Tener un buen router puede ser la solución a conseguir que la conexión de Internet sea más veloz y estable. Sin embargo, entran en juego otros factores. Por ello, en este artículo vamos a explicarte por qué tener el mejor router del mercado no te garantiza tener buen Internet. A veces, necesitas hacer algunos cambios para evitar fallos y lograr así aprovechar la conexión de red que tienes contratada.
En muchos casos, cuando la conexión de Internet empieza a ir mal, puede que te plantees comprar otro router nuevo. Sí es cierto que un aparato más potente podría ayudarte a conseguir una señal mejor, tener menos cortes y, en definitiva, lograr un mayor rendimiento. Pero cuidado, ya que no es lo único que importa.
Un router potente no garantiza buena conexión
¿Qué significa tener un buen router? Por ejemplo, es importante que tenga los últimos estándares disponibles, como son Wi-Fi 6 o WPA3. También lo es que ofrezca una gran cobertura o que permita tener muchos aparatos conectados, además de la velocidad máxima que admita o el hecho de tener puertos Gigabit Ethernet.
Ubicas mal el aparato
Sin duda, uno de los errores principales es ubicar mal el router. Esto va a hacer que, aunque tengas el mejor dispositivo posible, la conexión no funcione todo lo bien que podría ir. Por ejemplo, puede que lo coloques en una zona muy alejada de la vivienda, cerca de paredes o muros que puedan bloquear la señal.
Lo ideal es que lo pongas en una zona central de la vivienda o, en su defecto, cerca de donde realmente necesitas tener buena conexión. Solo así tendrás una señal óptima, que permita conectar dispositivos de todo tipo y no tener problemas de cobertura. Además, conviene que esté en un lugar elevado.
Tus dispositivos no son compatibles
Otro motivo por el cual puedes tener problemas con la conexión de Internet, aunque utilices un buen router, es no tener dispositivos compatibles. ¿Qué significa esto? Por ejemplo, tal vez tengas aparatos que no pueden funcionar con Wi-Fi 6. Aunque tengas un router que sí tenga esta opción, no vas a poder alcanzar la máxima velocidad.
Lo mismo ocurriría si tu ordenador no admite cables Gigabit Ethernet, por lo que estará limitado a un máximo de 100 Mbps. Por tanto, es esencial tener equipos que puedan aprovechar realmente tu router, ya que de lo contrario daría igual tener un modelo mejor o peor de cara a tener buena velocidad o cobertura.
Saturación de red
Un factor más a tener en cuenta, es que la red podría estar saturada. Esto ocurre cuando tienes muchos dispositivos conectados al mismo tiempo o cuando tus vecinos están ocupando el canal del Wi-Fi que tú usas. Aunque un buen router puede admitir más dispositivos conectados, llega un momento en el cual puedes tener problemas igualmente.
Lo que te recomendamos hacer, es controlar el canal del Wi-Fi que utilizas. También podrías apagar aquellos aparatos que no utilizas frecuentemente. Con esto último, liberarás la red inalámbrica y evitarás que se sature con facilidad. Podrás aprovechar mejor el ancho de banda y las características de tu router.
Problema de software
Además de todo lo anterior, podría haber algún problema a nivel de software. Generalmente, esto ocurre cuando hay algún malware en tu dispositivo o algún programa que está interfiriendo en la señal. Puede hacer que la velocidad no sea la correcta y que no puedas aprovechar toda la capacidad que tiene esa conexión.
En este caso, lo que debes hacer es asegurarte de que tienes bien configurado tu dispositivo, libre de amenazas y programas que puedan ser un problema. Revisa muy bien todo y así evitarás problemas que no te permitan tener una buena velocidad de Internet.
Por tanto, como ves, el hecho de tener el mejor router no te garantiza una buena conexión de red. Puedes tener problemas de velocidad igualmente, cortes y fallos generales. Es importante que tengas en cuenta la compatibilidad de los dispositivos, que todo esté bien configurado y ubicar muy bien el router en casa.