¿Quieres ahorrar en la factura de la luz en invierno? Es importante que tengas en cuenta ciertas recomendaciones que puedes poner en práctica. A veces, simplemente con usar cosas que ya tienes en casa, puedes tener resultados muy positivos. Por ello, en este artículo te vamos a contar qué puedes aprovechar de tu vivienda, con cosas que tal vez tengas, para intentar gastar menos cada mes.
El objetivo es mantener la vivienda a una buena temperatura, sin que ello suponga un gasto excesivo de electricidad. Y sí, puedes lograrlo. Al menos, puedes disminuir bastante el gasto de energía que vas a tener en los meses en los que la temperatura baja mucho y necesitas usar ciertos aparatos para ganar confort. Descubre cómo configurar Home Assistant con Cloudflare Tunnel.
Ahorrar luz en invierno
Puedes usar termostatos inteligentes, radiadores de bajo consumo y otros aparatos para intentar mantener la casa a buena temperatura, sin gastar en exceso. Sin embargo, en algunos casos lo que te puede ayudar es algo que ya tienes en casa y que puedes aprovechar para consumir menos o guardar la temperatura mejor.
Cortinas y persianas
Un ejemplo claro son las cortinas y persianas. Lo normal es que tu vivienda tenga ambas cosas en las ventanas. ¿Qué puedes hacer para ahorrar? La idea es bajar las persianas y correr las cortinas en función de la temperatura que haga fuera. Por ejemplo, por la noche es interesante bajar las persianas para que entre menos frío de fuera. En cambio, durante el día, cuando la temperatura sube, tal vez te interese que entre la mayor luz solar posible.
Por tanto, al usar las cortinas y persianas en casa, podrías ahorrar algo de energía en los meses de invierno. La clave está en utilizarlas correctamente, en el momento adecuado, y así intentar mantener mejor la temperatura, con el objetivo de tener que usar menos la calefacción o a menor potencia y gastar menos energía.
Regletas
¿Tienes alguna regleta en casa? Es otra cosa que probablemente tengas. En este caso, la idea es controlar mejor los electrodomésticos y aparatos que conectas a la red. Los puedes apagar simplemente con desconectar la regleta, lo cual te permitirá acabar con el consumo fantasma en muchos dispositivos y aparatos que van a consumir algo.
En invierno, esto lo puedes lograr al conectar aquí cosas como un calefactor, radiador o estufa. Para no olvidarte de apagarlos, simplemente puedes conectar todos ellos a una regleta donde vayas a conectar también otras cosas, como puede ser un ordenador o la televisión. La idea es desconectar todo de golpe, cuando vayas a salir, y así evitar gastar más de lo necesario. Es solo una idea, ya que los usos que puedes darle a una regleta son múltiples.
Burletes para ventanas
También puedes aprovechar burletes para puertas o ventanas. Puedes usar incluso materiales que puedas tener en casa, que hayas utilizado para otros usos anteriormente, o bien comprarlos. Pero, ¿qué son exactamente los burletes? Básicamente, son materiales que puedes poner para tapar las ranuras de las ventanas o puertas y así evitar que entre el frío de fuera.
El objetivo es que puedas mantener mejor el calor de tu vivienda. Eso ayudará a ahorrar energía, ya que podrás utilizar durante menos tiempo la calefacción y que el calor residual dure más. Si tienes una ventana por donde entra aire frío de fuera constantemente, es un problema para el ahorro.
Puedes ver algunas opciones de burletes para ventanas:
Es muy importante el aislamiento de las ventanas, ya que suele ser uno de los sitios por donde más se cuela el aire. Es muy importante tener un cristal con rotura de puente térmico, pero es aún más importante cómo están instaladas las ventanas. Alrededor de todas las ventanas debe haber espuma aislante para que no se cuele el frío ni tampoco el calor, además, notaremos que entra menos ruido desde la calle. Esto es fundamental hacerlo en todas las ventanas para tener el máximo aislamiento térmico, y así ahorrar mucho dinero al cabo de los años.
Aprovecha la domótica
¿Tienes dispositivos de domótica? También pueden ser útiles para ahorrar electricidad en invierno. Por ejemplo, puedes usar un enchufe con Wi-Fi para conectar una estufa o radiador. Vas a poder controlar el encendido y apagado, aunque no estés en casa. Eso permitirá que puedas tenerlos encendidos solo el tiempo necesario. Si instalas un sistema de domótica como Home Assistant tendrás la posibilidad de centralizar toda la gestión de los dispositivos, además, podrás añadir automatizaciones avanzadas en función de los sensores que tengas en tu hogar. Con una inversión de unos 500€ en un mini PC y diferentes dispositivos domóticos, podrás convertir tu casa en inteligente, y no solamente podrás ahorrar sino que también tendrás un mayor confort al realizar ciertas acciones de forma automática.
Algo similar podrías lograr con sensores de domótica o termostatos inteligentes. Puedes gestionar mejor la temperatura, detectar la entrada de aire frío si una ventana está abierta, etc. Como en los demás casos, lo que buscamos es mantener mejor la temperatura y no tener que gastar en exceso energía. Necesitas una buena conexión para usar la domótica, por lo que tal vez tengas que mejorar el uso de los PLC Wi-Fi o dispositivos que utilices.
Como ves, puedes aprovechar lo que ya tienes en casa para ahorrar en la factura de la luz durante el invierno. Aunque siempre tienes la opción de mejorar tus electrodomésticos y podrías comprar ciertos aparatos, en ocasiones basta con lo que ya tienes en tu vivienda.