Si usas este gestor de contraseñas, estás obligado a hacer este cambio por seguridad

No hay dudas de que utilizar una contraseña fuerte, es la principal barrera de seguridad. Es lo que puede evitar que cualquiera entre en una cuenta, como puede ser una red social, correo electrónico, etc. Sin embargo, es bastante común utilizar claves que son débiles y eso es un problema. Ahora, desde LastPass, uno de los principales gestores de contraseñas, van a obligar a hacer un cambio importante para potenciar la seguridad.
Se trata de utilizar contraseñas que sean más fuertes y, como mínimo, van a tener que contar con 12 caracteres. Esto obliga a todos los usuarios, tanto nuevos como actuales, a cambiar sus claves si no cumplen este requisito. Como vas a ver, es algo fundamental para no tener problemas para proteger cualquier registro.
LastPass obliga a aumentar las contraseñas
Desde LastPass, han notificado a los usuarios un cambio importante: deben utilizar contraseñas maestras de, al menos, 12 caracteres. Hasta ahora, y desde hace ya bastantes años, han recomendado utilizar claves que contengan, como mínimo, esa cantidad de caracteres. Sin embargo, muchos usuarios seguían teniendo claves más cortas, lo cual es un problema para la seguridad.
De hecho, de forma predeterminada ha estado establecido en esos 12 caracteres como mínimo. Sin embargo, la última palabra la tenían los usuarios, quienes podían utilizar claves más cortas. Además, a las cuentas nuevas o al restablecer la clave, desde abril del año pasado, les exigían tener una contraseña maestra de estas características.
Ahora, esto se amplía a todos los usuarios ya registrados. Van a tener que hacer este cambio para poder seguir utilizando LastPass. Esto va a empezar a aplicarse desde este mismo mes de enero. El objetivo no es otro que aumentar la seguridad y evitar así que puedan acceder a las cuentas y tener el control de cualquier plataforma almacenada.
Por tanto, si tienes una cuenta de LastPass, y tu contraseña es inferior a 12 caracteres, vas a tener que cambiarla por otra más larga. Piensa que, por cada letra o número que amplíes una clave, vas a lograr que la seguridad aumente de forma exponencial y tengas una mayor protección en tu día a día.
Utiliza claves fuertes
Más allá de la longitud de una contraseña, desde LastPass recomiendan tener en cuenta otros factores. Por ejemplo, esa clave debe contar con letras (tanto mayúsculas como minúsculas), números y otros símbolos especiales. Por supuesto, esa clave debe ser única, por lo que no deberías utilizarla en ningún otro lugar.
Otra recomendación es que esa contraseña no contenga datos personales. Por ejemplo, no pongas tu nombre, apellidos, fecha de nacimiento, números de móvil y similares. Es cierto que esto va a ser más sencillo de memorizar, pero realmente es un problema si tenemos en cuenta la seguridad. Nunca debes usar cosas fáciles de adivinar.
Como consejo adicional, conviene cambiar las contraseñas de vez en cuando. No solo nos referimos a LastPass, o cualquier otro gestor de claves, sino en cualquier otro servicio o plataforma que utilices. Eso ayudará a aumentar la protección y reducir el riesgo de problemas. Igual que puedes crear una directiva de contraseñas en Windows, lo puedes aplicar a otros sistemas.