Diferencias entre montar una nube privada y un servidor NAS en casa

Diferencias entre montar una nube privada y un servidor NAS en casa

Sergio De Luz

Los servicios en la nube son de utilidad para múltiples propósitos, uno de los más recurrentes es la necesidad de contar con un espacio dedicado para almacenar nuestros archivos más valiosos para no perderlos nunca, especialmente hacemos uso de la nube cuando tenemos archivos pequeños, ya que, de lo contrario, tendremos que desembolsar grandes cantidades de dinero en almacenar los archivos de gran tamaño (películas, juegos, entre otros tipos de archivo). En esta ocasión, hablaremos de dos de las mejores opciones que podemos tener para tener nuestros archivos a salvo en la nube: la nube privada o un servidor NAS. ¿Qué es lo que más me conviene y cuáles son las diferencias entre ellos?

Se puede decir que la opción más práctica es optar por soluciones en la nube pública como Google Drive, Dropbox, e incluso OneDrive si utilizas la suite Office de Windows entre otras tantas opciones. Pero, ¿están realmente protegidos nuestros datos en la nube pública? Ya que los servicios citados son de nube pública, están a disposición de las prácticas de seguridad y privacidad puestas en marcha por el proveedor. Si el mismo no toma las medidas necesarias, pueden darse eventos de filtrado o pérdida de datos. Así también, ante cualquier inconveniente que tengas con uno de los servicios, debes verificarlo únicamente con tal proveedor. No obstante, la seguridad en este tipo de plataformas es muy alta, lo más preocupante es la privacidad de las mismas: ¿leen los archivos que subimos a la nube? ¿tenemos la garantía de que no van a utilizar estos datos nuestros privados con otros fines?

Si tu prioridad es contar con tus archivos almacenados y sincronizados de manera privada, de tal forma que el proveedor no pueda leer absolutamente nada de lo que subes, tienes dos posibles opciones: la primera opción es cifrar todo el contenido antes de subirlo de la nube pública, la segunda opción es utilizar la nube privada para almacenar todos nuestros archivos.

 

La nube privada: ¿qué es y cómo funciona?

Es un espacio administrado por un ordenador o un servidor que tengamos en nuestro hogar. Aquí podemos toparnos con nuestra primera ventaja: los dispositivos responsables del almacenamiento y sincronización de nuestros archivos están bajo nuestro control. Todos los datos son nuestros. Es bueno hacer énfasis en el hecho de que la capacidad de sincronizar los archivos, es lo que hace a la nube privada especialmente útil. Actualmente hay una gran cantidad de opciones para montar nuestra nube privada, y os vamos a explicar algunas de las más recomendables.

En cuanto a los elementos que vamos a necesitar son:

  • Un ordenador con un hardware no demasiado potente
  • Una conexión a Internet.
  • Un sistema de almacenamiento, para el que generalmente utilizaremos discos duros.

En algunas ocasiones, ese ordenador ya lo tenemos y la conexión a Internet es un coste fijo que tenemos que pagar todos los meses. En ese momento te puedes cuestionar convertir tu ordenador en una nube privada. Lo único, que igual necesitas es comprar algún disco duro de mayor capacidad si no te llega el espacio que pretendes almacenar.

Nube privada

Ahora vamos a hablar de las ventajas que supondría hacerlo. Una sería que tendríamos una mayor capacidad de almacenamiento en el que el límite lo establecemos nosotros en función del disco duro que queramos poner. También tenemos más posibilidades y flexibilidad de configuración. Otra cosa a tener en cuenta es que podemos tener mayor seguridad y control de nuestros archivos si lo hacemos bien. Además, a medio-largo plazo podríamos tener menos costes.

En cuanto a los inconvenientes son que el precio inicial será más caro en el caso de que tengamos que comprar todo el hardware. También, una mala configuración puede causar graves problemas de seguridad. Al subir archivos podemos tener cuellos de botella en función del tamaño de los mismos y nuestra conexión. Además, luego está el aumento del recibo de la luz, pero eso dependerá también del tiempo que mantengamos ese ordenador encendido.

 

Convierte un PC en una nube privada

Para convertir nuestro ordenador en una nube privada, lo primero que necesitaremos son unos requisitos mínimos en cuanto a hardware. Además, no es lo mismo tener un ordenador orientado a hacer de nube privada donde se da prioridad a la velocidad de la red local y al almacenamiento, que a un ordenador gaming donde la tarjeta gráfica y el procesador principal es lo más importante.

