Si navegas por Wi-Fi con el móvil y notas que la conexión no va bien, tal vez estés cometiendo algún error. Te vamos a mostrar cuáles son los más habituales, para que puedas tomar medidas de prevención. Tal vez tengas una mala velocidad, cortes continuos o incluso veas que no puedes conectarte a la red, ya sea en tu casa o en otro lugar. Es común tener problemas, pero siempre puedes solucionarlos.
Aunque nos centremos en hablar del teléfono móvil, por ser un dispositivo tan utilizado, realmente pueden ocurrirte estos problemas con cualquier otro aparato. Por tanto, también podrías tener en cuenta estos errores en cualquier otra situación en la que notes que la conexión de Internet no va como debería.
Fallos al usar el Wi-Fi en el móvil
Puedes conectarte a Internet con el móvil a través de Wi-Fi o datos móviles. Incluso está la opción de usar cable Ethernet, aunque mucho menos utilizada. Los problemas con el Wi-Fi pueden deberse a la conexión que estás usando, pero también a tu dispositivo. En muchos casos, ocurre por errores que cometes.
Sistema saturado
Un fallo común es tener el sistema muy saturado. Básicamente, significa que tienes tu móvil muy cargado con aplicaciones que, además, están usando Internet. Por ejemplo, podrías tener en segundo plano algún programa descargando archivos, actualizando el sistema o sincronizando archivos en la nube. Todo esto va a hacer que la conexión pueda saturarse y tengas problemas para conectarte a la red. Podrías tener dificultades para lograr la máxima velocidad o incluso llegar a utilizar determinados programas que van a necesitar de una conexión óptima para funcionar sin problemas.
Generalmente las aplicaciones detectan cuando estamos conectados a la red WiFi en lugar de a la red de datos móviles, por este motivo, el móvil aprovecha esta conexión WiFi para realizar todas las copias de seguridad en la nube, sincronización de fotos con Google Fotos o Amazon Photos, y otros muchos servicios por detrás. Por este motivo, al conectarse a la red WiFi después de mucho tiempo, tendrá que hacer muchas tareas simultáneamente, y es posible que la red WiFi se vea ralentizada, y además, también seguramente tu smartphone funcione mucho más lento de manera momentánea.
No elegir bien la banda del Wi-Fi
Este error también es bastante habitual. Normalmente, los teléfonos pueden conectarse a la red tanto en la frecuencia de los 2,4 GHz, como en la de los 5 GHz. Cada una tiene sus ventajas y desventajas, por lo que va a ser clave elegir muy bien cuál utilizar y lograr así la mejor conexión posible, sin que haya cortes o fallos. En líneas generales, podemos decir que la frecuencia de los 2,4 GHz es perfecta cuando te conectas más lejos del router, aunque la velocidad va a ser inferior. En cambio, la de los 5 GHz es la que ofrece mayor velocidad, pero ten en cuenta que la distancia a la que funciona va a estar más limitada. Siempre puedes ver si el móvil es doble banda.
No debemos olvidar tampoco la nueva banda de los 6GHz, gracias al estándar Wi-Fi 6E, vamos a poder conectarnos a esta nueva banda de frecuencias y tener un gran rendimiento inalámbrico. Debemos recordar que esta nueva banda de frecuencias dispone de varios canales de 160MHz de ancho de canal, perfecto para conseguir velocidades de más de 4,8Gbps teóricos, aunque en la realidad tendremos unos 2Gbps de velocidad aproximadamente. Los últimos routers y puntos de acceso Wi-Fi profesionales, disponen de esta nueva tecnología. Debemos recordar que el próximo Wi-Fi 7 que está a la vuelta de la esquina, también usará la banda de 6GHz para que los clientes inalámbricos puedan conectarse.
Te conectas cerca de interferencias
Hay determinados aparatos que pueden generar interferencias. Si te conectas cerca de ellos, no vas a tener un buen Wi-Fi con el móvil. Por ejemplo, podemos nombrar los dispositivos que utilizan Bluetooth, como pueden ser altavoces, mandos, sensores que tengas en tu vivienda, etc. Al usar la frecuencia de los 2,4 GHz, va a haber problemas. Lo mismo puede ocurrir con otros aparatos, como puede ser el microondas o un teléfono inalámbrico, que también utilizan los 2,4 GHz. Lo mejor es que te alejes lo máximo posible de estas interferencias y consigas que la señal inalámbrica llegue lo mejor posible.
Teniendo en cuenta que cada vez se usan más dispositivos de domótica con Bluetooth, es un verdadero problema el uso de la banda de 2.4GHz para la conexión a Internet. Solamente os recomendamos usar esta banda para los dispositivos de domótica, o aquellos que no soporten la banda de 5GHz, con el objetivo de tener la mejor experiencia de usuario posible.
No ubicas bien los puntos de acceso
Es bastante común tener repetidores Wi-Fi en casa. Estos puntos de acceso van a servir para que conectes otros aparatos, como puede ser el móvil, sin necesidad de conectarlos directamente al router. Puede ser útil cuando la señal es débil y no llega a los lugares donde necesitamos tener una mejor conexión. El problema es que, en ocasiones, estos puntos de acceso son de mala calidad. Utilizamos aparatos que no van a mejorar la señal y van a provocar que el Wi-Fi, al utilizar el móvil, sea limitado.
En las viviendas nuevas en España a partir del año 2013, tenemos un PAU (Punto de Acceso al Usuario) desde donde salen cables de red Ethernet hacia todas las estancias de la casa, incluyendo salón, cocina, habitaciones etc. De esta forma, lo ideal es que conectes los puntos de acceso WiFi directamente aquí vía cable, ya sean APs o repetidores WiFi, con la finalidad de obtener el mejor rendimiento inalámbrico posible.
En definitiva, es importante que evites estos errores cuando te conectes al Wi-Fi desde el móvil. El objetivo debe ser mantener una buena conexión en todo momento, que no haya cortes y tener una velocidad adecuada.