Tener una buena velocidad de Internet es fundamental para poder navegar, descargar archivos o simplemente ver un vídeo por YouTube. Pero en muchas ocasiones no es posible y tenemos problemas. En este artículo vamos a hablar de por qué y cómo Windows limita la velocidad de Internet y hace que puedas usar menos. También daremos algunos consejos para que logres aumentarla lo máximo posible y evitar problemas.
Siempre queremos aprovechar nuestra conexión a Internet lo mejor posible, sobre todo si tenemos una velocidad de conexión muy baja, ya sea por ADSL2 o VDSL2, aunque también tenemos poco ancho de banda si nos conectamos vía 4G o 5G, en comparación con las velocidades que podemos conseguir con la fibra óptica hasta el hogar.
Límite de ancho de banda de Windows
Cuando navegamos por Internet queremos que la velocidad sea máxima y que todo funcione bien. Sin embargo, hay determinados factores que van a afectar, como puede ser que haya un programa que consuma demasiados recursos o incluso un virus. Algo así pasa con Windows, pero en realidad es legítimo. El problema es que muchos usuarios desconocen esto: Windows reserva el 20% del ancho de banda para procesos importantes.
Sea cual sea la tarifa de Internet que contrates, Windows va a reservarse un porcentaje para determinados procesos. Por ejemplo, lo utiliza para actualizar el sistema. Si vas a descargar un archivo de Internet o ver una película en Streaming, vas a consumir recursos. Vas a hacer que incluso el ancho de banda contratado llegue al límite, si no es muy amplio y estás bajando un gran archivo de Internet a máxima velocidad. Es justo en ese momento cuando entra en juego el límite que se reserva Windows.
Si comienza a actualizarse el sistema y estás descargando un archivo o video en Streaming, tal vez notes problemas ya que va a ralentizarse un 20%. Esa parte del ancho de banda va a estar dirigida a determinados procesos de Windows. Es lo que va a reservarse el sistema de Microsoft para no tener problemas.
Ahora bien, esto no significa que estemos permanentemente limitados. No significa que vayamos a tener un 20% menos de velocidad. Esto únicamente va a activarse cuando realmente Windows lo necesita, como puede ser cuando haya una actualización pendiente y le demos a actualizar.
Esto lo puedes cambiar. Puedes gestionar el límite reservado de Windows. También puedes modificar específicamente en Windows Update. Allí tienes que ir a Opciones avanzadas, Optimización de distribución y nuevamente a Opciones avanzadas. Una vez allí tienes la opción de configurar diferentes parámetros para limitar el ancho de banda que se va a utilizar o un porcentaje. Al menos te garantizas que las actualizaciones de Windows no chupen mucho Internet.
Gracias a esta opción de configuración, por un lado, tenemos la posibilidad de reservar ancho de banda en descarga y subida para las actualizaciones del sistema operativo Windows. Sin embargo, por otro lado, notarás que la descarga de las actualizaciones se hace realmente lentas, por lo que deberás valorar qué prefieres: que tarden más las actualizaciones o que tengas todo el ancho de banda disponible para tu uso.
Otros programas también limitan
También debes tener en cuenta que hay algunas aplicaciones que pueden limitar la velocidad de Internet. Una de ellas es cuando utilizas programas de descarga. Lo que harán en muchos casos es anteponerse a otras aplicaciones que estés utilizando, como por ejemplo el navegador, alguna herramienta para realizar videollamadas… Eso puede hacer que haya cortes y no funcione bien. Para evitar problemas, siempre puedes poner un límite máximo. Es decir, puedes hacer que no consuma más de una determinada velocidad de bajada o subida. De esta forma te garantizas que siempre vas a tener ancho de banda suficiente para poder navegar sin problemas, ver vídeos en Streaming en alta calidad o usar aplicaciones como Skype sin cortes.
Pero, además, puede haber programas maliciosos que estén consumiendo tu ancho de banda sin que lo sepas. El malware puede colarse al instalar una aplicación cualquiera y estar limitando la velocidad de Internet sin darte cuenta. En este caso lo mejor es utilizar siempre un buen programa de seguridad que detecte la entrada de software que pueda ser un peligro.
Los routers disponen de una tecnología llamada QoS (Calidad de servicio) que nos permitirá priorizar cierto tráfico frente a otro, de esta forma, podemos configurar el QoS del router para que los juegos online o la navegación web tengan la máxima prioridad, pero, sin embargo, las descargas P2P tengan la menor prioridad posible para que el funcionamiento del equipo sea óptimo. Esto no solamente mejorará nuestra conexión con un PC, sino que hará que las descargas de un ordenador interrumpan al resto de dispositivos de nuestro hogar. Siempre es muy recomendable tener un sistema de QoS para priorizar cierto tipo de tráfico como los juegos online, llamadas VoIP o las videollamadas, mientras que otro tráfico que no es «urgente» como el P2P, podemos dejarlo sin prioridad para que no interfiera con el buen funcionamiento de la red.
Consejos para que la velocidad sea buena
Independientemente del límite que Windows tiene sobre el ancho de banda, ¿qué podemos hacer para lograr que la velocidad sea buena? Lo más importante es tener los dispositivos preparados. Esto incluye al router, pero también a cualquier aparato que vayamos a usar, como un ordenador o móvil. Es importante que estén actualizados, protegidos y en buen estado. Incluso puedes cambiar el Registro de Windows para mejorar la velocidad de red.
Si te conectas de forma inalámbrica y la cobertura no es la mejor, siempre puedes optar por algún dispositivo que ayude. Por ejemplo, puedes usar un repetidor Wi-Fi, un sistema Mesh o también dispositivos PLC. Todas estas opciones van a permitir que la calidad de la señal sea mejor. Para descartar que el problema esté en la red local, lo que puedes hacer es conectarte por cable de red Ethernet directamente al router, y no usar la conexión WiFi para las pruebas, porque es posible que el culpable sea la conexión inalámbrica y no lo sepas.
En definitiva, como has podido ver Windows va a utilizar un límite reservado del ancho de banda de la conexión. Esto lo puedes disminuir, si quieres, para evitar problemas en determinados momentos en los que necesites la máxima velocidad.