También debemos tener muy en cuenta el sistema operativo a utilizar, normalmente todos usamos Windows 10, pero existen sistemas operativos orientados específicamente para funcionar como un servidor NAS y montar nuestra nube privada de forma fácil y rápida, ya que incorporan todos los servicios necesarios sin necesidad de nosotros tener que ir instalando uno por uno. Estos sistemas operativos suelen estar basados en Linux o Unix, pero disponen de una interfaz gráfica de usuario realmente intuitiva y muy rápida, ideal para cualquier usuario.

 

Hardware

El hardware para montar una nube privada es muy importante, pero no necesitaremos disponer de un procesador muy potente ni una tarjeta gráfica de última generación. En un entorno doméstico o de pequeña y mediana oficina, basta con disponer de un procesador Intel o AMD que sea de cuatro núcleos o superior, no es necesario más porque no le sacaremos provecho, respecto a la memoria RAM, sí sería recomendable contar con 8GB de RAM como mínimo para asegurar el buen funcionamiento de todos los servicios.

En cuanto al almacenamiento, lo más recomendable es contar con 2 o más discos duros de gran capacidad, unos 3TB como mínimo, para posteriormente configurarlo como RAID1 o como ZFS Mirror y tener toda la información duplicada en ambos. De esta forma, si uno de los dos fallase, toda la información estaría en el otro disco duro y podríamos recuperarla y acceder a ella.

Por último, la tarjeta de red a utilizar también es muy importante, normalmente todos los ordenadores disponen de una tarjeta de red Gigabit Ethernet, pero hoy en día ya se están montando redes 2.5G Multigigabit, por lo que sería ideal contar con este tipo de tarjetas que nos proporcionarán un gran rendimiento cableado y serán capaces de exprimir al máximo la velocidad de lectura y escritura de los discos duros.

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En resumen, el hardware que deberíamos tener para montar una nube privada sería la siguiente:

  • Procesador Intel o AMD de 4 núcleos o más.
  • 8GB de memoria RAM o más.
  • Discos duros de 3TB de capacidad o más, se recomienda tener 2 o más discos para montar diferentes RAID
  • Tarjeta de red 2.5G Multigigabit, para transferir datos a la máxima velocidad.

El resto del hardware (fuente de alimentación, placa base y GPU) lo dejamos a tu elección, deben ser componentes que estén acorde con el resto del hardware utilizado.

 

Sistemas operativos listos para tener nube privada

Actualmente existen una serie de sistemas operativos que ya vienen con mucho software instalado de forma predeterminada, y con una interfaz gráfica de usuario vía web podremos administrarlo de forma muy fácil y rápida.

 

XigmaNAS

Este sistema operativo orientado a NAS es uno de nuestros favoritos, podremos instalar este sistema operativo en cualquier medio de almacenamiento, incluso podríamos instalarlo en un pendrive y que arranque siempre desde aquí. Este sistema operativo ocupa muy pocos recursos tanto de almacenamiento como a nivel de hardware (CPU y RAM), por lo que es ideal para ordenadores poco potentes.

Se trata de una distribución NAS de almacenamiento de código abierto basada en FreeBSD. El sistema operativo XigmaNAS se puede instalar en prácticamente cualquier plataforma de hardware para compartir el almacenamiento de datos informáticos a través de una red informática. XigmaNAS es una forma sencilla y rápida de crear un servidor centralizado y de fácil acceso para todo tipo de datos con todo tipo de protocolos de red y desde cualquier red.

Además, admite compartir entre sistemas Windows, Apple y UNIX. También incluye software RAID (0,1,5), cifrado de disco e informes SMART. En este caso admite los siguientes protocolos: CIFS / SMB (Samba), Active Directory Domain Controller (Samba), FTP, NFS, TFTP, AFP y RSYNC, SSH con SFTP y muchas más opciones avanzadas para montar una verdadera nube privada. Si queréis más información podéis visitar su web oficial.

 

TrueNAS Core

Este sistema operativo es el sucesor del popular FreeNAS, también está basado en FreeBSD y dispone del sistema de archivos ZFS, uno de los más avanzados que existen y que también incorpora XigmaNAS. Este sistema operativo dispone de una interfaz gráfica de usuario mucho mejor que el anterior XigmaNAS, pero consume más recursos de CPU y RAM.

