Utilizar correctamente los electrodomésticos en invierno es importante para ahorrar energía y no pagar de más en la factura. Especialmente hay que tener esto en cuenta cuando se trata de aparatos que sirven para calentar una vivienda. Es el caso de las estufas. Por ello en este artículo vamos a explicar qué debes tener en cuenta para ahorrar luz al utilizar estufas en tu vivienda y poder así pagar menos mes a mes.
Cómo gastar menos luz al usar estufas
Las estufas pueden llegar a consumir una parte importante de la factura eléctrica. Esto puede ocurrir principalmente si las usamos mal, no las colocamos correctamente o el aparato que utilizamos no es para nada eficiente. Por tanto, tener en cuenta algunas recomendaciones puede venir muy bien.
Utiliza el nivel adecuado
Normalmente las estufas tienen diferentes niveles que podemos poner. Mientras mayor sea el nivel elegido, más va a calentar pero también va a consumir más electricidad. Si pones el nivel máximo, estará utilizando el máximo de la potencia que pueda usar. Por tanto, estarías consumiendo más electricidad que si utilizas un nivel inferior.
Elige bien qué nivel vas a usar. Posiblemente no necesites poner la estufa al máximo para calentar una habitación o mantener la temperatura. Esto hará que puedas ahorrar bastante en el consumo de electricidad. Mientras menor sea el nivel, más ahorro podrás alcanzar.
Programa el apagado o encendido
Algunas estufas cuentan con un temporizador. Esto permite programarlas para que se apaguen cuando pase un tiempo. Es útil de cara a evitar estar consumiendo electricidad toda la noche, por ejemplo. Pero también programar el encendido puede ser interesante para calentar una estancia a una hora determinada.
¿Cómo podemos programar una estufa que no tiene esta función integrada? Ahí entran en juego los enchufes inteligentes. Son útiles para programar el encendido o apagado de aparatos de este tipo. Incluso desde el móvil, sin estar en casa, puedes dar la orden de que apague o encienda una estufa.
Puedes ver algunos enchufes inteligentes:
No pongas nada delante
Este error es habitual y lo cierto es que va a hacer que desperdicies calor. Eso te obligará a tener que usar un nivel superior para poder calentar una habitación. Esto ocurre por ejemplo si pones ropa mojada cerca de la estufa para que se seque. También si pones la estufa cerca de un mueble, una pared o cualquier cosa que no permita circular el aire bien.
Por tanto, lo ideal para no desperdiciar energía es poner la estufa en un lugar libre de obstáculos, desde donde pueda calentar sin estar desperdiciando recursos.
Intenta mejorar el aislamiento
Aunque no sea algo que afecte directamente a la propia estufa, sí que puede permitir que ahorres energía. Por ejemplo, tal vez quieras mantener la temperatura de una habitación a 20 grados. Para alcanzar esa temperatura, vas a necesitar mantener más o menos tiempo la estufa encendida en función también del aislamiento. Si vas a usar la domótica para controlar la temperatura, evita intrusos en el Wi-Fi.
Si las ventanas tienen un buen aislamiento término, eso significa que no va a escaparse tan fácilmente el calor. Si conectas la estufa unas horas, mantendrá la temperatura por más tiempo sin necesidad de volver a encenderla. Por tanto, así también ahorrarás en la factura de la luz.
En definitiva, como ves puedes tener en cuenta algunos consejos para lograr ahorrar en la factura de la luz cuando utilices las estufas. Esto te ayudará a ahorrar dinero y conseguir al mismo tiempo mantener una buena temperatura en tu hogar.