Para poder ahorrar en la factura de la luz cada mes podemos tener en cuenta ciertos consejos que pueden ser útiles. Es muy común leer sobre sensores de movimiento o de presencia y cómo pueden ayudar a ahorrar electricidad. Ahora bien, ¿realmente nos ayuda a ahorrar energía o es algo que difícilmente vamos a notar? En este artículo vamos a tratar este tema, para que puedas comprobar si en tu caso realmente te va a ayudar a gastar menos.
Los sensores de presencia no siempre ahorran energía
En primer lugar vamos a hablar brevemente de qué es un sensor de presencia o de movimiento. Básicamente es un sensor que vamos a colocar en algún lugar y sirve para activar algo, generalmente luces, en cuanto detecta que hay presencia. Por ejemplo que se encienda la luz de una habitación cuando entramos y se apague al salir.
Pero la cuestión es si realmente nos ayuda a ahorrar energía. Podemos decir que sí, pero también que no; todo va a depender de dónde lo vayas a colocar y de si realmente le vas a dar uso. ¿Cuándo sería útil utilizar sensores de movimiento para encender o apagar luces? Lo ideal es ponerlo en zonas donde haya mucho movimiento de personas.
Por ejemplo, los puedes poner en la entrada de un edificio, un garaje, un pasillo de una oficina… Sitios por los que pasa bastante gente al cabo del día y esto va a evitar tener que encender y apagar luces y que, inevitablemente, queden encendidas más tiempo del necesario por olvido en muchos casos.
Pero en una vivienda, en una casa común, es complicado que realmente nos ayude a ahorrar energía. Piensa que la luz no siempre se apaga inmediatamente después de dejar una habitación, por lo que va a tardar algo más que simplemente pulsar el interruptor. Por tanto, a nivel doméstico únicamente podría ayudar a ahorrar energía si constantemente olvidamos apagar las luces cuando salimos de alguna habitación.
Sensor de movimiento para apagar aparatos
Un caso distinto es el de utilizar sensores de movimiento para poder apagar diferentes aparatos, como puede ser una estufa. Existen enchufes inteligentes que cuentan con un sensor de movimientos y se activa o desactiva al detectar el paso de alguien. Suelen ser regulables y los puedes configurar para que reaccione en unos segundos o espere unos minutos.
Puedes ver algunas opciones:
La idea de estos sensores de movimiento integrados en enchufes inteligentes es que apague algo que consuma bastante cuando salimos de la habitación o incluso de casa. Si pasa un tiempo y no hemos vuelto, directamente lo apaga. Podría ser útil, por ejemplo, en una estufa que tengas en una habitación y solo quieras que esté enchufada cuando estés allí. Si por ejemplo dejas la habitación para ir a comer o sales un rato de casa y te olvidas apagarla, el sensor de movimiento habrá detectado que dejaste la habitación y apagará esa estufa.
En esos casos sí son realmente útiles los sensores de movimiento para ahorrar en la factura de la luz en casa. Hemos puesto el ejemplo de una estufa, pero realmente puedes conectar cualquier otro aparato. Incluso podrás controlarlo de forma remota, ya que se conecta a la red Wi-Fi. Debes optimizar la conexión de Internet y evitar fallos.
En definitiva, como ves puedes llegar a ahorrar en la factura de la luz al utilizar sensores de movimiento o presencia. Eso sí, no siempre va a ayudar realmente a este objetivo. Debes analizar si realmente te interesa o en tu caso no vas a tener ninguna mejora.