Una de las características que más nos gusta de este sistema operativo, es que incorpora una grandísima cantidad de servicios como servidores Samba, AD, FTP, NFS, TFTP, AFP, Rsync, SSH, OpenVPN Server y también cliente OpenVPN, e incluso podremos instalar software adicional como Plex Media Server de forma fácil y rápida a través del repositorio de software adicional. De esta forma, instalar programas adicionales como Plex o Nextcloud es realmente sencillo.

 

OpenMediaVault

Podemos considerar a openmediavault como una solución de almacenamiento en red (NAS) de próxima generación que está basada en Debian Linux. También hay que señalar que ofrece servicios como SSH, (S) FTP, SMB / CIFS, servidor de medios DAAP, RSync, cliente BitTorrent y más. Además, ha sido diseñado para ser utilizado en oficinas pequeñas y en el hogar, aunque se podría utilizar en otros lugares. Nos encontramos con una solución simple y fácil de usar que no requiere muchos cocimientos para instalar y administrar nuestro almacenamiento.

En cuanto a otras características que posee openmediavault tenemos soporte IPv6, notificaciones de correo electrónico, compartición de archivos y actualizaciones sencillas del sistema mediante la gestión de paquetes Debian. Si queréis más información podéis obtenerla haciendo clic en este enlace.

 

Software para montar tu nube privada

Actualmente existen diferentes tipos de software para montar nuestra propia nube privada, independientemente del hardware que usemos. Gracias a estos softwares tan completos, podremos tener nuestro propio Dropbox en local de manera muy fácil y rápida.

 

Nextcloud

En RedesZone ya hemos destacado a soluciones como Nextcloud, la mejor opción para montar nuestra nube privada con sincronización de archivos y carpetas, poder compartir archivos de manera segura vía HTTPS y un sin límite de opción de administración. Nextcloud tiene actualmente el NextCloud Box que es un dispositivo hardware con una Raspberry Pi y el software de Nextcloud precargado. Nextcloud utiliza la arquitectura cliente-servidor, actualmente podremos instalar el servidor (donde se encuentra el núcleo de Nextcloud, con su sincronización de archivos y carpetas etc) en los siguientes sistemas operativos:

  • Sistemas operativos Linux.
  • Cualquier sistema operativo con Docker.
  • Snap.
  • Nextcloud VM: podremos cargar el servidor de Nextcloud en una máquina virtual.

Otra opción que tenemos, es comprar directamente el Nextcloud Box, este dispositivo hardware está formado por una Raspberry Pi con el sistema operativo Ubuntu preinstalado, y con el software de Nextcloud pre-cargado. Una vez montado todo esto en la caja, lo conectas a la corriente y en minutos, tendrás tu propia nube privada. No obstante, el rendimiento no es demasiado elevado, ya que tenemos un cuello de botella por la potencia de la Raspberry Pi.

En cuanto a los clientes de Nextcloud (equipos que se conectan al servidor para sincronizar los archivos), tiene compatibilidad total con sistemas operativos Windows, Linux, macOS, y también tenemos disponibles aplicaciones para Android y iOS.

Os recomendamos visitar la web oficial de Nextcloud donde encontraréis todos los detalles sobre esta solución para tener una verdadera nube privada en nuestro hogar.

 

OwnCloud

Es una de las soluciones más citadas cuando hablamos de montar tu propia nube privada en casa. De hecho, esta sería la versión original de Nextcloud. Es decir, Nextcloud se ha inspirado en esta solución para hacerse realidad. Y esto es así a razón de que la edición estándar de OwnCloud es de código abierto y se encuentra bajo la licencia AGPLv3 que implica que puedes personalizar esta solución, pero debes compartirla con la comunidad.

Haciendo énfasis en la versión estándar, podemos decir que cuenta con múltiples prestaciones que la hace una de las más versátiles del mercado. Citemos algunas:

  • Versión móvil tanto para Android/iOS a coste muy accesible (un poco menos d 1€)
  • Interfaz web muy fácil de entender (accede a la demo)
  • Aplicaciones de escritorio para todas las plataformas: Windows, macOS y distribuciones Linux
  • Soporte para archivos incluso mayores a 4 GB
  • Los videos que subas a tu nube privada soportan streaming
  • Cifrado de extremo a extremo
  • Autenticación Multi-Factor
  • Implementación de políticas de creación de contraseñas
  • CLI para manejo a través de la línea de comandos

Para que puedas probar esta solución, cuentas con 30 días para probarla en su totalidad, pero en la versión empresarial. A nivel de interfaz y usabilidad, es prácticamente lo mismo. Las diferencias entre las versiones estándar y la empresarial son algunas prestaciones que son propias de cada versión, sobre todo si hablamos de la empresarial que cuenta con integración a soluciones corporativas ya implementadas como SharePoint y edición colaborativa de documentos Microsoft Office. Destacamos el alto nivel de documentación y soporte, aspecto que es fundamental a la hora de que nos animemos a montar nuestra propia nube privada en casa.

