Esta duda suele aparecer en muchos casos. Podemos preguntarnos si gastamos más lavando los platos a mano o usando el lavavajillas. Vamos a intentar responder a esta cuestión, para que puedas tener ambas opciones y elegir la que más te convenga en cada caso. También te vamos a explicar cómo puedes ahorrar más, con el objetivo de pagar menos agua y también en la factura de la luz.
Normalmente tendemos a pensar que el uso de electrodomésticos, como es el caso del lavavajillas, va a hacer que el consumo aumente. Pero esto no siempre es así. Especialmente no es así si se trata de aparatos modernos, optimizados y que podamos configurar correctamente para gastar menos. Hoy en día los lavavajillas disponen de programas de lavado en eco, los cuales nos permitirán ahorrar tanto en energía eléctrica como también en agua.
Lavar a mano no gasta menos
Respecto a la pregunta de si gasta más el lavavajillas o lavar a mano, podemos decir que depende. En líneas generales, podemos decir que lavar a mano va a gastar bastante más agua que hacerlo con el lavavajillas. Es decir, si tenemos 30 platos y los lavamos una vez a mano y otra vez con el lavavajillas, con esta última opción vamos a ahorrar agua y vamos a gastar menos. Al menos, en líneas generales.
¿Por qué decimos que depende? No es lo mismo poner el lavavajillas lleno, que hacerlo con pocos platos. Si lo pones con pocos platos, vas a gastar agua que realmente no vas a aprovechar. Por ejemplo, si simplemente vas a lavar 2 o 3 platos, entonces te sale más rentable lavarlos a mano. En cambio, si vas a lavar muchos es mejor poner el lavavajillas.
Pero, hay otro factor que va a ser determinante: cómo es el lavavajillas. No es lo mismo un aparato antiguo o que pueda estar dañado, que uno moderno. En este último caso, van a consumir bastante menos electricidad y agua, por lo que sí va a ser mejor que lavar a mano y vamos a poder ahorrar. Según indican desde Iberdrola, lavar los platos con agua caliente a mano puede llegar a consumir un 40% más de energía respecto a lavar con lavavajillas. Por lo tanto, lo más recomendable para nuestro ahorro es comprar un electrodoméstico que sea nuevo, y que disponga de la máxima eficiencia energética posible.
Configurar el lavavajillas, es clave
Además, es muy importante configurar bien el lavavajillas. Puedes gastar más o menos, en función de qué programa elijas. Si utilizas programas Eco, que la mayoría de electrodomésticos modernos lo tienen, vas a consumir menos electricidad. Esto es así, ya que por ejemplo calienta menos el agua o utiliza menos potencia. Salvo que sea necesario, puedes optar por estos programas de menor consumo.
Por tanto, justamente si hacemos uso de programas Eco y usas un electrodoméstico en buen estado, es aún más seguro que vas a ahorrar respecto a lavar los platos a mano. Eso sí, como decimos es clave llenar el lavavajillas lo máximo posible, tenerlo bien cuidado y usar programas que consuman menos. Aunque este programa Eco dure más que el programa de una hora, el consumo será claramente inferior tanto en energía eléctrica como también agua que gaste el lavavajillas. Es muy importante elegir siempre estos programas Eco para terminar ahorrando al cabo del mes un buen dinero.
En el caso de que tengas paneles solares sin batería o sin batería virtual, lo mejor que puedes hacer es poner el lavavajillas en las horas centrales del día donde tendremos la máxima producción solar, para que cuando el lavavajillas se ponga a calentar el agua, toda esa energía que necesitará será proporcionada directamente por los paneles solares, con el objetivo de que tengamos un consumo desde la red eléctrica de 0kWh, ideal para ahorrar lo máximo posible. Si tienes una batería en tu hogar, es posible que quieras dedicar esa energía para otros usos y no al lavavajillas, pero si te sobra energía, podrás gastarla y también te seguirá costando 0€ desde la red eléctrica. En el caso de que tengas una batería virtual donde el precio de los excedentes se pague al mismo precio que la energía importada, no importa a qué hora pongas el lavavajillas porque te costará exactamente lo mismo.
También debes tener en cuenta otros factores, como el uso de pastillas o líquidos para lavar, la sal específica (cuando proceda), además del agua y electricidad. Pero incluso sumando todo eso, siempre que se cumpla lo que hemos explicado es más rentable usar el electrodoméstico que lavar a mano. Vas a gastar menos agua y, además, va a ser eficiente en cuanto al lavado de múltiples platos.
En definitiva, como ves lavar a mano o con el lavavajillas puede gastar más o menos en función de varios factores. Si vas a lavar muchos platos y tienes todo bien configurado, ahorrarás usando el electrodoméstico. Si además es inteligente, y la red Wi-Fi aparece sin problemas, puedes controlarlo de forma remota y usarlo en las horas más baratas.