una buena conexión inalámbrica en tu hogar.
Lo ideal es tener el repetidor siempre en el mismo sitio, para no tener cortes de señal al cambiarlo de un lugar a otro, algo fundamental para mantener una cierta estabilidad en nuestro hogar, sobre todo si tienes domótica. Además, no vas a estar limitado únicamente a redes Wi-Fi, ya que muchos modelos cuentan con puerto Ethernet incorporado. Esto significa que, por ejemplo, vas a poder moverte con tu portátil por toda la vivienda, a otras habitaciones donde tengas un repetidor, y conectar ese PC por cable de red.
Poder cambiar aparatos
Es posible que tengas algunos aparatos que puedan generar interferencias con tus dispositivos Wi-Fi. Por ejemplo, puede que tengas altavoces Bluetooth, mandos o cualquier otro, cerca de la televisión. Para evitar esas interferencias, tal vez tuviste que alejarlos un poco, para que no crearan conflictos y todo fuera bien. Si utilizas un repetidor, eso va a hacer que la señal sea más potente. Por tanto, es menos probable que haya interferencias que puedan afectar. Vas a poder mover dispositivos que, para evitar conflictos, pusiste en otras zonas donde no te interesa demasiado que estén ubicados. Existen aplicaciones totalmente gratuitas que nos ayudarán a saber dónde colocar el repetidor WiFi, ya que debemos ponerlo en un sitio intermedio entre el router WiFi principal y allí donde no tengamos buena cobertura inalámbrica.
Podemos nombrar algunos ejemplos claros de aparatos que generan interferencias, más allá del Bluetooth, como son un microondas o un teléfono inalámbrico. Si la señal llega débil a la cocina, cuando enciendas el microondas podrías quedarte sin conexión en aparatos que tengas cerca. Ahora bien, si utilizas un repetidor, podrías lograr que la conexión sea más potente en esa zona y, así, poder conectarte sin tantos problemas. Lo mismo podría ocurrir si tienes un teléfono inalámbrico cerca de la televisión.
Aprovechar la domótica
La domótica ofrece un amplio abanico de opciones en una vivienda. Vas a poder controlar aparatos de forma remota, automatizar tareas e incluso llegar a gastar menos energía. Ahora bien, una de las limitaciones es que son aparatos que no tienen una gran potencia para conectarse a Internet por Wi-Fi. Por ello, en muchos casos no vas a poder aprovechar realmente la domótica y vas a tener problemas para lograr un gran control.
Al usar un repetidor Wi-Fi, vas a tener más facilidad para conectar esos aparatos a la red de forma inalámbrica. Simplemente, vas a poner el aparato cerca del dispositivo inteligente que necesitas conectar y no importará que esté tan lejos del router. Además, normalmente no necesitan alcanzar una gran velocidad para funcionar.
Podemos nombrar muchos ejemplos, como pueden ser bombillas inteligentes, enchufes con Wi-Fi, sensores de temperatura y muchos más. En todos estos casos, podrías utilizar un repetidor para poder aprovechar más tu vivienda inteligente y no tener problemas para que tengan acceso a la red con garantías.
Como ves, puedes utilizar un repetidor Wi-Fi no solo para mejorar la señal inalámbrica. Los puedes usar para conectar aparatos por cable, crear una red de invitados o incluso despreocuparte por posibles interferencias que pueda haber. Sí debes tener muy en cuenta adquirir uno de calidad, que realmente aporte y te ayude a conseguir que la señal, ya sea inalámbrica o por cable, sea la mejor posible. Tener una buena velocidad y estabilidad, va a ser clave.