De todas formas, nuestra recomendación sería usar Nextcloud en lugar de OwnCloud, ya que tiene exactamente las mismas opciones e incluso muchas más, y es completamente gratis.

 

Syncthing

Es una solución que está orientada a la sincronización de archivos. Es posible llevar esto a cabo entre múltiples dispositivos en tiempo real y uno de los focos por el cual se promociona es la seguridad y la privacidad de los datos. Reitera en varias ocasiones el hecho de que nosotros somos dueños de nuestros datos y, por ende, debemos decidir quién tiene acceso a los mismos.

Aquí siempre estamos entusiasmados por las soluciones de código abierto y que se encuentran en constante desarrollo y puesta a punto de mejoras. Syncthing es de código abierto y todos los cambios que se realicen están a disposición de cualquiera que quiera verlo, probarlo, auditarlo…lo que sea.

¿Cómo puedo probar esta solución? Accede a la web oficial donde encontrarás todas las versiones y podrás encontrar la que corresponde a tu sistema operativo. Después de la instalación, incluso es posible administrarla con el navegador de tu preferencia puedes hacerlo. Esta solución es compatible con estas plataformas: Windows, macOS, Linux, FreeBSD, Solaris y OpenBSD. La sincronización de los archivos se da de una forma más simplificada. Cada dispositivo que se encuentra ligado a Syncthing tiene un ID el cual es un identificador único. Entonces, si deseas compartir algún archivo o carpeta, simplemente debes compartir tu ID con las personas que quieras.

No hay que dejar de mencionar que todos tus archivos se quedan contigo, no se almacenan en servidores o centros de datos del proveedor de esta solución. La comunicación que permite la sincronización entre dispositivos se lleva a cabo mediante el protocolo TLS, el cual previene que intrusos se entrometan en dicha comunicación y tengan acceso a tus datos. Y lo más importante, cada usuario que tenga acceso a tus archivos se autentica de forma segura, esto garantiza que únicamente los usuarios autorizados accedan a tus datos.

Esta herramienta está integrada en el sistema operativo XigmaNAS, uno de los sistemas operativos orientados a servidores NAS más utilizados, el cual está basado en FreeBSD y dispone de ZFS para el sistema de archivos.

 

Servidores FTP para Windows

Cuando vamos a crear una nube privada los responsables de la seguridad somos nosotros. Ese sistema operativo que vamos a utilizar debe estar conveniente actualizado. Por ese motivo, y el de nuestra propia seguridad, en RedesZone no recomendamos utilizar sistemas sin soporte como Windows XP o Windows 7. Si vas a utilizar un sistema operativo con Windows 10 o similar, la mejor opción por la que podemos optar es crear un servidor FTP en el que tengamos almacenados nuestros archivos. Luego utilizaremos un cliente FTP que es un programa con el que podremos conectarnos desde nuestro PC al servidor para enviar y descargar archivos de forma segura.

Algunos ejemplos de servidores FTP gratuitos que podemos utilizar son:

  • FileZilla Server seguramente ahora mismo sea el más popular. Es compatible con Windows 8.1 y 10 en versiones de 32 y 64 bits. Además, soporta tanto el protocolo FTP como también el protocolo FTPS/FTPES para proporcionar confidencialidad punto a punto y también utiliza el protocolo TLS para asegurar las conexiones entre los clientes y el servidor. En la web oficial de FileZilla Server podéis obtener más información.
  • FreeFTPd incorpora una interfaz muy sencilla y visual que es compatible con el protocolo FTP, FTPS, FTPES y SFTP, el cual está basado en el protocolo SSH. En el sitio web de FreeFTPd podéis obtener más información.
  • Wing FTP Server se trata de un programa multiplataforma con versiones para Windows, Linux y macOS. Además, soporta los protocolos FTP, FTPS/FTPES, SFTP e incluso HTTP/HTTPS. Si queréis más información podéis visitar la web oficial de Wftpserver.
  • Core FTP Server puede usar FTP/FTPS/FTPES y además tiene soporte para SFTP y HTTPS para la transferencia de ficheros. para obtener más información aquí tenéis la web oficial de Core FTP Server.

