Haz esto con tu repetidor Wi-Fi y tu conexión irá mejor

Haz esto con tu repetidor Wi-Fi y tu conexión irá mejor

Javier Jiménez

Cuando tienes problemas con la conexión de Internet, una posible solución es usar un repetidor Wi-Fi. Puede ayudarte a que la señal llegue mejor a diferentes lugares de la vivienda y poder así conectar dispositivos a la red inalámbrica. Sin embargo, a veces podría funcionar mejor de lo que lo hace. Puedes tener en cuenta algunas recomendaciones útiles. Nos vamos a centrar en un pequeño paso que puedes realizar de vez en cuando y hace que funcione mejor o, al menos, evitar que pueda tener problemas.

Esto lo puedes hacer en cualquier repetidor inalámbrico que utilices. No importa cuál sea el modelo que estás usando, ya que siempre podría haber fallos y dificultades para lograr una conexión aceptable. Por ello, vamos a darte un consejo útil que puedes poner en práctica en cualquier momento.

Reinicia tu repetidor

Alguna vez hemos recomendado reiniciar el router de vez en cuando. Viene bien para solucionar pequeños fallos que puedan aparecer y lograr que siempre esté a pleno rendimiento. Pues eso mismo puedes hacer, pero en el caso del repetidor. A fin de cuentas, es otro aparato más que tienes conectado a la red y que podría saturarse o tener dificultades para funcionar bien.

Tanto si notas que tu repetidor no va tan bien como debería, como si simplemente quieres mantenerlo en buen funcionamiento, una buena idea es reiniciarlo de vez en cuando. Vas a lograr darle un respiro, un reinicio rápido, para que los procesos se reseteen. Especialmente, si conectas muchos aparatos a un repetidor, podría empezar a ir mal y saturarse.

¿Cada cuánto tiempo reiniciar el repetidor Wi-Fi? Realmente no hay un tiempo claro, sino que va a depender de cuánto utilices el aparato, cuántos dispositivos conectes, etc. Ahora bien, para que te hagas una idea, mejor reiniciarlo una vez a la semana que esperar varios meses. Puedes hacerlo siempre que te acuerdes o incluso configurarlo para que se haga solo, como puede ser al conectarlo a un enchufe inteligente y poner, por ejemplo, que se reinicie cada miércoles a las 3 de la mañana.

Cuando lo vayas a reiniciar, es importante que lo hagas correctamente. Lo mejor es que lo mantengas apagado 20-30 segundos y después lo enciendas. No lo apagues y lo enciendas de inmediato. Es igual que en el caso del router.

Ubícalo bien

Un factor también esencial es ubicar el repetidor muy bien. Aléjalo de posibles fuentes de calor, como puede ser cerca de una ventana o ponerlo al lado de otros aparatos que puedan desprender calor. Eso va a hacer que tenga mayor temperatura y aparezcan problemas al conectar aparatos. Tendrías que reiniciarlo más frecuentemente.

Además, ubicarlo bien significa que va a repartir mejor la señal. No lo pongas cerca de un muro o pared gruesa. Lo mejor es que esté en una zona donde realmente pueda potenciar la señal inalámbrica y puedas conectar otros aparatos sin problemas. Evita ponerlo cerca de dispositivos que puedan generar interferencias, como son que funcionan por Bluetooth.

En definitiva, reiniciar el repetidor Wi-Fi puede ayudarte a lograr un funcionamiento óptimo del mismo. Es clave también ubicarlo correctamente y no ponerlo cerca de interferencias o equipos que puedan generar problemas. Siempre está la opción de tener Internet por toda la casa por cable, aunque el Wi-Fi esté más presente.

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