Calentar una vivienda puede suponer una parte muy importante de las facturas en invierno. Pero eso también podría ocurrir simplemente al calentar una habitación. Por ello debemos evitar cometer errores. En ocasiones queremos que aumente la temperatura en una zona específica del hogar y consumimos más de lo necesario. En este artículo vamos a hablarte de qué debes tener en cuenta para calentar una habitación sin derrochar.
La calefacción, gran gasto para calentar una habitación
Puede que pases gran parte del día en una habitación o en el salón. Por ejemplo si trabajas en casa, estás estudiando, etc. Tal vez tengas calefacción en la vivienda, con diferentes radiadores repartidos por la casa, y sea la opción que usas. Sin embargo eso puede llegar a consumir en exceso y realmente no lo vas a necesitar.
Lo que buscas es simplemente calentar una estancia de la casa. No es necesario que enciendas toda la calefacción. Pero incluso si apagas todos los radiadores menos algunos, igualmente es un aparato que consume bastante energía. No es lo más eficiente para calentar una o dos habitaciones del hogar.
Por tanto, nuestro consejo es que uses solo la calefacción cuando realmente quieres calentar toda la vivienda. Por ejemplo para una familia entera y poder calentar varias habitaciones. En esos casos sí puede ser la mejor opción, aunque igualmente sea un gasto económico importante cada mes.
Aparatos para calentar una habitación barato
Un ejemplo de errores al calentar una habitación es utilizar un calefactor. Por ejemplo un modelo de 2500 W, que son bastante comunes. Lo vemos como un aparato pequeño, útil para calentar algo de forma rápida. Sin embargo es un dispositivo que consume mucha electricidad. Podemos decir que viene bien para un momento puntual, como puede ser calentar rápidamente el baño cuando vayamos a ducharnos, pero no para usarlo de forma general para calentar una habitación durante todo el día.
Algo similar ocurre con un brasero. Son muy comunes también, pero pueden llegar a consumir bastante especialmente si lo pones al máximo de su capacidad y es un modelo algo antiguo. Ahora bien, hay modelos más eficientes y que tienen varias posiciones desde los 400 W. En ese caso sí puede ser una buena idea para una habitación pequeña.
En cambio, sí puedes usar otros aparatos que van a consumir bastante menos. Una buena idea es incluso utilizar el aire acondicionado. Si tienes un modelo moderno, eficiente, puedes usar la bomba de calor para ponerlo a 19-20 grados y verás que el consumo es muy inferior a un calefactor o a utilizar la calefacción para toda la vivienda. Además, al alcanzar la temperatura objetivo el consumo es aún más bajo.
Pero también puedes utilizar un radiador, por ejemplo. Hay modelos muy eficientes de unos 800 W. Si utilizas un modelo pequeño es más que suficiente para una habitación. No necesitas nada más grande, ni de más potencia. En esos casos sí consumirían bastante más y realmente no lo necesitas.
Las estufas pequeñas pueden llegar a tener una potencia de 600 W, por lo que también podrían ser una alternativa y sirven perfectamente para una habitación.
En definitiva, como ves es importante que no te equivoques al intentar calentar una habitación. No utilices aparatos con más potencia de la que necesitas para un lugar concreto, ni tampoco una calefacción central y no aprovecharla realmente. Céntrate en dispositivos que tengan bajo consumo. Siempre vas a poder controlarlos también a través de enchufes inteligentes siempre que tengas buena conexión y no se desconecte el Wi-Fi continuamente.