También debemos tener en cuenta otros servicios para el sistema operativo Windows 10, como la compartición de los datos vía Samba a través de la red local doméstica, o la incorporación de un servidor SFTP para hacer uso del protocolo SSH y enviar y recibir todos los archivos cifrados y autenticados.

 

Servidores NAS

Para poder compararlos con las nubes privadas, primero tenemos que saber qué es realmente un NAS y su principal diferencia con una de estás nubes, que ya hemos visto cómo funcionan.

 

¿Qué son y en qué se diferencian?

Se puede pensar que un servidor NAS es prácticamente lo mismo que alguna de estas soluciones de nube privada que citamos. Principalmente porque podemos almacenar archivos. Sin embargo, la principal diferencia radica en que casi nunca es posible sincronizar archivos y carpetas con otros dispositivos. No obstante, los fabricantes de servidores NAS como QNAP, Synology o ASUSTOR, incorporan software y la posibilidad de que sí tengamos sincronización de archivos y carpetas.

¿Qué puedo hacer con un servidor NAS? Ten presente que es un sistema de almacenamiento de archivos en red y, por tanto, puedes montar otros servicios como SSH, VPN, montar un Plex Media Server, y cualquier otro servicio que pueda distribuirse a través de la red local e Internet. La diferencia entre un servidor NAS y la nube privada que os hemos explicado anteriormente, es que el NAS lo tiene todo, y la nube privada no deja de ser un software que se puede instalar también en un servidor NAS (no solamente en un servidor de Internet). Por tanto, si hablamos de servidor NAS englobaría a todo, y si hablamos de nube privada, únicamente hablamos de sincronización de archivos y carpetas.

Otra de las diferencias que podemos encontrar en relación a la nube privada es que necesita de un dispositivo dedicado, justamente un servidor NAS. Es decir, se necesita de hardware dedicado para que el servidor pueda ser montado en nuestro hogar, a diferencia de la nube privada que es algo más flexible en relación a qué tipo de dispositivos pueden actuar como servidor. Si tienes un ordenador libre, pues, este ya podría funcionar como nube privada.

Aun así, se puede decir que un servidor NAS es mucho más completo, a pesar de que en algunos casos no cuente con sincronización de archivos y carpetas por defecto, los principales fabricantes como QNAP, Synology o ASUSTOR, cuentan con aplicaciones en su «marketplace» para instalarlo de forma fácil y rápida, y también cuentan con aplicaciones cliente para Windows, Mac, Android y iOS. Una vez instalado, ya será posible la sincronización de archivos y tendrás control de todos ellos incluso desde el móvil.

 

NAS recomendados

En RedesZone, una de las marcas que más recomendamos y que más famosa es, es QNAP, ya que tienen un hardware muy potente a un precio realmente competitivo, por lo que en calidad y precio sería de las mejores marcas.

Podemos encontrar servidores NAS que tienen especificaciones técnicas similares a otras marcas, pero más barato. Los servidores NAS de QNAP tienen su propio sistema operativo QTS, el cual permite una sencilla y eficaz administración. A través de ella, podemos realizar todas nuestras gestiones y permitir que nuestro servidor sea de lo más completo, hasta podemos utilizar apps para visualizar nuestras fotos y vídeos, además de escuchar música. Si estás especialmente preocupado por amenazas como el ransomware que dejan prácticamente inservibles a los archivos afectados, es posible configurar Snapshots para elevar su nivel de protección. ¿Puedo sincronizar archivos? Sí, mediante la herramienta de QSync selecciona las carpetas de archivos a ser sincronizadas y listo.

NAS Synology

En servidores NAS de gama media-alta con más de 4GB de RAM, es posible instalar un sistema operativo Linux virtualizado, esto es ideal por si quieres instalar Nextcloud o hacer pruebas de diferentes softwares de nube privada. También podrías hacer uso de virtualización con Docker, para que sea más eficiente y solamente tengas que instalar lo necesario. Por ejemplo, uno de los mejores servidores NAS que existen actualmente es el QNAP TS-1277 el cual hemos tenido la oportunidad de analizar en RedesZone.

Otras marcas muy conocidas en el mundo de los servidores NAS son Synology y ASUSTOR, ambos montan un sistema operativo específicamente diseñado para exprimir al máximo su hardware, y también disponen de una gran cantidad de software que se puede instalar fácilmente. Estos servidores NAS están orientados tanto a usuarios domésticos, ya que su interfaz web de configuración es muy intuitiva, como también a usuarios profesionales que necesitan un sistema de almacenamiento en red con múltiples opciones de configuración.

