Las contraseñas son la primera barrera de seguridad para proteger una cuenta y evitar intrusos. También es esencial para que no entren en una red inalámbrica. En este artículo vamos a centrarnos en la contraseña del Wi-Fi. Vamos a hablar de cuándo deberías cambiarla y qué tener en cuenta. El objetivo es proteger tu red Wi-Fi y evitar intrusos que afecten a tu conexión de Internet.
Cuándo cambiar la clave del Wi-Fi
Es importante tener una buena contraseña del Wi-Fi y saber cuándo cambiarla es esencial para no tener problemas. No es buena idea tener una clave débil, que pueda tener alguna vulnerabilidad o no cumplir con los requisitos adecuados para evitar problemas de seguridad.
Tienes la que venía de fábrica
Un motivo claro para cambiar la contraseña del Wi-Fi es si mantienes la que venía de fábrica. Eso es un error importante, ya que esa clave de acceso puede ser vulnerable a ataques. Un atacante podría utilizar herramientas y aplicar su conocimiento para entrar en tu red inalámbrica si sabe cuál es el modelo exacto.
Hay casos en los que resulta muy sencillo romper una clave del Wi-Fi en routers más antiguos si mantienen la que viene predeterminada. Por tanto, nuestro consejo es que la cambies si mantienes la misma que venía.
Crees que hay o ha habido intrusos
Por supuesto, si tienes la más mínima sospecha de que ha podido haber intrusos en tu red Wi-Fi, es un motivo evidente para cambiar la clave. Por ejemplo si has mirado los equipos conectados y has visto alguno extraño y sospechas que puede ser un atacante o si anteriormente prestaste la contraseña y dudas de si pueden estar conectándose.
En estos casos es importante que tomes medida lo antes posible para cambiar la clave de acceso a la red Wi-Fi y evitar así problemas que puedan comprometer la seguridad de tus dispositivos conectados.
Hace mucho que no la cambias
¿Llevas tiempo sin cambiar la contraseña del Wi-Fi? Para optimizar al máximo la seguridad, lo ideal es cambiar las claves de acceso de vez en cuando. De esta forma puedes evitar problemas si se ha llegado a filtrar por error, hay alguna vulnerabilidad o simplemente están intentando acceder a través de fuerza bruta.
Por tanto, nuestro consejo es que no tengas una misma clave durante mucho tiempo. No significa que esa contraseña no pueda seguir siendo segura, pero para tener la máxima seguridad posible conviene cambiarla.
Utilizas una contraseña débil
Este punto es importante. Es muy importante que tengas una contraseña que sea fiable y cumpla con los requisitos de seguridad. Nunca debes estar usando una clave que contenga tu nombre, fecha de nacimiento o número de teléfono, por ejemplo. Un atacante podría usar esa información y utilizar diferentes combinaciones hasta dar con la correcta.
Una contraseña segura debe ser totalmente aleatoria, contener letras (tanto mayúsculas como minúsculas), números y otros símbolos especiales. No la utilices en ningún otro sitio y además es importante que tenga una longitud adecuada. Cada letra o número adicional hará que sea mucho más segura.
En definitiva, como ves hay ciertos motivos para cambiar la contraseña del Wi-Fi. Puedes incluso usar una clave distinta para cada banda del Wi-Fi. Sin duda no debes estar usando una clave que sea débil, ya que podría afectar al rendimiento de la conexión.