Cuando queremos montar un servidor NAS en casa para guardar nuestros archivos, tener sincronización de datos en la nube privada, o simplemente para gestionar la domótica en el hogar, en muchas ocasiones nos preguntamos si montarnos nuestro propio equipo casero o bien comprar un NAS comercial de fabricantes como QNAP, Synology o ASUSTOR. Dependiendo de tus conocimientos sobre sistemas operativos, redes y almacenamiento, de tu presupuesto y las necesidades hardware, en algunos casos conviene más montarse uno de forma casera o directamente comprar uno comercial de estos fabricantes. Hoy en RedesZone os vamos a enseñar todo lo que debes tener en cuenta para decantarse por una opción u otra.
Diferencias de hardware
La principal diferencia entre un NAS casero y uno comercial está en el hardware, y no nos referimos a la potencia de dicho hardware, sino a la posibilidad de personalización del servidor. Si te lo montas de forma casera podrás elegir los componentes hardware que tú quieras sin ningún tipo de límite, por lo tanto, podrás elegir lo siguiente:
- Placa base: es la parte más importante de tu servidro, debe tener muchos puertos SATA3, soporte para NVMe y también varios puertos PCIe con el objetivo de ampliar las posibilidades del equipo.
- Procesador principal a utilizar, podemos elegir entre usar una CPU de bajo consumo o una muy potente.
- Memoria RAM: tanto en tipo de RAM, velocidad, si es ECC o non-ECC así como la capacidad total de la memoria.
- Almacenamiento: dependiendo del número de puertos SATA3 de la placa base y de la caja que elijas, podrás tener un mayor número o un menor número de bahías para alojar discos duros. También podrás instalar unidades NVMe en el equipo si es que la placa base lo soporta, además, también podrías instalar unidades SSD SATA3 para acelerar enormemente el rendimiento global del almacenamiento.
- Tarjeta de red: aunque la placa base incorpora una o dos tarjetas de red internamente, podemos ampliar esta conectividad a través de los puertos PCIe que incorpora la placa base.
- Tarjeta gráfica: en el caso de que vayas a realizar transcodificación de vídeo, sería muy recomendable instalar una GPU en el interior del servidor para que el rendimiento sea óptimo.
En un equipo casero vamos a poder elegir todos estos componentes de forma manual, en este caso tenemos una libertad total de poner al servidor lo que nosotros queramos. Actualmente hay hardware de segunda mano de Dell o HP que es bastante potente y permite ampliación gracias a los puertos PCIe, por lo que es una muy buena alternativa a los modelos comerciales.
Respecto a los NAS comerciales, sí es cierto que tenemos una gran variedad donde elegir, tanto los modelos de gama baja, media como modelos de gama alta, pero están claramente más limitados a nivel de hardware en cuanto a ampliaciones. Hay muchos modelos que sí disponen de un puerto PCIe, pero solamente uno, aunque hay otros modelos que disponen dos o tres puertos PCIe para instalar tarjetas gráficas e incluso tarjetas 10G, no obstante, esto generalmente sólo ocurre en los modelos de gama muy alta.
Aunque los propios fabricantes venden sus tarjetas de ampliación, en muchas ocasiones también son compatibles con otras marcas sin ningún problema, por lo que podrás ampliar los NAS sin necesidad de comprar las tarjetas de expansión de sus modelos, no obstante, nuestra recomendación es que compréis las del mismo fabricante para asegurarnos al 100% de la compatibilidad con el sistema operativo.
Ahora que ya sabemos las diferencias a nivel hardware, vamos a ver qué diferencias tenemos a nivel del sistema operativo.
Diferencias del sistema operativo
Si nos montamos nuestro propio servidor tendremos que instalar un sistema operativo para NAS, generalmente se utiliza un sistema operativo orientado a NAS porque ya tienen todas las herramientas instaladas, y todo ello lo podremos gestionar de forma muy fácil vía web en local. Debido a que tenemos muchos sistemas operativos de este estilo, tendremos que elegir uno entre todos los que existen para que sea la base de nuestro servidor. Ahora mismo nuestra recomendación de sistemas operativos son los siguientes (por orden):
- TrueNAS CORE (está basado en FreeBSD)
- TrueNAS SCALE (está basado en Linux).
- XigmaNAS (está basado en FreeBSD).
- OpenMediaVault (está basado en Debian).
Todos estos sistemas operativos los tendremos que instalar de forma manual siguiendo diferentes tutoriales que hay en Internet, para posteriormente realizar una configuración del sistema desde cero. Gracias a la interfaz gráfica de administración, la creación de los diferentes conjuntos de almacenamiento no es demasiado complicada, no obstante, creemos que es bastante más complicado que en los sistemas operativos de los NAS comerciales, ya que estos últimos tienen asistentes de configuración paso a paso que nos va explicando todo lo que debemos hacer y el funcionamiento.
Actualmente cada marca comercial dispone de un diferente, aunque todos ellos están basados en Linux. Por ejemplo, uno de los más completos y que más nos gustan es QTS de QNAP que está basado en Linux y usa el sistema de archivos EXT4, y también el QuTS hero que está basado en Linux pero el sistema de archivos es ZFS con todo lo que ello implica. El sistema operativo ADM de ASUSTOR también es muy completo y tenemos muchas posibilidades de ampliar sus funcionalidades a través de la tienda de aplicaciones, además, también permite virtualización de sistemas operativos completos e incluso Docker.
Diferencias del software a instalar
Mientras que en los sistemas operativos para servidores «caseros» la instalación debe hacerse de forma manual, por lo que necesitaremos ciertos conocimientos avanzados de administración de sistemas y también de Linux y FreeBSD, en los sistemas operativos que tenemos en los NAS comerciales es mucho más sencilla esta tarea.
Todos los sistemas operativos de QNAP, Synology y ASUSTOR disponen de una tienda de aplicaciones como si fuera un smartphone con Android y iOS, gracias a estas tiendas de aplicaciones vamos a poder instalar de forma fácil y rápida casi cualquier aplicación que nosotros queramos, además, también tenemos la posibilidad de descargar de Internet un archivo con el programa en concreto si es que no existe en la tienda de aplicaciones.
Conclusiones
Si quieres tener un NAS casero debes saber que te lo tendrás que montar por ti mismo componente a componente, o pedirlo ya montado, aunque también tienes la posibilidad de comprar servidores ya configurados de Dell o HP a muy buen precio, aunque sean algo antiguos. Dependiendo de tus requisitos y necesidades, tendrás que recurrir a unos modelos u otros, o hacerlos directamente desde cero. En este caso se necesita tener ciertos conocimientos de hardware de ordenadores con el fin de elegir los componentes ideales para ti, de lo contrario estarás bastante perdido.
En cuanto al sistema operativo, estamos en la misma tesitura. Tendrás que revisar qué opciones de configuración y posibilidades tiene cada sistema operativo, y posteriormente ver qué posibilidades de ampliación a nivel de software podemos realizar. Si quieres tener un sistema operativo que permita ampliación con aplicaciones y que sea muy fácil de configurar, está claro que los NAS comerciales son mucho mejores porque ya viene preparado para que no tengas ningún problema.