Por tanto, si estás pensando en adquirir tu primer NAS, no tienes muchas nociones sobre el tema, y quieres algo básico pero que puedas entender y configurar de manera sencilla, un Synology es una opción ideal. Mi primer NAS fue un Synology DS188, y la verdad es que lo recomiendo, es de las opciones más económicas, y aun así, te sorprenderá su potencia y velocidad. No tendrás que gastarte 3.000 euros en él como el anterior que hemos mencionado. Los tendrás mucho más barato en Amazon, al menos para empezar.

Solamente tendrás que adquirir un disco adicional, de la capacidad que desees, y listo, ya podrás arrancarlo. Es tan intuitivo que podrás hasta crear tu propio Netflix con su app DS Video, la cual tienes disponible en Fire TV, SmartTV, ordenadores y móviles (Android e iOS), sin necesidad de ningún conocimiento, solo añadiendo tus películas y videos favoritos a una carpeta.

 

Funciones y ventajas de un NAS

Algunas de las funciones de las que más nos podemos beneficiar son:

  • Ahorro de dinero: Pese a que el servidor NAS y los discos de almacenamiento tenemos que adquirirlos, estos pueden durar hasta 20 años funcionando como el primer día, por lo que, calcula el coste de una nube como iCloud o Google Drive con varios TBs de datos, y ahora piensa lo que ahorrarás a la larga. El gasto de electricidad de un NAS 24 horas puede suponer unos 30-50 céntimos mensuales.
  • Copias de seguridad instantáneas: Esta es una de las principales ventajas de un NAS, los cuales puede soportar diferentes tipos de RAID a varios niveles, y donde podemos configurar la replicación o recuperación en caso de pérdida de datos.
  • Compatibilidades: Actualmente estos dispositivos son compatibles con HDD y SSD. Esto nos da capacidad de mejora, pues si pasamos de un disco duro convencional a uno en estado sólido, ganaremos mucho en velocidad de lectura y escritura, y más si optamos por discos duros M.2.
  • Compartir ficheros: Otro de los aspectos a tener en cuenta, es el disponer de un almacén de datos el cual podemos compartir en la red. Incluso podremos crear accesos remotos al mismo, siempre que abramos los puertos correspondientes. De este modo, se comportará como si se tratara de servicios como Google Drive.
  • Servidor Multimedia: Los NAS tienen mucho terreno ganado en este aspecto. Pues reproducir contenidos y gestionarlos en un servicio local, es más sencillo y rápido que en internet. Además, puedes compartirlos con cualquier persona de manera online, es decir, crear tu propio Netflix personal.
  • Servidor de vigilancia: Con un servidor NAS, podremos crear entornos de vigilancia dotados de cámaras IP, donde se almacenen los videos de seguridad, que según la capacidad del disco, pueden ser de hasta años.
  • Virtualización: Si contamos con un modelo de varios núcleos y mayor potencia, podremos virtualizar sistemas operativos de todo tipo.
 

¿Qué me conviene más? ¿Nube privada o servidor NAS?

Hemos visto que la nube privada se caracteriza por tener un software en un hardware que puede ser muy variado, incorpora sincronización de archivos y carpetas en múltiples dispositivos, e incluso podremos sincronizar calendarios, contactos, realizar tareas ofimáticas «online» como ocurre con Google Docs o Office 365, y muchas más opciones de configuración.

También hemos visto que los servidores NAS son realmente versátiles, permiten que tengamos un sistema de almacenamiento en red, al cual se le pueden añadir múltiples servicios más, incluyendo la sincronización de archivos, ya sea con el software del propio fabricante del servidor NAS, o directamente haciendo uso de Nextcloud o Owncloud en el NAS, utilizando virtualización completa o con Docker. Dependiendo de la marca y modelo que elijas, el optar por un servidor NAS implicará una inversión algo mayor de dinero, en este caso, no sólo pagas por las prestaciones propias del almacenamiento en red, sino también, por el hardware. De todas formas, recuerda que no es precisamente la mejor idea el tener que comprar el servidor NAS más costoso y con más prestaciones, al fin y al cabo, quien sabe si de verdad solamente necesitas de uno que sea de gama de entrada, por ejemplo. Tus necesidades y requerimientos son los filtros más importantes.

 

Ventajas de utilizar una nube privada

Disponer de una red de servidores y diferentes dispositivos de almacenamiento que se encuentran conectados en red local, y que se utilizan para alojar y realizar la gestión de todo ese contenido, puede tener grandes beneficios. Algunos de estos son:

  • Control total: Cuando alojamos todos nuestros datos y aplicaciones en una nube privada en nuestras casas, tendremos un mayor control sobre todo el contenido que se encuentra almacenado. Para ello no será necesario confiar en un servicio de terceros para el almacenamiento y para poder realizar una gestión. Sino que nos da todo el poder sobre la seguridad y la privacidad de todos estos datos.
  • Personalización: Las nubes privadas en casa, nos permiten personalizar mucho más las configuraciones de red y servidores. Lo cual nos permite adaptar la red mucho más a nuestras necesidades más concretas. Lo cual nos da la posibilidad de elegir nosotros mismos el hardware, así como el software que vamos a utilizar.
  • Reducción de costes: Las nubes privadas pueden ser opciones muy rentables, sobre todo comparado con los servicios de terceros. Los cuales suelen establecer sistemas de suscripción mensual o anual. Por otro lado, los costes de mantenimiento pueden ser menores que listas mismas suscripciones de buen. Permitiendo así, un ahorro de dinero a largo plazo.
  • Seguridad: Cuando alojamos los datos y todas las aplicaciones en nubes privadas, se puede mejorar de forma significativa la seguridad de la red. Principalmente por tener un control mayor sobre los accesos que se realizan al contenido. Pero también nos deja establecer medidas de seguridad personalizadas, así como un cifrado de datos más fuerte.
  • Flexibilidad: Las nubes públicas de terceros, no nos van a ofrecer tanta flexibilidad. Esto es porque con una privada, tenemos todo el control sobre las personalización y configuración de esta nube. Permitiendo así, cubrir otro tipo de necesidades que con las de terceros, no vamos a poder.
  • Rendimiento: Una nube privada ofrece un rendimiento mayor, definitivamente. Esto se debe principalmente a que la red se encuentra de forma local, reduciendo la latencia y la congestión de la red. Esto nor permite, por ejemplo, manipular los archivos con otros programas, incluso estando en la nube privada.
 

Uso de las dos opciones

Como hemos visto, estos dos sistemas cuentan con sus ventajas y desventajas, las cuales hacen que nos decantemos por uno o por otro, dependiendo de lo que necesitemos o se demande.

Nube privada

Pero no tenemos motivo por el cual olvidarnos de una opción si escogemos la otra. Estas se pueden mezclar de forma que creamos una nube híbrida, donde tendremos todas las ventajas de las dos opciones. Para conseguir esto, tendremos que implantar un NAS en nuestra red, y que este sea el encargado de controlar nuestro propio sistema de nube privada. Además se le puede configurar para que realice copias de seguridad en otros sistemas de almacenamiento, como puede ser una nube en Internet, o en otro servicio donde podamos directamente contratar cierto espacio de almacenamiento.

Si tienes un ordenador o un hardware que ya no lo utilizas, puedes reconvertirlo en montarte tu propia nube privada, ya sea con sistemas operativos Linux o utilizando máquinas virtuales. Además, si tienes un ordenador viejo, siempre puedes instalar FreeNAS, XigmaNAS, OpenMediaVault e incluso XPenology, sistemas operativos que te permitirán convertir tu PC en un verdadero servidor NAS, y dentro montarte tu nube privada.

 

Qué es una nube privada virtual

Podemos decir que la nube privada virtual viene para mejorar la seguridad de la nube pública. Son todos los recursos que hay alojados en Internet y accesibles desde la nube, pero aislado de todos los usuarios que puedan acceder de forma abierta. Esto hace que se eliminen las dudas que podemos tener sobre la seguridad de la nube pública. Lo que hace este tipo de servicios es proteger la nube pública, la que contrata una empresa por ejemplo, con una VPN. De esta forma va a permitir que todo lo que enviamos y recibimos vaya de forma cifrada, desde nuestro equipo hasta la nube pública de una empresa donde trabajemos, por ejemplo.

El objetivo es crear un entorno de trabajo seguro, donde toda la información esté protegida y cifrada. Se puede decir que es una nube privada, pero dentro de una pública. Es decir, dentro de un almacenamiento donde otros usuarios van a poder compartir sus datos, vamos a tener nuestro propio espacio privado al que no van a poder acceder otros. Los usuarios que opten por este tipo de servicios pueden configurarlo para tener allí diferentes aplicaciones web, páginas, etc. Todo esto dentro de un ecosistema que pertenece a la nube pública, administrada por un tercero, pero donde otros no pueden acceder y, por tanto, mantener en todo momento la seguridad y privacidad.

Podemos nombrar algunos ejemplos de servicios que ofrecen la nube privada virtual. Algunos son Amazon Web Services (AWS), Azure de Microsoft o HP. No obstante, existen muchas opciones en la red y es cuestión de encontrar cuál se adapta mejor a lo que buscamos, qué características tienen, etc.

 

Ventajas que ofrece

La nube privada virtual ofrece una serie de ventajas, como vamos a ver. Permiten que los usuarios y empresas puedan alojar contenido en la red y usar aplicaciones en la nube de una forma segura. Es una alternativa a otras opciones, por lo que muchos lo tienen en cuenta para migrar su infraestructura y tenerla siempre disponible en la red.

 

Seguridad

La primera ventaja es la seguridad. Es la principal y la causa por la que muchos usuarios y empresa optan por la nube privada virtual. Permite proteger la dirección IP, puertas de enlace y, en definitiva, cifra todos los datos que enviamos o recibimos. Actúa básicamente como una VPN cuando navegamos por la red.

Va a permitir también controlar mejor los datos. Se trata de un servicio que va a aislar los datos con otras nubes en la capa de red. Vamos a controlar toda esa información y evitar que pueda acceder un intruso o que esos datos puedan terminar en una carpeta controlada por otra persona.

Seguridad de la nube privada virtual

 

Coste

A diferencia de las nubes privadas corporativas, la nube privada virtual es bastante más económica. Permite también contar con un espacio seguro y protegido para almacenar, a diferencia de la nube pública, pero en este caso no necesitamos hacer un desembolso económico grande.

Es muy útil por ejemplo para pequeñas empresas. De esta forma pueden crear un entorno donde poder subir contenido y trabajar de forma remota con garantías. Algunos servicios incluso se pueden utilizar de forma gratuita y únicamente cobran por determinadas mejoras y características.

 

Simplicidad

Otra ventaja de la nube privada virtual es la simplicidad. A diferencia de otras opciones, como la nube privada corporativa, no va a haber que llevar a cabo complejas configuraciones para poder usar este tipo de servicios. Hay muchas plataformas que nos permiten almacenar archivos o tener acceso a aplicaciones web fácilmente.

Una vez contratado el servicio, el proceso para usarlo es sencillo e intuitivo. Por ello, la simplicidad es otra de las claves que podemos mencionar. Vamos a poder personalizarla según lo que necesitemos, separar usuarios, realizar cambios… Pero todo esto sin agregar un extra de dificultad.

Qué frena el uso de la nube

 

Rendimiento

El rendimiento también mejora respecto a otras opciones en la nube. Vamos a poder gestionar mejor cómo priorizar el tráfico de red. De esta forma podremos mejorar el funcionamiento de ciertas aplicaciones que tengamos configuradas en la nube y eliminar posibles problemas que deriven en cortes o lentitud al usar el servicio.

Además, el hecho en sí de poder trabajar en la nube, de poder acceder a recursos y archivos online, va a hacer que el rendimiento de una empresa aumente. Es algo que cada vez utilizamos más en nuestro día a día y una de las causas es lograr un mayor rendimiento a la hora de trabajar.

 

Escalable

Algo muy valorado por los usuarios al utilizar este tipo de nube es que es escalable. Tiene bastante flexibilidad y va a permitir contratar y configurar en función de lo que necesitemos. Puede que en un momento dado necesitemos unas características determinadas, pero en un futuro haya que ampliar la capacidad. Esto es muy útil para adaptarse al crecimiento de una empresa sin tener que hacer grandes inversiones. A fin de cuentas es como un servidor privado virtual, que también podemos ampliar la capacidad y los recursos disponibles conforme vemos que necesitamos más.

En definitiva, podemos decir que la nube privada virtual es el uso de un servidor cuando utiliza la computación en la nube y la virtualización para crear un entorno de trabajo privado y seguro para una empresa. Se diferencia de la nube pública en que no está disponible para que cualquiera pueda acceder, sino que es una sección independiente que vamos a controlar.

Es una solución bastante flexible, ya que se adapta a lo que realmente requiera una empresa. Puede ser usado por grandes organizaciones, pero también pequeñas que simplemente quieran un lugar para que sus empleados puedan trabajar y almacenar información de forma segura y siempre manteniendo el control.

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